vagin Con H de Heather, no de Harry. consiguiendo el empleo de mi vida.

T

eTenía 27 años y aun vivía con mí madre, ella estaba enferma  y mí  vecina Beth me ayudaba a cuidarla, yo hacia todo el quehacer de la casa, yo tenía estudios de administración de empresas, pero por la enfermedad de mí madre no ejercia, solo ayudaba a una amiga llamada Bárbara en su tienda de uniformes, una tarde lluviosa después de ir de compras después de medio día, me encontré en la puerta con Beth y a Barbara hablando de los costos de los nuevos uniformes que la empresa que les había hecho adquirir, Babe le hacia un buen descuento y  con el dinero sobrante le alcanzaba para comprar sus zapatos, hablaban sobre eso, cuando llegue empapado después de correr por tres calles con las bolsas de alimentos, de inmediato entramos a mí departamento para ver como estaba mí madre, ella dormía, Bárbara sugirió que debía cambiarme, Beth que nos había seguido al departamento para ayudarme a prepara algo de comer para después regresar al trabajo, con lo que había traido de la tienda, me sugirió tomar un baño para que no me resfriara, acepte hacerlo, mietras ella preparaba algo de comer y Babe le daba la medicina a mí madre, yo me fui a bañar, pero para mí suerte el agua caliente se fue y debía esperar a que el tanque de agua se llenara, mientras salí con mí bata a la sala para comer algo,Beth y Babe estaban en la mesa comiendo lo que habían preparado, me vieron sentado con la bata de baño, ví que en sus caras se encendían, como si una idea les llegara a las dos en el mismo momento, Beth me pregunto si no me interesaba trabajar en un puesto administrativo medio tiempo, yo con alegría le dije que si por que de esa manera cuidaría a mí madre, Babé agrego que si no me importaría usar uniforme?, me extraño su pregunta, pero le conteste que no me importaba si tenía trabajo de oficina y me pagaban bien, entonces las dos se acercaron a mí, me tomaron de los hombros y me regresaron al baño, me metieron a la tina de agua fría,  sin dejarme salir y ver lo que me hacían, me detuvieron de los hombros, no me podia mover, algo hacian a la altura de mi vientre, pero no pude ver lo que hacian, solo  sientí un leve dolor en uno de mis testículos.

Cuando me soltaron y me levante de la tina, pude ver que toda mí masculinidad se me había ido, mi pequeño pene habia desaparecido entre unos labios vaginales, porque  ahora tenía dos naturales labios vaginales bastante lindos entre mi bello púbico rubio,   según el comentario de Barbara: tan lindos como los de ella!!, pero eso no fue todo, Beth me puso un bra-top invisible para juntas mis pequeños pechos,  luego para levantarlos me puso un bra nuevo en color morado y me ordenó ponerme las pantaletas moradas de encaje de flores y un lindo moño en el frente que hacían juego, de esa manera definitivamente había perdido mí masculinidad, ahora tenía pechos y una vagina como la de ella, realmente  los labios vaginales se mostaban lindos y femeninos con pantaletas tan suaves, en mi mene pense que jamás volvería a usar calzones.

Desde niño  mí cadera había sido más ancha que mí cintura, la grasa siempre se me acumulaba en la zona de los gluteos y la cadera, al usar ropa interior de mujer se acentuaba más el cuerpo de una mujer; pero eso no bastó por que me hizo ponerme un body para hacerlo más femenino y resaltar más la relación cintura-caderas; después Beth me hizo enfundarme un resbalon en color morado que había comprado por catalogo, todo era tan rapido que no me dejaba pensar, pero un pequeño descuido comensé a pensar que estaba haciendo, Beth me dio un pequeño golpe en la cabeza para apurarme, me hizo ponerme su blusa y la falda azul con rayas blancas de su uniforme nuevo,  pero eso no le basto, me hizo ponerme sus pantimedias y sus zapatos nuevos, después de eso me pararon frente a ellas para ver como iba su obra, me miraban las dos mujeres con los brazos cruzados, la mano en su barbillas, Babe dijo: ahora tenemos a tu remplazo cuando no puedas ir a trabajar, como dijistes es más femenina que tu y yo, solo falta a esta chica arrelgarle su cabello y su hacerle su maquillaje,no te parece?

