Todo comenzó con una broma en el día de Hallowen,
Todo comenzó con una broma en el día de Hallowen, para que
la vecina dejara de meterse en cosas de mi pareja, había aceptado ir donde
estarían todas las vecinas, la idea sería
hacerle pasar un mal rato a los vecinos, pero resulto que nuestro vecinos cercanos
hicieron la fiesta al llegar muy embriagados y empezar bromas pesadas, nosotros
pasamos solo por otros vecinos más, lo que nos dimos cuenta era que podríamos
pasar fácilmente podríamos invertir roles en nuestra relación, yo reconocí que
realmente durante el poco tiempo que pudimos hablar con las vecinos, nos
sentimos aceptados y cómodos en la forma en que nos relacionábamos, yo había
conocido a otra vecina joven recién llegada y a otras tres de las mismas
características, mi pareja había conocido a sus esposos y pareció que se sentí
bien al ser integrada a las reuniones semanales de futbol dominguero.
Después de esa rara reunión de hallowen pasaron dos semanas
donde el esposo de la agradable vecina nueva, invito a mi pareja pensando que
era yo a ir a un partido de nuestro equipo favorito, era un juego para entrar a
las semifinales, era un buen partido y aceptamos ir de nuevo esta vez solo
serían pocos vecinos y vecinas, seguimos la broma para los vecinos, mi pareja
acepto que yo usara su ropa y yo acepte que ella usara la mía, ella acepto que
su ropa me quedaba mejor a mi que a ella, al menos me cerraban sus faldas sin
esfuerzo del botón, como decidimos aceptar el reto de pasar el fin de semana
cambiando roles, yo acepte hacer lo que ella hacia, así que me todo hacer la
comida, limpiar la casa, llevar a los niños de compras de ropa y la despensa,
mientras ella acomodaba el garaje, ese fin de semana nos la pasábamos bien
conviviendo con las vecinas y vecinos, el platillo que lleve de picadillo fue
el mejor de todos los que llevaron las demás vecinas, fue el primero que se
acabó, el mayor tiempo estuve llevando de comer a los esposos, algo que me
parecio natural y hasta divertido fue que al pasar frente a mi pareja ella me
dio un pequeña nalgada, sin molestarme solo camine un poco más rápido para
dejarlos ver, sin decir otra cosa, que sonreírle por su broma, ese día me había
puesto una pegada falda de mezclilla que me llegaba debajo de las rodillas que
ya no usaba y sus viejos zapatos de plataforma, una blusa de escote redondo muy
discreto, pero aceptable para enseñar que si era mujer, desde hallowen había
comenzado a tomar te de mandrágora para suavizar mi voz, había dado resultado,
había podido hablar por horas sin que mi garganta se lastimara, me indentificaba
mucho con Bethy mi vecina nueva, ella había estudiado contabilidad al igual que
yo y vimos las mismas series de televisión, de alguna manera nos parecíamos, yo usaba una
extensión de cabello castaño, que era mis color de mi cabello, ella era castaña
natural, teníamos la misma estatura y dos hijos, aunque los de ella eran más
pequeños e iban en kinder, los míos era más grandes e iban en la primaria,
segundo y tercer años.
Ese día aprendí
muchas recetas de cocina y quizás podría hacer los durante un mes, pero
el día lunes regreso todo a la normalidad, aunque aceptados que ese fin de
semana fue como una terapia para darnos cuenta de la importancia del papel de
una madre y un padre dentro de una familia, yo trate de involucrarme más en
cuidar a los niños e ir a dejarlos a la escuela, lavarles sus ropas y
prepararlos para ir a la escuela, mientras mi pareja aunque no trabajara, se
preocupó por tratar de buscar un trabajo para aportar un poco más ingreso a la
casa.
A la siguiente semana comenzaron las fiestas de fin de año,
los vecinos decidieron que haríamos una fiesta por casa, la suerte había dicho
que nosotros seríamos los primeros en hacerla en nuestra casa, decidí tomar mis
vacaciones para ayudar a preparar todo, sería el momento para quitarnos el disfraz
frente a todos los vecinos, en mi trabajo las cosas no estaban bien, las ventas
no mejoraban, aunque yo estaba en departamento de contabilidad, no me exentaba
de que alguien de ese departamento tuviera la culpa de las cosas malas que
pasaran, pero tenia 3 años sin salir de vacaciones, era el momento.
El fin de semana estuvimos comprando todo para la fiesta, yo
había decidido usar un vestido delgado en color azul con zapato bajo, sentía
que flotaba mucho el vestido pero era la forma en que debía acostumbrarme,
caminamos por el centro comercial con nuestro hijos, parciamos una familia
cómun, pero no lo era.
