Hether: Mi Destino era ser madre, cuando lo entendí y me ubique en mi lugar mi vida cambio para bien

Mí castigo por hablar durante un partido de futbol, el no ver los partidos de finales  durante los siguientes 4 fines de semana y  el ocupar su lugar para atender a las amigas de mí hermana.

 

Cuando acepte pensé que iba a ser fácil atender a 5 mujeres que estarían en al casa, servir algunos tragos y pasarla divertido, acepte pensando que sería así, porque sus amigas eran muy pesadas y no dijo de su forma de ser sino eran una mujeres gordas que trabajaban manejando grúas  y camiones de minas, mí hermana también trabajaba en la mina,  se tornaron muy pesadas pidiendo cervezas, botanas y ensuciando la casa, pero debía aguantarme había perdido mí trabajo y por falta de oportuniadades regrese a mí pueblo natal con hija y mí hijo.

Pero debía ganar algo con este castigo, aposte que podría pasarlo sin que sus amigas supieran que era su hermana, ella les diría queyo  era su prima Heather, mí hermana acepto la apuesta, si lo lograba ganaría una buena cantidad de dinero y me serviría para dar el fondo para un departamento propio, solo necestitaba conseguir un trabajo estable, pero tenía toda seguridad en conseguirlo, no sabia como pero lo iba a lograr por el bien de mis hijos.

Durante la semana previa al primer partido de las semifinales debía prepararme lo mejor posible o desde ese momento perdería la apuesta y debería darle mis últimos fondos.

Durante la semana uno de mis deberes era   limpiar el ático, además de hacer la casa y preparar la comida, el argumento de mí hermana era de que si me dejaba vivir en su casa al menos debía limpiarla, deseaba que mí hermana no fuera tan pesada conmigo, pero debía aguantar si quería que mejoraran las cosas, el día lunes estuve ocupado haciendo la casa después de dejar a mí hijos en la escuela, pero el día martes subí al atico para comenzar a limpiarlo.

Durante las dos primeras horas me dedique a acomodar cajas y a limpiar, al hacer eso logre tener espacio para pasar hasta el fondo del ático donde había más cajas, mí hermana por tener casa propia mis primos le habían dejado sus cosas cuando se fueron a la ciudad capital, una de ellas fue mí prima Heather, siempre fuimos muy apegados por tener la misma edad, en los sepelios y fiestas familiares siempre jugábamos juntos, en la secundaría nuestras familias se alejaron por culpa de mí padre y nos llevó a vivir con él, mí hermana se apegó a él por ser más grande que yo, siempre la llevaba al béisbol y jugaba con ella al futbol, por eso se hizo muy masculina y comenzó a trabajar con mí padre en la mina como chofer de camión.

Yo me quede con mí tía Bárbara y mis

primas para seguir estudiando, mi tía me ayudo a ir a laescuela técnica de leyes para ser asistente legal y por untiempo tuve un buen trabajo en un despacho legal de unviejo abobado, allí conocí a mí esposa que estudiaba parase abogada, le ayude que terminara su carrera, pero cuando lo hizo, ella tomó la decisión de irse con el hijo del viejo abobado cuando el murió, yo me quede sin trabajo y con dos niños, durante unos meses intente lograr sobrevivir en una ciudad que los valores donde los hombres eran los únicos que trabajaban ya no existían.

Regrese a mí pueblo natal, pero me entere que mí tía había muerto hacia unos meses y mis primas estaban desperdigadas por el pueblo, mí hermana se había quedado con la casa de mí padre, durante la siguiente hora me puse a checar cajas que ya llevaban mucho tiempo y revisar su contenido, la mayoría eran de mis primas cuando eran solteras y le dijeron que en cuanto pudieran regresarían por sus cosas, pero llevaban por lo menos 3 años las cajas más recientes, conforme me acercaba al final del ático descubrí 10 cajas en color verdes con un logo de tienda de ropa muy conocida, cuando pude llegar a la primera y abrirla, descubrí que era ropa nueva de tienda, en las tapas estaba escrito el nombre de mí prima Heather, antes de irse con su novio, había trabajado en una tienda de ropa, con esos vestidos la dueña le había pagado, eran 10 cajas con mucha ropa nueva, la mayoría eran vestido y faldas, tenía todo para poder cubrir mí castigo fácilmente.