Mí cabello era largo y solo le hicieron una cola de caballo con una cinta morada me hicieron un moñito para agarrar mi cabello, para haceme un flequillo usaron un tubo sobre mi frente, luego Bárbara saco su bolsa de maquillaje y la puso frente a mí y me ordeno usarla para maquillarme, me quede viendo para saber que hacer, ella me torció mi mano para lastimarme y recordarme quien estaba al mando, yo no debia cuestionarla, sabía que cuando se enojaba era muy mala conmigo, comencé hacer lo que me decía, cometí errores al tomar las brochas y los productos, pero los golpes en la cabeza me harían jamás olvidar lo que debía tomar  primero antes de lo segundo, lo tercero y cuarto, jamás había pensado que mí cara era femenina hasta que termine el trabajo bajo la supervisión estricta de Babe, Beth se quito sus aretes y me los puso, también se quito su pulsera favorita, un dije de corzaón de cristal, de esa manera volvieron a ver su obra, me quitaron el tubo de la frente, escarmenaron mí cabello nuevamente me pusieron el liston  para detener mí cabello, a Barbara no le gusto que tuviera tan pequeños pechos y tomando un anexo de bra los puso dentro de mí sostén morado para darle volumen y levantarlos más, también jaló hacia afuera mis panties para que no mostraran mis dobles nalguitas gorditas, parecia una niña regañada por no hacer bien las cosas antes de ir a la escuela, sin esperarlo me jaló las pantimedias hacía arriba para acomodar el tiro sobre mi cuerpo y que se viera perfecto mi pie de camello, con sus dos bultitos gorditos a cada lado del tiro; con fuerza me jalo la blusa hacia abajo para acomodarla sobre mis grandes caderas y dejó caer la falda, acomodo los pechos dentro del Bra y los botones de la blusa; estaba listo para su ultima revisión, solo faltaba ponerme el chaleco, el saco y el tie; la falda me llegaba arriba de las rodillas y la abertura estaba perfectamente centrada en mis piernas, la falda mostraba mi cintura pequeña y la cadera hancha, mí vientre estaba liso y femenino, ví que mis gorditos de los muslos se veian de la misma manera que Beth, mis los muslos eran grusos como los de ella, pense que era casí un clon de ella o al menos éramos hermanas.

 Me hicieron caminar por la sala para darse cuenta de que podía si caminar con zapatos altos de oficina, Bárbara comento: Beth te dije que caminaba como una chica, me di cuenta cuando subiamos las escaleras, mira como su cadera gira y sus nalgas suben y bajan,sus manos son pequeñas y realmente lo hace mejor que yo, sus pantorrillas son lindas.

Barbara dijo: yo también me dí cuenta de que tiene mejores piernas que tú, mirala: la falda le ajusta perfectamente, aunque sus pechos son pequeños creo que  a tu jefe le van a gustar mucho.

Beth conteto: si estoy de acuerdo, siempre te he dicho que el es un fizgón obsesivo, pero es lindo y así es mi jefe, además siempre es lindo conmigo, cuando  le dije que tenia una amiga para el puesto, me dio la oportunidad de presentarla antes de poner un anuncio en el periódico, solo me dijo que si era bonita se la presentara y al verla frente a mi dejame decirte que  ya tengo  una nueva compañera—Bárbara agrego a la comentario: solo falta que se le presente a....—hizo un pequeño silencio para recordar como le habia dicho que me llamaba ahora, Beth agrego: a Heather Tomas, con H de Heather no de Harry, recuerdalo!, no crees que le queda el nombre de una flor?--Babe afirmo moviendo la cabeza,Beth continuo diciendo: voy a llevala para presentarla como le prometí a mi lindo jefe, vamos solo tenemos 20 minutos para llegar a tu trabajo antes de que el se vaya.