Hasta entramos a casas de ropa para comprar alguna cosas,
parecía que nuestra relación estaba floreciendo nuevamente, yo escuchaba a mi
pareja y ella me escuchaba, nos compramos nueva ropa para la fiesta, me gusto
un vestido floreado y una sandalias blancas, que hacían juego, también escogí
tres juegos de ropa interior para decidir cual usaría, dentro del supermercado
nos encontramos con unos vecinos y
tuvimos que hacer nuestras compras con ellos, yo tuve que comprar toallas
femeninas, benzal, desodorante, loción corporal, esmalte de uñas, cepillo
nuevo, crema y un estuche de maquillaje, realmente me divertí comprando con mi
vecina, ella pensaba que yo era la mujer en la relación, mientras comprábamos
me hablo de que una de las vecinas tenía un pequeño salón de belleza y
necesitaba ayuda para cuidar la caja, me pareció interesante, solo que al
escuchar que esa vecina era una fácil por que se había metido con el esposo de
la vecina borracha.
El día domingo estuvimos en casa, yo preparando la gelatina, pastel, la carne para
la cena, la bebida, mi pareja estuvo colocando los accesorios para auto que le
hizo comprar el vecino.
Al día siguiente tuvimos que hacer la limpieza general de la
casa, esperar a que llegaran las mesas y
sillas alquiladas, mi pareja dejo que yo decidiera donde se colocarían, faltaba
poco tiempo para que llegaran los vecinos así que debí usar todas mi
experiencia para maquillarme, vestirme, arreglar a los niños y revisar como iba
el cocimiento de la carne.
Faltaban minutos para que llegara el primer vecino, cuando
decidimos entregarnos nuestro regalos de fin de año, mi pareja me regalo un
juego de dije de diamante azul y aretes del mismo diamente azul, yo había
encontrado unas mancuernillas doradas y un reloj dorado, era grande y debía
acostumbrarse, como yo debía acostumbrarme a usar su pequeño reloj.
Decidimos que a las 11 pm descubriríamos nuestra farsa, la
fiesta trasncurrió muy amena, decidimos jugar adivinanzas de películas,
nosotros fuimos la mejor pareja, también con los niños jugamos ponle la cola al
burro, fue muy amena fiesta, a las 11 abriríamos los regalos que había comprado
para nosotros, al final haríamos el
anunció, pero sucedió que antes de abrir
los regalos Bethy propuso que cada pareja dijera una palabras para
nosotros, todos concordaron que éramos
una bonita pareja, algunos vecinos me dijeron
que era la más bonita de todas las esposas, pero no solo eso, la más cariñosa,
amorosa y hogareña, las vecinas me alabaron la forma en que cuidaba a mis hijos
y la forma en que les hablaba sin gritarles, eran muy educados mis hijos,
también alabaron mis pantorrillas y mi delgada cintura, después de todas esas
bonitas palabras no tuve las fuerzas para decirles la verdad, ni mi pareja,
para ellos mi pareja era un maravilloso vecino que era ejemplo de como cuidaba
a su familia, un buen amigo que compartía la herramienta y las buena charlas de
americano, en una palabra era un maravilloso tipazo ( un gran padre y esposo).
Abrimos los regalos, ahora tenia 4 ajuares de casa, un nuevo
madil, una licuadora nueva, un libro de recetas de cocina y muchas buenas
amigas.
Los demás días de esa semana, me la pase disfrutando
bailando, comiendo, riendo, jugando, hablando de los buenos vecinos teníamos,
también disfrute el usar todos los vestidos de fiesta de mi pareja, también
disfrute de ayudar a limpiar las casas, ayudar a cocinar, yendo a comprar
comida, realmente disfrute mucho siendo la mujer de la casa.
En la fiesta de navidad fue maravillosa, yo traía un vestido
corto en color caoba, había ido con Bethy
al salón de belleza y lucia como una perfecta y hermosa esposa,
convivimos con todos los vecinos, baile, rei y disfrute la noche, el la fiesta
del fin de año, vestía un delgado y largo vestido negro abierto de una pierna,
mientras comíamos nuestra uvas debimos decir nuestros deseos, sin pensar en lo
que decía, desee ser la mejor esposa para el próximo año.
Después de la fiesta de fin de año, llegó el día del
superpartido de futbol, nuevamente me disfrace de esposa y platique sobre los
empleos de medio tiempo para apoyar a la economía de la casa, también sucedió
que mi pareja consiguió el dinero para un nuevo auto al ganar la quínela de
juegos, también había conseguido la
posibilidad para un nuevo empleo en una empresa que manofacturaba pequeños
autos de golf, como representante para grandes agencias y las asociaciones de
golf, mi pareja con habilidad no negó la posibilidad de trabajar, pero estaba
desconcertada por la forma en que los vecinos pensaba que ella era el hombre de
la relación.