Durante la siguiente hora antes de ir por mis hijos a la escuela me dedique a sacar la ropa de su cajas y acomodarla en unos viejos percheros en el ático, pero ya no me daba tiempo para probármelos, lo que si era seguro que eran talla 32 o mediana, esa era la talla de mí prima.

Salí por mis hijos, mientras iba en el autobús observaba como se desenvolvían la mujeres que iban a la escuela por sus hijos, como caminaban o como se dirigían unas a otras, era una moda de decirse way.

También me dí cuenta que la mayoría de las mujeres que recogían a sus hijos venían del trabajo, pensaba como le hacían para cuidar a sus hijos, debía ser difícil trabajar y cuidar a los hijos.

Cuando me llegó el turno para recoger en la puerta a mis hijos la maestra con cierto misterio me pidió hablar con ella fuera de la fila de madres,  yo trataba de ver a mí hijos cuando salieran, la maestra en voz baja me pregunto si era raro o estaba de vacaciones?, extrañado le pregunte porque hacia esa pregunta, la maestra estaba entrada en años con calma y con una sonrisa en su cara me dijo el porque de su pregunta: Señor, lo que pasa es que en este pueblo quien se encarga de la casa y de los niños son las esposas, es raro ver que quien venga por ellos sea el esposo, este pueblo aun es tradicionalista, pero dejem decirle que los primeros días que vino por su hijos me confundió un poco por venir en shorts y luego en liggins de colores, regularmente los hombres de este pueblo no hacen ejercicios en gimnasio, su ejercicio es trabajando en la mina o en la maderera, es raro ver por la calle a un hombre con ropa de ejercicio, al menos que este enfermo o le pase algo muy raro, usted me entiende? Verdad?—yo no sabia si reir o decir que estaba muy enojado con su comentario, yo no era ningún raro, pero deje que la maestra siguiera su “consejo positivo”—señor, no quiero importunarlo solo es un consejo positivo, se ve que usted viene de la ciudad y se entiende, pero lo mejor es que su esposa traiga y lleve a los niños, se lo dijo por su proía seguridad, aquí algunos hombres no ven bien eso al menos que este de vacaciones que eso es lo más seguro, pero no se preocupe por mí comentario usted puede venir por sus hijos cuando guste, mire allí vienen, que tenga buena tarde—la maestra me dio la mano con superficialidad y se fue a ver a otra madre.

 

Mis hijos me saludaron con desgano  y nos fuimos caminando rumbo a la parada de autobús, el regreso a la casa era cansado para los niños el tener que esperar el camión y estuviera lleno de gente, además hiciera mucho calor y tener que caminar 3 calles calientes, pero lo hicimos, cuando llegamos me puse hacerles agua de sabor para que se quitaran el calor, cuando lo hice se los lleve a la sala para que tomara mientras veían la televisión, pero mí hija no quiso y comenzó a llorar tuve que consolarla por que se sentía mal por que no madre no estaba con ella y sus nuevos compañeros se burlaron de ella por ese motivo, mí hijo también tenía problemas con otros chicos y tampoco no le gustaba la escuela.

Estuve la tarde hablando con ellos, por la noche llegó mí hermana y como era costumbre en el último mes me exigió darle de comer, lo hice y me fui a dormir. 

Al día siguiente debía seguír mí labor de limpieza en el ático, pero antes debía ir a dejar a mis hijos a la escuela, esta vez use mis viejos pantalones vaqueros pero al ponérmelos se me rompieron, necesitaba otros pantalones recordé que en el ático había una caja con varios pantalones, subí y busque la caja, me puse uno para darme cuenta de que eran de mujer,