Sin decir nada más, Barbara me tomo del brazo y me puso un  bolso nuevo sobre el hombro, Beth tomo el suyo y

salimos del departamento para bajar a la calle, ya había terminado de llover, desde la puerta Bebe dijo que ella cuidaría de mí mamá y no me preocupara por ella, me deseo buena suerte y me rompiera una pierna, ella siempre habia sido buena amiga, ahora me hechaba fuera del departamento para lograr obtener el trabajo de mi vida.

Estaba realmente asustado por lo que estaba pasando, era la primera vez que salía del apartamento en falda para conseguir un trabajo; por la reciente lluvia sentí como aire frio subía por mis piernas hasta el interior de la falda,  pero nada que no pudiera aguantar, era una sensación inolvidable, me sentía raro y emocionado por estar caminando en zapatos altos y  usando ropa de mujer, pero al estar tomado del antebrazo de Beth como lo hacia Bárbara, me sentía comodo caminando con zapatos altos, sin doblar las rodillas, como siempre lo hubiera hecho.

Sentía que todo estaba bien al ir con ella agarrado de la
mano, Beth me hacia sentir cómodo, como si siempre lo hubieramos hecho como dos hermanas o amigas cercanas, de hecho siempre era así con ella, sabía como llegar hasta el fondo de mis sentimientos, me pregunto como hacer mí receta secreta para hacer mi panque de fresa, de esa manera estuve hablando de comida durante el viaje en transporte publico en medio de mucha gente, no importando que me vieran, para ellas era otra chica de oficina más hablando con su amiga.

Al ver a Beth como se tomaba del tubo con las dos manos para no caerse me di cuenta de la forma correcta para comportarme como una mujer, no debía abrir las piernas de más,  siempre debía tener juntas las piernas y tomarme con las dos manos, llegamos a la parda de autobús de la zona de negocios y debimos bajarnos y caminar 3 calles, entramos al edificio, me di cuenta de que vestia como las demás empleadas del edificio, era una más de ellas, la costura de la abertura de la falda habia resistido el estiron para bajarme del autobus y el caminar lo más rapido que podia al ritmo de Beth, el bolso me ayudaba a equilibrar mis cuerpo.

Subimos por el ascensor y bajamos en el piso 41, pasamos la recepción vácia y antes de llegar a la oficina de su jefe pasamos por el escritorio de Beth para dejar su bolso, estirando su pierna sobre la silla, de su cajón izquierdo saco un folder con un curriculum con el nombre de Heather Tomas.

Caminamos por el medio de los cubículos de la oficina, las mujeres de oficina ni siguiera me veian, no les importaba que hubiera otra mujer con un trasero grande, todas tenían su trasero igual y yo era una de ellas, antes de entrar a la oficina de su jefe Beth le dio la última revisión a mí maquillaje (labios, sombras suaves, rubor, pestañas), los zapatos limpios, el botón de la blusa y falda en su lugar, aretes bien puestos, tie bien abrochado; Beth se cercioró que todo estaba en su lugar y bien puesto, pero los nervios se me subieron a la cabeza, un escalofrio se me subio por las piernas, sentí que estaba desnudo,pero la presión de las medias en mis piernas me volvieron a la realidad, pero aun así sentía que la falda estaba muy lejana, dí un paso y los zapatos se mí hiceron pesados, Beth me tomo de la mano y me abrazo para reconfortarme, mientras lo hacia, me calmo diciendo: Heather estoy contigo, no tengas miedo,todo esta bien, solo se la chica que realmente sientes que eres, dejame hablar y todo va estar bien, te quiero mucho. 

Me dejo de abrazar, me tomo de la mano, toco la puerta y la abrió, era el momento de la verdad, ella dio dos pasos dentro de la oficina, yo la seguí, ella comenzó  a hablar con su jefe, no recuerdo que le dijo, solo recuerdo que su jefe se levantó para saludarme: Señorita Heather me da gusto conocerla, me ha hablado mucho de usted, tome asiento, cuénteme de usted?— cuando me sente y acomodé mi falda y el bolso aun lado de mi, cuando lo hice todo nervio se me fue al ver que el hombre frente a mi era muy amable y me daba confianza para hablar, le contesté con mi voz normal, que no era más gruesa que la de Beth, el baño frio la había hecho más suave, para platicarle sobre mí madre y mis problemas por conseguir un trabajo mejor, también le dije  que Beth me conocía muy bien, eramos como hermanas y  salíamos de compras y me ayudaba con mí madre, Beth agrego a mi discurso que era muy trabajadora y detallista, ordenada y cuidadosa con los detalles al extremo, mi casa siempre estaba limpia y mi ropa ordenada,  además de hacer un rico panque de fresas, tenia estudios de administración de negocios.