Esos momentos fueron muy extraños para nosotros, decidimos
alejarnos por un tiempo de nuestros vecinos y solo saludarlos de lejos, debimos
pensar bien las cosas, yo trate de concentrarme en mi trabajo, aunque mi forma
de ver las cosas había cambiado, era tarde, ahora veía como mi jefa era como un
macho alfa que quería controlar a todos en la oficina, no mejor callaba y hacia
mi trabajo, pero no funcionaba, durante mis vacaciones se había tomado una
decisión comunal, yo era quien debía dejar la empresa para salvar a los demás.
Al siguiente día deje de trabajar, durante la noche después
de traer a los niños, hacerles la cena, esperar a mi pareja para hablar de lo
que haríamos, ella había decidido ir al curso de capacitación para ser
representante, parecía que le gustaba ser representante, tenia las cualidades
para hacerlo, habíamos hablado que solo sería un ensayo, cuando le dije lo de mi despido, se convirtió
en la única opción para proveer ingresos a la casa, solo por un tiempo, pero
sabía que las cosas debía cambiar, si ella acepto el trabajo yo debía aceptar
el trabajo de medio tiempo en el salón de belleza como cajera, así decidí ir a
visitar a la vecina con una galletas y hablar de la oportunidad de trabajo,
vestí lo más normal posible, con pantalones de mezclilla y una camiseta vieja,
volví a usar las extensiones de cabello, aun que ahora tenía un poco de más
cabello y pude hacerme un bonito fleco y jalando el cabello hacia atrás con una
pinza de mariposa, volví a usar los cómodos zapatos café de tacón cuadrado, me maquille ligeramente, solo puse un poco de
lápiz labial y enchine mis pestañas, mis pechos eran pequeños pero agradables
por debajo de la camiseta.
Estuvimos conversando mientras doblábamos ropa, hablamos
sobre apoyar a los esposos y mi deseo de seguir trabajando, ella me comentó su
experiencia de intentar trabajar pero no había dado resultado, fuimos a la
cocina para tomar un café y seguir hablando, yo le dije que estaba lista para
intentarlo, entonces ella habló con su
otra amiga dueña del salón de belleza, de esa manera tenía que hablar con
Rechel Connors, dueña del salón de belleza que estaban dentro de un centro
comercial a una hora de la casa, mi pareja se estaba llevando el auto debía ir
en transporte público después de dejar a los niños en su escuela, no sería una entrevista formal, pero debía
vestir lo mejor posible, así que decidi vestir una falda gris y una tShirt
blanca, haría calor así que lo mejor no era usar medias, solo los zapatos beige
que me compre y no había estrenado,
guarde en el viejo bolso una copia de mi currículo de mi pareja, pero con mi
foto actualizada.
Deje sin problemas a los niños y me fui a tomar el autobús,
para cuando llegue al centro comercial, el sol estaba en lo alto y comenzaba
hacer calor, era una dicha estar en falda y sin medias.
Ví mi reflejo en la puerta de cristal de la entrada del centro comercial, vi como mis
gordas caderas giraban en forma natural y mis brazos estaban pegados a mi
cuerpo sin exagerar, los zapatos me ayudaban mucho, mi imagen de mi escote
mostraba que yo era una mujer, al pasar por la puerta le sonreí al policía para
agredecerle que me abrió la puerta, camine sin pena buscando el negocio de
belleza, vi varias prendas en los aparadores que me gustaron pero salían de mi
presupuesto, el negocio se encontraba cerca del área de comida, entre sin pena
y pregunte con mi mejor voz por la dueña Rechel y le dije que me llamaba Laura
Flowers, la mujer me barrió con la mirada, me pregunto secamente para que
asunto, yo con calma viéndola a los ojos y sin intimidarme, le dije que para un
asunto de trabajo, la mujer con una actitud muy mala, me dijo que no estaba
pero le diría que había venido, continuó haciendo sus cosas, yo no sabía que
hacer, estaba frio, quizás debía actuar rudamente, pero no sabía como hacerlo,
tome aire con calma le volví a decir que si podía verificar si estaba, la mujer
sin verme me dijo que no estaba, en ese momento reacione y no me importo lo que
pensara de mi, le dije que levantara su enorme trasero y fuera a ver si estaba,
por que ella me había dicho que iba a recibirme, luego le dije para que
realmente hiciera las cosas, le iba a marcar a ella para decirle que ya había
llegado, busque mi celular en la bolsa
lo saque para marcarle, aunque no traía su número, la mujer reaccionó,
se levanto y caminó por detrás de la mampara que separaba el área de recepción
y el área de atención, en la rececpion había un gran sillón blanco estaban dos
mujeres leyendo una revista, voltee a verlas y sonreírles, para decirles que
todo estaba bien, las mujeres me sonrieron y me dijeron que había actuado bien,
que la mujer era de lo más pesado y que lo bueno era que ya se iba de allí, en
ese momento comprendí que yo era quien le iba a quitar su empleo, mientras
esperaba les pregunte a las señoras que tan bueno era el salón de belleza, las
mujeres fueron sinceras diciéndome que era muy bueno, las chicas que atendían
eran muy buenas, solo los precios eran un poco altos, pero valia la pena.