pero me quedaban ajustados y se notaban mis gorditos, pero se me hacia tarde y debía a ir a dejar a mis hijos, me puse mí camiseta Polo blanca, tome las mochilas de mis hijos y salimos corriendo a la escuela, llegamos justo a tiempo a la escuela, otra maestra diferente a la del día anterior me pidió hablar nuevamente conmigo, pensando que me iba a llamar la atención por traer a mis hijos, le iba a decir que mis hijos no tenían madre y yo los iba estar trayendo, pero me sorprendió que la maestra me apartara para decirme: con todo respeto y sin animo de que se ofenda, pero señora déjeme decirle que es mal gusto no usar brasiser, se que usted viene de la ciudad y lo entiendo pero le puedo recomendar la tienda de la Sra. Rosa Maria, esta en el centro tiene buenos precios en ropa, se lo dijo por el bien de usted y sus hijos, disculpe tengo que ver a mis alumnos—no me dejo decirle lo que pensaba, me fui caminando para no gastar en el autobús, eso me ayudaría a pensar las cosas que me estaban pasando, yo era un hombre llenito pero no gordo, mis pechos habían comenzado a crecer desde que llegue con mí hermana, no sabia lo que me estaba pasando, pero debía hacer algo con mí situación, sin darme cuenta pase por la tienda que la maestra me recomendó la Tienda de Rosa Maria, pero en el portón había un letrero que decía el Emporio de Thelma, una chica estaba fuera de la tienda limpiando los vidrios cuando me vio que estaba parado mirando hacia dentro, la chica me pregunto si necesitaba algo agregando el término de “Señora”, eso me hizo despertar de mis pensamientos, la chica no dejó 

que hablara de inmediato me ofreció unos brassieres que tenía en oferta, la chica me llamo dentro  y me indico que si quería podría probarlos, yo le dije que realmente solo estaba de paso, la chica no le importo oir mí voz ronca me siguió llamando señora, me dio un descuento del 15%, no perdía nada solo

viendo,  acepte entrar y la chica me dijo que no me iba arrepentir de entrar, de inmediato saco una cinta métrica y me tomo mis medidas, me ofreció un bra ”xs”  diciendo que tenía soporte para levantar mis pechos y eran muy suave, además tenía relleno, me ofreció varios modelos y colores, escogí colores suaves cálidos, mí tía le gustaba esos colores, la chica me llevaba a los vestidores y me pregunto si no estaba interesda por unas falda en promoción, le pregunte cual era la promoción, me dijo que en la compra de dos faldas podría llevarme una tercer prenda, ví el precio y me pareció dentro de mí pequeño presupuesto, acepte probármelas, me lleve cinco para ver cual me quedaba mejor, por tercer prenda escogí una blusa descubierta de los hombros, la combinación era muy parecida a como vestía mí prima Heather, quizás siempre me quise parecerme a ella, hasta en la forma de hablar, la chica no sospechaba que era hombre, era divertido y me estaba acostumgrando a que me dijera Señora, entre al pequeño cubículo, antes de quitarme la ropa descubrí que la camiseta si trasparentaba mis pechos y los hacia verse más grandes, el pantalón hacia que mí cintura se hiciera más pequeña que mí cadera dando una forma femenina, el hecho de que fueran strech y de que tuviera que echar para atrás mí pene para no lastimarlo, además de que mí cabello fuera largo, no podía afirmar que no era mujer,  ya estaba dentro de un vestidor de mujeres y tenía en la mano la ropa, me quite la ropa y me puse el bra para darme cuenta de que era realmente fantático el usar bra, mis pequeños pechos se levantaron y se hicieron

 redonditos como los de una mujer, la tela era muy suave y fresca, pensé que jamás me lo quitaría de nuevo, me puse la blusa para resaltar más los pechos y los hombros, las faldas me quedaban a la pefección, pero solo faltaba que la pantaletas fueran a tono con el bra y tendría un buenas combinaciones de ropa, en mí tercer cambio de ropa fue el exacto a mis medidas, salí para que me viera la chica vendedora y me diera su punto de vista profesional, la chica dijo que realmente me veia bien, tenía bonitas piernas y las falda hacia que vieran más bonitas, recordé que tenía piernas como las de mí prima Heather o mí Tia, le dije a la chica que me llevaría todo, la chica sonrio y dijo que si gustaba me podría llevar puesta la ropa, solo le quitaba las etiquetas para hacer el registro.