El jefe de Beth estaba admirado con lo que le había dicho Beth, quería que le llamara como Licenciado  Williams y agrego que le daba gusto de encontrar a una persona tan exacta al perfil que buscaban para recepción y apoyo administrativo, que por el momento no había puestos para asistencia ejecutiva, pero dentro de unos meses podría postular para uno de ellos y quizas podría ser su asistente, solo debía ser atenta, servicial, ordenada, pulcra y cumplida, como decia Beth y con seguridad  el puesto sería mio.

Me dio la mano como firma de acuerdo de trabajo, le pidió a Beth llevarme para que me hicieran mí contrato, pero antes de irme, su jefe me detuvo para decirme algo que me apenó: Señorita Tomas, solo tengo algo que decirle, espero no se molesté es solo una observación, le dijo esto para que pueda desempeñar mejor su trabajo--hizo un silencio y dijo lo que tenía que decir: me gustaría que siempre usara falda, sus piernas son las bonitas y sería una lástima que las escondiera, por favor lúzcalas, no tenga pena, los jefes no nos vamos a molestar por ver a una chica en recepción ten bonita como usted, solo sonria y  dele gracias a Beth por recomendarla, bienvenida a la empresa.

En ese momento ya era una empleada como Beth y quizás la más femenina y delicada de las empleadas según el jefe de todas ellas, además de hacer el mejor café molido.

Lo dificil no fue llegar a ser una Mujer Profesionista, lo dificil fue ser una madre y mujer realizada.

El Gerente me había echado toda la culpa de lo que estaba sucediendo en el departamento de atención, solo por pone en papel los comentarios de las compañeras, ese reporte se lo había entregado a la nueva directora, como personal subordinado al gerente general no me conocía a quien tomaba en cuenta era al gerente, el era su mano fuerte para realizar las operaciones de atención.

Antes de irse de vacaciones me llamo a su oficina, había tenido una importante reunión con la Directora, toque a su puerta, al escuchar adelante abrí la puerta para darme cuenta de que se encontraban con él las 5 supervisoras que integraban el mando medio de responsabilidad, estaban por debajo de mí puesto.

Parecían que estaban siendo regañadas, todas tenían su caras bajas, el Gerente Keys me ordenó con su dedo sentarme frente a él, me senté para con voz alta y sin diplomacia el gerente me echara en cara que todos los problemas del área eran míos y solo míos, yo era el principal y único responsable del atraso de la empresa, yo era quien había hecho que el 60% de las empleadas no vinieran a trabajar, me informó que la Gerente le había dado una oportunidad para que el departamento funcionara como era debido, que el personalmente se había comprometido a que todos cumplieran su trabajo y estabamos en deuda con él, las 5 supervisoras no hablaban sobre lo que estaba pasando, hasta que Babe hablo cuando la señalo el gerente Keys con su dedo para pedir una solución a los problemas.

Babe con pena comenzó a decir: pues creo que no se ponen en nuestros zapatos,  no saben lo que cuesta llegar a tiempo al trabajo, la mayoría debemos de ir a dejara nuestro hijos a la escuela, debemos salir temprano por que sino debemos pagar más de la colegiatura para que nos lo cuiden, no saben cuando sufrimos por la falta de aire acondicionado, también no estamos de acuerdo en quedarnos más tiempo para terminar los reportes, creemos que es mucho papel, tampoco estamos de acuerdo de que hayan cambiado el uniforme, no lo queremos, queremos que haya café en la cocina y un horno de microndas.