Después de un rato salío una mujer con un vestido largo en
color negro y un saco largo, estaba bien maquillada, al verme me ofreció su
mejilla para saludarla con un pequeño beso, lo hice como debía, diciendo mi
nombre ella me invitó a ir a tomar un café, mientras caminábamos fuera del
centro comercial, me pregunto por Rose ,
yo le dije que estaba muy bien y era su vecina, ella me dijo que ya sabía de mi
hacia unos meses y le daba gusto de que me había animado a trabajar, entonces
nos subimos a su auto blanco y condujo a un pequeño restaurante italiano a tres
calles del centro comercial, estacionó el auto y bajamos, yo trataba de estar
tranquilo y ser lo más natural posible, aunque estaba entretenido con la
platica de Rechel, sobre una venta de catálogo donde había conocido todas mis
vecinas, también vivía a dos calles de mi casa, éramos vecinas, entramos al
restaurante y fuimos a una mesa cerca de la fuente central, era muy agradable
el lugar y me atreví a decir que me gustaría a venir con mi esposo, ella me
pregunto como era él, yo con calma y alegreía le dije lo bien que me llevaba con el, que estaba por entrar a
trabajar como respresentante de una empresa, ella con una cara chistosa, me
hizo ver que estaba orgullosa de mi esposo y me me cuestionó eso, yo acepte que
si lo estaba, entonces me pregunto el tiempo que estaba casada y cuantos hijos
teníamos, se lo dije y me cuestiono si quería lo mejor para mis hijos, le dije
que sí y que por eso necesitaba ingresar más dinero para poder pagar el fondo
educativo de ellos, eso le parecio bien, entonces comenzamos hablar antes de
que llegara la sopa y después el guisado, de la forma en que llevaba su salón
de belleza, la parte económica, el proceso de atención, la compra de productos,
me dijo que tenia la intención de poner otro salón de belleza pero le faltaba
que se consolidara el que tenia, yo con la mayor atención y amabilidad le dije
que yo podría ayudarla en eso, le mostré el currículo, vió que había estudiado
contabilidad, eso fue lo último que quería saber, me dio la mano en forma de
contrato de trabajo, seguimos comiendo hasta acabar, me dijo que pagaba
semanalmente y yo debía hacer la nómina según los servicios realizados, pero
antes debía aprender lo que se hacía en el salón de belleza, por eso la primera
semana cada una de las chicas me haría un servicio donde era especialista, me
explico que yo debía vestir un poco más elegante que las chicas de servicio por
estar en la recepción, había otra amiga de ella que le ayudaba con la recepción
entre las dos nos haríamos cargo del salón, el salón se abría a las 10 am y se
cerraba a las 7 pm, en mi caso acorde que yo llegaría a las 9 am después de
dejar a mis hijos, para hacer el cierre del día anterior y abrir caja, saldría
a las 3 pm, para ir por mis hijos a la
escuela, el día viernes tendría que quedarme un poco más tarde y le pediría a
Bethy fuera por mis hijos y me los trajera al salón, todo estaba en orden y
debía trabajar desde ese mismo día, de esa manera me integre a mi nueva vida,
aprendí todo lo que tenia que aprender del cuidado personal, de ropa, zapatos,
problemas de mujeres y esposos, pude ayudar a muchas mujeres, también aprendi a
como tratar a mujeres difíciles.
Me dio mucha más confianza en ser una buena esposa, hasta
para ayudar a mi paraje en enviarle fotos de mí en fotos provocativas, para
evitar que no pensaran que no era mujer, solo por un pequeño descudido en su
trabajo, pero después de una semana de enviarle fotos, todo se arreglo.
Pasó el día de las madres, el día de los padres y llegó las
vacaciones de los niños, para ese mes, el jefe de mi pareja lo había invitado a
vacacionar en su casa de playa, eso hizo que gastara todo mi finiquito que me
quedaba y lo que había ahorrado esos meses en aumentarme los pechos, de esa
manera no habría duda de que no fuera una buena esposa, y podría usar traje de
baño; mi pareja estaba contenta con lo que estaba pasando, ella jamás se quito
su camiseta y no hubo duda de lo era.
Seis meses después entre a trabajar a un despacho de
abogados y gane más dinero, con el dinero ahorrado seis meses después, pude
quitarme todo lo queme estorbaba para ser una verdadera madre de la familia y
que los compañeros de mi esposa y clientes, no dudaran en las fotos que no era
una mujer.