 

Tome las prendas que me llevaría y se las dí a la chica para que las registrara, me quede con la ropa puesta y le di los pantalones y la camiseta que traía para que me lo guardara en una bolsa, de mí cartera saque mí tarjeta de crédito en ese momento pensé por que lo estaba haciendo, la chica me pidió la tarjeta y sin pensar más de la dí, mientra hacia el pase de la tarjeta, me ofreció algunas otras cosas, como un prendedor para mí cabello, pulseras ,aretes y collares que estaban en el aparador, me gusto un dije de cristal  en forma de corazón, lo compre y una pinzas para el cabello y un juego de aretes, collar y prendedor, con eso acompletaba la misma imagen de mí prima HEATHER, solo mis tenis viejos decían que aun era yo mismo,  pero antes de irme la chica vendedora me dio un consejo para que mí voz dejara de estar ronca por que muchas de las clientas que frecuentaban la tienda tenían el mismo problema, debía comprar la flor de mandrágora en el local de chung lee, a dos locales a la izquierda, le agradecí a la chica con una sonrisa y salí de la tienda de Rosa maria, camine los dos locales, me di cuenta de que el local era pequeño y solo tenía una puerta para entrar abrí una campanita sonó para que me atendieran, había un gran mostrador y anaqueles con productos orientales, camine por los pequeños pasillos para llegar al gran mostrador, ví unos zapatos orientales que me gustaron una alpargatas de plataforma muy económicas, con eso podría teminar mí atuendo de Heather, también vi un vestido chino de talla mediana, también los cargue para que me dieran el precio de él.

Antes de llegar al mostrador había un stand de libros, los empecé a hojear, algunos de ellos eran en ideoma asiático, pero encontré dos libros que me llamaron la atención: Protegiendo a tu pequeña mujer interior, de Jhon Dickerson Grande y “Sacando tu Belleza Interior, Ayudas para la femineidad perfecta”, los hojee y pensé que jamás podría unos libros en una librería tradicional con esos temas, los tome.

Cuando por fin llegue al mostador una mujer mayor salió para antenderme de inmediato le dije que tenía la voz ronca y me recomendaron la flor de mandrágora, la señora  con seriedad se regreso a la trastienda, para salir con una bolsa de papel de medio kilo y una pequeña planta con flores, sin aceto oriental la mujer me explico como debía hacer la pócima don el extracto de flores, era solo una pisca por dos litros de agua, en el caso de la planta debía cuidarla para obtener cinco flores cada mes, entonces la  mujer me ofrecio un amuleto contra la mala suerte y para obtener dinero, también me dijo que mí destino iba a cambiar si aceptaba las cosas como eran realmetne que viera la verdad y viviera con ella, la mujer me entrego el tiquet de compra y salí del establecimiento con la boca abiera por lo que me había dicho, además de un vestido, zapatos, unos pasadores para el cabello, unas arracadas, pinzas para el cabello, un lápiz labial, la planta de flor de mandrágora, mí bolsa para hacer la pócima y las alpargatas puestas.

Tenía muchas cosas cargando debía comprar algo para guardarlas, ví una tienda de bolsas y entre para comprar alguna que cupiera todo, nuevamente me hice amiga de la dependienta, compre dos bolsas, una grande de tela y otra de cuero negro para el diario, además de un monedero y cartera para mis tarjetas.

Ví la hora y me di cuenta de que debía ir por mis hijos.

**

 

 

Estaba admirado lo tan bien que pasaba por una mujer, durante los siguientes días me pase leyendo los libros, pero los problemas con mí Hermana iban creciendo, mí hijo al estar jugando tiro la televisión, se enojó conmigo y me exigió el pago de su televisión, yo no tenía los suficiente para pagarle, durante los siguientes dos días no regreso a casa, el día viernes llegó con sus amigas gordas con una televisión nueva y mucha comida para el fin de semana, mis hijos no podía dormir por el escándalo que hacían, el día sábado me dedique a hacer comida y llevarla a la sala, también a limpiar su tiradero, por la noche siguió su fiesta, llegaron más amigas del mismo tipo de mujer mal hablada y grosera.