El gerente escuchaba con atención y cuando ella dejo de decir lo que no le parecia, entonces el gerente Keys hablo: Señorita tomas, estoy de acuerdo en todo lo que dice usted y debemos hacer algo—en ese momento me dio la estocada fatal: como mí segundo al mando el Sr. Dickerson es quien a dejado que cosas tan insignificantes pueda hacer sentir mal a todas ustedes, así que pienso que el debe ponerse en su lugar y ya que dice que ustedes pueden hacer las cosas facilmente, entonces que nos demuestre que el puede hacerlas de la misma manera, durante un mes deberá usar el uniforme de la misma manera que ustedes y hará su trabajo de la misma manera que ustedes en zapatos altos y uniforme, de esa manera veremos si como dicen ustedes no nos ponemos en su lugar, pienso que si el puede hacer lo mismo entonces ustedes no tienen argumentos y excusas para no hacer su trabajo, el se va a dar cuenta de lo que realmente esta pasando y me matendrá informado durante mis vacaciones, mañana salgo en avión así que el va hacerse cargo del departamento y deberán obedecerlo en todo, la Directora esta enterada y ella sugirió esta solución, ella desea que la productivida aumente de aquí a un mes cuando yo regrese, las 5 supervisoras aceptaron el reto, si yo podía hacer mí

trabajo a la par de ellas, entonces mí jefe tenía la razón de que yo era el culpable de todo, pero si lograba las metas que quería la directora, entonces yo quedaría como un buen elemento dentro de la empresa, era una situación de doble filo, para ellas se abría la posibilidad de ocupar mí puesto. 

Les pidió a las supervisoras salir de su oficina, me quede con él para que me diera las últimas indicaciones antes de sus vacaciones de 25 días, me hizo firmar una carta compromiso para lograr las metas productivas, también me hizo firmar una carta donde el se deslindaba de lo que había dicho sobre que la directora sabia que vendría en uniforme femenino, era una treta de él, pero no pude argumentar algo más que aceptar que estaba en lo correcto, si las supervisoras sabían que era una treta de él, no me ayudarían.

Estaba atrapado, solo faltaba firmar el pagare por los uniformes para ser descontados de mí nomina, en forma sarcástica antes de ordenarme salir de su oficina dijo: "solo te faltan los zapatos, te acosejo que corras antes de que cierren las tiendas, ha otra cosa si quieres conservar tu trabajo me gustaría tener una foto tuya a las 9 de la mañana cuando lleges a tu oficina, de esa manera me voy a enterar si cumples tu palabra".

Salí sin hablar más estaba muy enojado, tome mis cosas y salí a la calle, por un rato camine rumbo a la parada de autobús, pero al pasar por una tienda recordé lo que debía hacer y entre para ver zapatos, me compre 6 pares de zapatos, varios resbalones de dolores de los uniformes, algunos juegos de ropa, medias suficientes, un bolso y cartera nuevas, algunas diadmas y pinzas para el cabello, todo lo conseguí dando la excusa que mí novia me había ordenado llevarle todas esas cosas, la vendedora estaba contenta por la comisión que iba a recibir y me dio un tip para acompletar el ajuar de mí “novia”, en forma discreta me dio una tarjeta: el Emporio de Thelma, ropa espacial para hombre, servicio y atención personalizada, tenemos productos importandos a buenos precios. Total discreción.

Decidí ir a ver de que se trataba, quizás podría encotrar otra cosa que me hiciera falta, pero cuando llegue una mujer madura y vestida de blanco iba a cerrar la tienda, al verme parado frente al vidrio del aparador, con una sonrisa regreso el pasardor para abrir de nuevo e invitarme a pasar.

Durante dos horas estuve dentro de la tienda, cuando salí tenía una nueva amiga y me llevaba lo que me hacia falta.

Al día siguiente sabía que iba a comenzar con el pie derecho, nadie de  las supervisoras y las compañeras, se burlaría de mí, me tomarían como una mas de ellas, con mí panti-vagina podía fingir una regla, también mis pechos de bordes invisibles podrían vibrar al menor rose y también les salían leche si así lo quería. 