Yo me mantenía en la cocina y mis hijos en el patio, yo debía aguantar sus malas bromas y que me dijeran “nenita” o “Cariño”, el día domingo ya no podía más, debía salir de allí, deje preparado toda la comida y puesta en la mesa, para que cuando despertaran comieran, les dije a mis hijos que saldríamos, en silencio salimos de la casa y caminamos rumbo al parque, hacia calor así que escogí llevar un vestido de satín don estampado de rombos y mis alpargatas que me compre en la tienda.

Los libros me habían hecho pensar en mí realidad y lo que realmente estaba reprimiendo en mí vida, me habían dado mucha confianza para decidir que ropa me iba y como maquillar mí cara, como cuidar mí cuerpo y mejorar mí postura al camina, sentarme al hablar, como usar el bolso, como interactuar con otras mujeres, podía decir que era más mujer que mí propia hermana.

 

Caminando con mis pensamientos y tomado de la mano a mis hijos, levante la cara para darme cuenta que estaba enfrente de la entrada de una iglesia, uno de las feligresas me invito a pasar con mis hijos, otra feligresa que llegó por detrás de mí, también con sus hijos, me volvió a invitar a pasar, entonces tome a mis hijos y los lleve dentro de la iglesia, me indicaron sentarme en la primera fila de bancas, mis hijos se sentaron a un lado mío, una niña de la edad de mí hijo, comenzó a platicar con él sobre la escuela, perecía que era una compañera de él, mí hija se tomó de mí mano, en los últimos días ella se había vuelto inseparable de mí, mientras practicaba mí maquillaje ella estaba a mí lado, viendo como lo hacia, comenzó a platicarme sobre sus amigas y sus ideas, desde el  día que la recogí en la escuela, al verlos salir por la puerta deje de hablar con la maestra, corrí para darles un beso e impedir que mis hijos me descubriera ante la maestra, tome mí  para cargarla  y mí hijo lo tome de la mano, caminamos por la calle hasta salir de la vista de la maestra, entonces me detuve para preguntarles como me veia y si podría ganarle a su tía, mí hija volvió abrazarme y mí hijo me dijo que realmente me veía mejor en falda.

Desde ese  día  y para no confundir a mis hijos comenze a vestirme y actuar como su madre.

La misa  comenzó, nos levantamos y el padre comenzó la misa, durante su sermón habló sobre la importancia de una madre en la familia, me hizo pensar en como debía cambiar para cuidarlos mejor, como debía sacar mí fuerza para cuidar a los demás, entendí  el gran papel e importancia de una madre, de como la nobleza de carácter era la base de ser una madre, el  aceptar el papel secundario de apoyo en el matrimonio, me iba armonizar con la parte principal de la relación.

 

Fue muy interesante descubrír que quien daba la tranquilidad, la bondad  y amabilidad era la esposa, por eso era importante el cuidado personal y el arreglo personal.

La misa continuó hasta la celebración, nos dimos las manos, voltee hacia atrás para saludar a la feligresa que me invito a pasar, el hombre que estaba a su lado se me quedo viendo, regrese a mí lugar, al final de la misa el padre dio los avisos dominicales e invito a pasar a un taller de oración para los feligreses en problemas, iba a irme con mis hijos, cuando la segunda feligresa que me invito, se acercó para invitarme al taller de oración, yo intentando safarme diciendo que tenía que ir a desayunar con mis hijos, la Señora dijo que al final tenían preparados algunos alimentos para compartir, agrego que mientras yo estaba en el taller, mis hijos podría estar con otros niños de sus edades y jugar, además que los iban a cuidar educadoras, vi a mí hijo que quería seguir hablando con su amiga, la Señora me llevó a una sala decorada y con varias mesas con alimentos, me presentó a una chica que era educadora, la salude y me pidió llevarse a mí hija, acepto irse con ella, mí hijo ya estaba con su amiga.

 

Me quede en la sala la señora comenzó a presentarme con las demás señoras y esposos de ellas, yo trate de mantener mí historia de que mí esposo me había dejado y había venido a vivir con mí prima, en parte era verdad.

Una de las señoras me pregunto si era la mamá de Alex, mí hijo, ella era la madre de la amiga de mí hijo,  a su vez me felicito por tener un hijo tan amable y me dijo que era normal que tuviera problemas de adaptación, me invito a su casa para conocernos mejor, la segunda feligresa me presento a su hermano que fue el hombre que se me había quedado viendo, se llamaba Dick, una madre religiosa nos llamó al centro del salón, formamos un circulo, yo trate de quedar lo más lejos de la madre religiosa, la madre con una voz muy suave y calida, nos hablo del amor de Dios y estaba dentro de nosotros, cada uno teníamos algo de él y nos hacia ser lo que eramos, yo pensé que realmente había nacido paras ser una madre, no un padre, nos pregunto que nos afligia?, comenzó con la persona a lado de ella, la mujer dijo que sus hijos, entonces pidió hacer juntos una oración por ella, así fueron diciendo sus aflicciones, hasta llegar conmigo, el haber escuchado a otros sus aflicciones sobre el trabajo, los hijos, la familia, la esposa, el esposo, sus mascotas, algún familiar enfermo, entonces con la mayor sinceridad que pude dije que me preocupaban mis hijos y el no poder darles de comer por no tener un trabajo, la madre religiosa entonces me pregunto si no me afligía el no tener un esposo?, con pena y bajo la circuntancia le dije que realmente tenía enojo por que mí pareja no había querido ayudarme, la madre entonces comenzó a orar, cerro los ojos y dijo: Señor oramos por tu sierva Heather, que ama a sus hijos y desea cuidarlos lo mejor que pueda, por favor ayudala a encontrar su camino hacia ti, cuidala para que pueda darle de comer a sus hijos, ella te ama, Amen gracias.

Seguí escuchando las oraciones y unificándome a las oraciones,cada vez me reconfortaba más, al final la madre hizo una oración grupal para que nuestra fe creciera, la reunión acabo y las dos anfitrionas fueron hacia mí para reconfortarme, me abrazaron con fuerza, sentí su sinceridad, yo me sentía un poco inseguro por lo que pasaba, pero ellas me hicieron sentir aceptada como una madre con hijos que necesitaba apoyo emocional, se acerco la madre de la amiga de mí hijo, se llamaba Bety y vivía cerca de la casa de mí hermana, desde el día miércoles me había visto que iba por mis hijos, me pregunto si el hombre que iba por mis hijos era mí hermano, con pena le dije que si era, entonces le dije que el los había cuidado por un tiempo de vacaciones, pero el se había regresado a la ciudad, me ofrecieron algunos emparedados y una bebida, las dos anfitrionas me reconfortaron con más palabras del libro de la congregación, luego una de ellas me hizo la pregunta a que me dedicaba en la ciudad,  después de comer mí bocado le dije que era asistente legal, pero el despacho donde trabajaba el dueño me había despedido por mis problemas con mí pareja.

La Anfitriona llamada Sonia dijo que ella tenía una prima que también había estudiado para asistente legal pero no era bendecida con hijos.

La reunión estaba acabando y Bety me iba a llevar con hijos, pero su hermano se acercó a nosotros, me pregunto si tenía tiempo para hablar conmigo, se quedo viendo mis labios por un momento, esa mañana había usado el lápiz labial en color carmín que compre en la tienda asiática.

 

Acepte hablar con él, me apartó por un momento para que pasaran la gente que salía del salón, era alto y me sobrepasaba por mucho, lo miraba hacia arriba, mantuve mis manos juntas, sosteniendo mí bolso en el antebrazo , mí tobillo derecho delante del izquierdo y mis piernas juntas, como había ensayado en los últimos 5 días, se presentó conmigo diciendo que se llamaba Dick, eso ya lo sabia, sentí algo de tensión al hacer una pausa para decirme lo que quería decirme: Heather disculpe por detenarla, pero creo que yo puedo ayudarla, escuche que trabajaba como asistente legal?—le afirme y moví la cabeza para decirle que si—Trabajo en la explotación maderera, pero mí Abuela tiene un pequeño despacho de asuntos legales civiles, realmente no tiene mucho trabajo, ella ya es una persona mayor, mí padre quiere que deje de trabajar, pero es su única forma de ser útil es mantener su despacho, pienso que ella realmente hace una labor importante para el pueblo y no debe dejar su labor, hay veces que tiene que ir a la ciudad para hacer sus asuntos, pensé en usted para que lo ayude en su despacho y cuando vaya a la ciudad usted que conoce las calles la lleve donde  necesite ir, que le parece? Realmente el pago no es mucho pero considero que le servirá para cubrir sus gastos—no lo pensé dos veces, pero hice una pausa para quitar mí sorpresa, debía aceptar y comenzar a trabajar desde el siguiente día, me pidió anotar la dirección del despacho de su abuelo, saque de mí bolos la pequeña agenda y la pluma que compre en la tienda, que el libro recomendaba llevar siempre en el bolso, anote la dirección y el teléfono, me pidió llegar puntual a las 11 am y mí forma de vestir fuera formal, me hizo la pequeña broma que mejor que una abogada, su abuela era muy estricta.