En cuanto los zapatos, Thelma me había enseñado como caminar correctamente sin cansarme y sin quitarme los zapatos, eso era de mal gusto, quizás era la nueva jefa para ellas y me aceptaron mis cambios, comunicación por celular, ya no usaríamos papel para los reportes, aunque si debíamos guardar el trabajo en una base de datos común donde llevaría el control de casos especial para llevarlos yo, el café yo me encargaría de comprarlo y el horno entre todas debíamos cómpralo, en cuanto al uniforme no tenían escusa para no usarlo correctamente.

En cuanto eso, deje que el dia viernes fuera libre ropa, pero formal(ellas me recomendaron no usar pantalones, por mí cadera ancha)

En cuanto el maquillaje deje que hubiera venta por catalogo y de esa manera todoas estaban contentas.

Cuando debía regresar el gerente Keys, la Directora nos anuncio que el ya no vendría a trabajar y que yo iba a ocupar su lugar: la Señora Sandy Dickerson, la jefa de las piernas bonitas y trasero grande. 

***************

Señora?,  escuche esa palabra y me hizo recordar hacia 28 días, era otra persona, quizás profesionalmente había sido fácil, pero en mí vida privada era otra historia, el ser Señora me había costado dolor y superación.

Cuando llegue ese día con todas las cajas y bolsas que compre en un impulso sin pensar, mí esposa estaba en la casa con 5 amigas hablando del  negocio de su vida, el mantenimiento de casas, habían conseguido un contrato con la planta de autos y tenían un mes para demostrar que podían con el trabajo,  así que cuando se fueron sus amigas, yo estaba en mí recamara lamentando haber comprado todas esas cosas, ella me fue a reclamar por haberle comprado tantas cosas, antes de pesar en las necesidades de nuestra hija, entonces comenzó una pelea, me advirtió tajantemente que ella no podría hacerse cargo de su hija por el momento, debía estar en la planta a las 7 am y estaba a dos horas de camino, pasarían  por ella a las 5 am, así que debía levantarse temprano como a las 4 am, además debía tomar mis botas y mí ropa de trabajo, acepte que las tomara, entonces le dije el problema que tenía en el trabajo y que todo lo que había comprado no era para ella sino para mí, ella no tomo bien las cosas, pensó que le estaba haciendo una broma, pero le confirme que no era broma y así como ella había pedido mí ropa, yo le confirme que durante un mes yo debía ir al trabajo con tacones y falda, habíamos cambiado de roles, yo me haría cargo de la casa y de nuestra hija, ella de usar su fuerza para conseguir mayores ingresos.

Por un lado ella estaba contenta de que hubiera pasado eso para que yo me hiciera más responsable de nuestra hija y de la casa, pero por otro lado, ella estaba decepcionada de mí y de mí poco carácter.

Así comenzaron las cosas, para suavizar la situación yo me levanté más temprano para prepararle su comida para llevar y desayunar, así ocurrió durante todos los días, jamás espere un gracias por que yo jamás lo hice, no esperaba que ella lo hiciera, tampoco que me ayudara con mí hija cuando estuvo enferma, ni llevarla y traerla a la guardería, ni de que le diera de comer, yo me debí hacer cargo de todo eso, además de limpiar la casa los fines de semana y de ir a las juntas con la directora de la guardería, debí llevarme a la niña los días sábados al trabajo por que ella no podía cuidarla por el exceso de trabajo que tenía.

Le primera semana fue dura, pero cuando se enfermo mí hija fue más dura, debí faltar dos días para cuidarla, pero aun así hice mí trabajo desde mí casa, también debí pagar las medicinas con mí dinero.

El segundo fin de semana  con la niña enferma, la revisión de reportes, el aseo de la casa, estaba estresado, cuando el día domingo por la noche llego ella con aliento alcohólico, realmente no quise reclamarle nada, sabía que su trabajo

no era fácil y el deshogarse de esa forma estaba bien,  solo fue una pregunta sobre como le había ido, no espere que me fuera a pegar pero fue de esa manera, me descuide me tiro al suelo y me dio una patada me saco el aire y no pude respirar por un minuto, ella me pidió perdón por lo que hizo, se desquito conmigo del mal trabajo que habían hecho en una de la secciónes más abandonadas de la planta y del poco dinero que habían sacado.