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Mí vida había cambiado mucho hacia seis meses que era asistente legal de la Sra. Keys, la principal abogada del pueblo, siempre tenía gente atendiendo, todos los días hacia un escrito legal nuevo y debía corregir otros 10, debía hacer fianzas, investigar asuntos de la abogada, además de hacer café y llevar de comer a la abogada cuando se desocupara, también debía pagar sus cuentas, de esa manera conocí o más bien re-conocí a vecinos, compañeros de escuela, aunque ellos no me reconocían,  ahora era la Señorita Heather asistente de la Sra. Keys, una tarde se presento un hombre gordo diciendo que era Willy Grande y buscaba a la abogada por un problema civil, le pedí  sentarse mientras lo anunciaba con la abogada, mientras hacia mí escrito voltee disimuladamente para tratar de reconocerlo, el era o más bien había sido el capitán del equipo de luchas, el había sido novio de mí prima mayor, la abogada me indico que pasara, le dije que pasara, le abrí la puerta y deje que entrara, me iba a ir a mí lugar pero me pidió quedarme para que escuchara, me quede parada, Willy le recordó el asunto de divorcio y los problemas para repartir bienes, después de escucharlo, la abogada me llamo para entregarme el resumen del caso y me pidió llevarlo, me quede con sorpresa, sabia que no debía cuestionar a la abogada frente a los clientes, acepte el encargo y me pidió concertar una cita con Willy cuando todo estuviera en orden, la abogada le advirtió varias cosas legales pero se aseguro que en 4 semanas su caso estaría concluido.

 

Acepte el reto, todo estaba dicho, Willy se levanto, me ofrecio su mano después de despedirse de la Abogada, me quede en mí lugar para recibir indicaciones, la Sra. Keys me pidió acomodarme el botón del saco, lo hice y me mantuve en mí lugar, con la postura correcta, piernas juntas manos al frente, barbilla levantada, espalda recta, acomode mis lentes, mí pelo estaba limpio y pulcro, con un chongo escondido, aretes pequeños, reloj pequeño y discreto, mis uñas bien arregladas y zapatos limpios, medias sin arrugas,  todos los días hacia mí revisión antes de entrar a su oficina,

Me pidió acercarme, lo hice dando dos pequeños pasos discretos, para ese momento caminaba perfectamente en zapatos ejecutivos de 5 cm, en color azul.

La SRa. Keys me pregunto si estaba estudiando  por la noches mí carrera, yo no le había dicho nada sobre eso, pero era claro que lo sabia, le dije la verdad que me estaga esforzando en cumplir con la casa y luego con las tareas, me estaba costando trabajo, la  vieja abogada me dio su consejo: así va a ser tu vida, así es la vida de una mujer, siempre atendiendo dos cosas, siempre dejando para el final a uno misma, te entiendo, espero se un reto más para ti, se que estas lista para llevar este caso, si tienes alguna duda me la haces, ahora tráeme mí te.

Así iba a ser mí nueva vida, así estaba mí vida, mis hijos eran felices y los cuidaba lo mejor posible, tenía buenas vecinas y hacíamos oración todos los jueves en mí nueva casa, que me ayudaron para poder alquilarla, todo estaba en su lugar, mí vida era perfecta.

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Ese día era jueves y tenía el permiso para salir 10 minutos antes, pero debía entregar mí trabajo antes y dejar limpio mí escritorio, había dejado mis escritos a revisión a la Sra. Keys y limpiaba mí escritorio, cuando llego Dick el Nieto de la sra. Keys, me tomo se sorpresa y tire el trapo de limpiar, se rio Dick por la forma de asustarme, me pidió disculpas y me levanto el trapo, yo le pedí disculpas por asustarme y le dije que no tenía por que levantar el trapo, se me quedo viendo por un momento y luego me pregunto por su Abuela, le dije que seguía en su despacho, entonces entro para hablar con ella, escuche que le decía que venia por ella para llevarla a su casa y avisarle que el próximo Domingo tenían la fiesta de bautizo del hijo de su hermana, la Sra. Keys reviso su agenda y acepto asistir, pero no antes de preguntarme por teléfono si no tenía nada agendado para atender un cliente, le dije que la próxima semana tenía que ir a la ciudad, tenía el fin de semana libre.

Termino de revisar su documento y se levanto, yo también acomode mí bolso para irme, pero Dick me detuvo al preguntarme si me iba ir así?, le dije que siempre me iba así o tenía algo malo para no irme, dick me explico que estaba lloviendo y me dijo que le gustaría llevarme a mí casa también, además me dijo que ese día era de oración y estaba invitado para hacer oración por un compañero detrabajo, no sabia eso, pero acepte que me llevara después de dejar a su Abuela, pero la Sra. Keys intervino y dijo que quería conocer mí casa, acepte que ella fuera.

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Llegamos a mí casa, realmene me esforzaba en mantenerla limpia y ordenada, pero con los niños me costaba trabajo, pero si en el trabajo mantenía la pulcritud también en la casa, invite a mí jefa a sentarse en la sala, pero ella quiso ayudarme con los preparativos, me ayudo hacer emparedados y preparar las bebidas, poner la mesa, como cualquier ama de casa, me dio varios consejos para ponerla correctamente, me hablo de su esposo era muy detallista y ella debía ser muy cuidadosa, me había quitado el saco y puesto un delantal, estaba solo con la blusa y la falda de lana cuando llegó el primer invitado, Dick abrió la puerta, Dick se quedo hablando mientras yo ponía las flores en la mesa, la Sra. Keys era una buena platicadora y anfitriona debía aprender de ella, mis hijos los estaba cuidado Rechel una chica que estudiaba para educadora, ella me ayudaba para traerlos a la casa, pero los jueves se hacia cargo de ellos.

En total llegaron 20 vecinos y compañeras de la iglesia, como anfitriona debía abrir y finalizar con una oración, realmente me daban nervios hablar frente a mucha gente, pero cerraba los ojos y hablaba lo más sincero posible, ore por todos los presentes, luego cada uno oraba por sus necesidades, Dick oro por un empleado que su esposa tenía un problema grave de salud, la Sra. Keys, oró por mí para ser una buena madre y cuidara a  mis hijos, oró para que me protegiera durante el trabajo.

Después de orar por todos, les ofrecí los alimentos, era un ambiente amable y cálido, los vecinos nuevos era una pareja que pronto tendría un hijo, como buenas samiaritanas y con experiencia, debíamos aconsejar a la esposa, yo lo único que le dije es que Dios estaba con ella y le mostraría como ser una buena madre, ella dijo que estaba admirada de lo bien que cuidaba a mis hijos, era una verdadera mujer.

 

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Pasaron otros tres meses donde Dick se acerco a mí y se hizo indispensable para mi, la Sra. Keys acepto que su hijo saliera conmigo, yo aun tenía muchos temores y dudas, pero Dick me hizo sentir importante en su familia, me hizo sentir como la mujer que había escogido para ser su esposa, era una vida perfecta para una mujer, pero aun pensaba: yo soy una verdadera Mujer para hacer feliz a Dick?, Tengo lo necesario para hacerlo verdaderamente feliz a él?, aun tenía muchas cosas por quitar en mí, aunque estaban muy escondidos y nadie lo notaba, para mí era importante eso me llenaba de verguenza?.

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 Dick decidió ayudarme económicamente con eso, aunque el nuca supo de que no tenía lo necesario para ser su esposa, el me apoyo en todo momento con mí problema vaginal, al final de un periodo de sufrimiento mí alma estuvo en calma y Dick entro dentro de mí profundamente, era la mujer que siempre quiso y vio en mí.