Al día siguiente por la mañana antes de irse de disculpo y me explico en la posición que estaban con su negocio, acepte su disculpa y entendí por lo que estaban pasando, me pidió mí apoyo para que le prestara un poco de dinero, saque de mí bolso y del bote de galletas le preste lo que había ahorrado.

Continue trabajando con las supervisoras y en los nuevos equipos de trabajo que se había formado, eso me hizo escuchar a las compañeras y sus problemas, no eran muy diferentes a mis problemas, pude empatizar con ellas y entenderlas, propuse tener un horario flexible, pero que podíamos trabajar los sábados para compensar los horas perdidas, también había hecho un convenio con la directora de la guardería para que nos diera otra hora más para sacar a nuestros hijos, conseguí un descuento en la colegiatura, las compañeras estaban contentas con lo que había logrado, pero ese día no me sentía bien, me dolían las costillas por el golpe que recibí, antes de la hora de salida Beth me  quiso llevar doctor,  pero me negué, le dije que tenía que ir por mí hija y después iria con mí Doctor, Thelma me había dicho que ella tenía un Doctor especialista en casos  como el mio, era de confianza y discreto, la Directora no debía saber nada, si el doctor del edificio se enteraba que un

hombre trabajaba como mujer abría un problema de imagen para la empresa, no, lo mejor era manejarlo con discreción, así que con el dolor fui por mí hija y después llegue al consultorio que Thelma me había dicho, ella estaba esperándome, me ayudo a registrarme y a cuidar de mí hija mientras me revisaban, me tomaron radiografías, todo con discreción, las enfermeras me trataban como a una señorita y me decían mí nombre femenino que me registro Thelma: Señorta Sandy pase por aquí, podría por favor quitarse su ropa.

Salí de los rayos x y espere un rato en la sala de espera, le dije a Thelma que me había dado pena al quitarme mí blusa y vieran que no tenía pechos reales, ella me dijo que no me preocupara que la Doctora Meyers me iba ayudar.

Pasamos con la doctora Thelma llevaba a  mí hija, la Doctora tenía un carácter infantil y muy amable, me dio confianza en platicarle lo que había pasado y como me

sentía por la situación que estaba pasando con mí pareja, en el trabajo y conmigo mismo, no me sentía bien y no pude dejar de no llorar, realmente parecía una mujer doblegada por su esposo, a la Doctora no le importo si lloraba, sino lo importante era que me ayudaría para que ya no me sintiera de esa manera, me ayudaría aumentar mí seguridad, mí autoestima y lograr descubrir lo que realmente quería para ser feliz conmigo mismo.

Me pregunto si me gustaba cuidar a mí hija, le dije que estaba aprendiendo a hacerlo y que me gustaba darle de comer con mis pechos nuevos, ella se sonrio y me dio el diagnostico, solo tenía una pequeña fisura y me daría

medicamento para el dolor, con el tiempo se me quitaría el dolor, pero entonces me pregunto si quería darle de comer a mí hija con mis propios pechos, volte a ver a Thelma, ella mostraba una sonrisa de complot y esperaba mí respuesta, le dije que si ella podía hacerlo, entonces ella me dijo que podía hacer más cosas de lo que yo pensaba.

Me dio una extensa explicación de las personalidades perdidas en la infancia y de las disonancias de personalidad, me explico la dominancia cerebral de uno de los hemisferios, me explico el porque existía en mí un

fuerte sentimiento maternal, después me explico como en un año podría cambiar mí vida para simpre y lograr una vida más feliz, me explico paso a paso lo que debía hacer para lograrlo. Me dio un folleto con todas las explicaciones necesarias para tomar una decisión, para comenzar debía cuidar mí salud y alimentación, además me dio una serie de recetas para comprar medicina y en pocos meses podría alimentar a mí hija.

Me fui con varias decisiones que tomar.

Thelma fue como una madre para mí, me ayudo con mí hija y con las decisiones que tomar, pero un año después cuando había dejado atrás todas mis duda de poder ser feliz y una mujer completa y madura con la confianza de cuidar una hija, tome la decisión de separarme para casarme con el hijo de la Directora.
al fin era libre de decidir lo mejor para mi.