El apretón de mis , criadillas o Panditas

Todo cambio cuando mi esposa me apretó mis panditas.

Estaba orgulloso de que mi esposa se haya superado aprendiendo el oficio de mantenimiento de autos, habia entrado a trabaja a la principal empresa de venta de autos usados en la región norte, realmente ganaba bien dando mantenimiento a esos autos de reuso,  así que cuando predí mi trabajo, no sufrimos de en perder nuestra economía, así que decidimos que yo me hicera cargo de la casa y los niños.

Una tarde de un domingo le recordé que tenia la tarea de limpiar el techo, era una tarea ardua y debía ser hecha entre dos personas, así que me subí ayudar para recoger la bolsa llena de hojas de árbol, ella por ser más fuerte y alta, podía con las pesadas bolsas,  yo era más bien  de los hombres rellenitos sin músculos y de estatura baja en el promedio masculino.

Llevaba una hora ayudando con mucho esfuerzo al bajar las bolsas de hojas por las escaleras, cuando llegue al borde del tejado un pie se  resbaló, mi esposa alcanzó agarrarme de mi testículos pandas, me los apretó con fuerza, pero no pudo detemerme del todo por el tipo de tela que usaba en mis pantalones cortos, me fuí zafando poco a poco y caí sobre la escalera, mis piernas se abrieron en 90 grados y caí directamente sobre uno de los escalones, luego me voltee en el aire para caer directamente en medio del borde de la carretilla,  se me fue la respiración, mis testículos-panditas estaban destrozados, mi esposa me recriminó el ser tan descuidado y tonto, ella se descolgó y me ayudo a levantarme, trate de reponerme por la falta de aire hasta que  le dije que realmente tenía que ir al hospital, ella se burlaba de mi por ser débil y no aguantar un simple golpe.

Le insistí para ir la hospital, una hora después de acabar el techo, fuimos al hospital por que ya no aguantaba el dolor, el diagnóstico fue: luxación del hueso sacro, y aplastamiento severo del cartigalo del pene; en otras palabras,  mis panditas se quebraron junto con mi pene roto, total reposo durante 60 días y ya no podría tener un erección.

Mi esposa se hizo cargo económicamente de la familia y de llevar a mi hijos a la escuela, cuando pude me levante comencé lentamente hacer mis tareas de casa,para apoyar a mi esposa. Pero ella  me seguía recriminando el no ser tan fuerte como ella y no me dejaba hacer trabajos fuertes.

Pero cuando estaban por acabar mis 60 días de incapacidad y comenzar de nuevo a salir de casa para llevar a mis hijos a la escuela y comprar la despensa mi esposa sufrió un accidente de trabajo donde se le rompieron las dos piernas, al tratar de levantar un auto, fuera del horario de trabajo.

Tuve que ir por ella y llevarla al hospital, la empresa no se hizo responsable de los gastos, usamos los ahorros y nos quedamos a deber una fuerte suma al hospital.

El diagnóstico: 120 días en cama, nuestra economía estaba desecha, mis hijos estaban por entrar a la secundaría, la deuda del hospital era alta y debía hacer algo, se me ocurrió hablar con mi vecina que trabajaba en la misma empresa que mi esposa pero en la parte administrativa y interviniera para devolverle su trabajo.

Beth Morris, me recibió en su casa con mucha amabilidad, le explique mis problemas, ella me dijo que no  podía ayudar a mi esposa hasta que terminara la investigación del accidente, pero si podía ayudarme a mi a entrar a trabajar en el área  administrativa de la empresa, en el de recepcionista corporativa, ella me dijo: "no iba a ser fácil, pero no imposible, tienes lo necesario para lograrlo", me explicó que ella era la jefa de administrativa de recepcionistas corporativas y era quien asignaba a las recepcionistas de cada piso y controlaba la información del edificio, me informó que una sus chicas se habían ido por maternidad, así que tenía un lugar disponible, pero debíamos actuar rápido.

Me pareció un poco extraño que me ofreciera puesto, pero ella estaba decidida en que yo entraba a trabajar con ella, lo único que necesitaba ir al departamento de recursos humanos con una carta de presentación por parte de la oficina de empleo del gobierno,autorizando que tenía los conocimientos necesarios para ejercer el puesto, "todas la mujeres que desearan esa carta debían entrar el programa de ayuda de madres desempleadas con hijos",  ella me explicó los pasos para conseguir esa carta de la oficina del empleo, primero debía ingresar al programa especial de desempleo para madres desempleadas, yo  sabía que ese programa solo era para madres trabajadoras con hijos, cada aspirante al programa se le hacia un estudio socio-económico para conocer su situación personal, una trabajadora social iba a las casas para realizar el cuestionario y conocer el ambiente familiar de la aspirante.

Estaba resignado a perder la oportunidad, sabía que jamás podría volver a trabajar en un buen trabajo, Beth entonces me calmo y me hizo hacer un reto y una promesa, me retaba a demostrarle que yo no tenia lo necesario para trabajar como asistente administrativa, entonces  si ella me ayudaba a entrar a ese programa, yo  le debía prometer dar lo mejor de mi para ser sus ojos y oídos dentro la  empresa.

Acepte pensando que era una broma, solo me hizo prometer que a partir de esa tarde haría todo lo que ella me pidiera sin quejarme, ni hablar o decir una mala palabra aunque sintiera dolor físico y emocional, jamás me quejaría; entonces me dio una nueva visión de las cosas, la sumisión.

La sumisión a Beth me hizo ver mi realidad sobre mi vida, acepte que siempre habia estado equivocado, ahora debía dejar de pensar solo en mi mismo para pensar en las necesidades de los demás; antes de pensar e mi debía pensar antes en las necesidades de  jefe, por más que estuviera cansado debía sobreponerme y hacer lo que tenía que hacer para cumplir mi deber, además olvidarme de mis necesidades  para pensar en las necesidades mi familia y mi esposa, olvidando mis propias necesidades, podría hacer eso apartir de ese momento si aceptaba ser sumiso, humilde y amable.

 Beth sería mi maestra para lograr la felicidad de mi familia y de mi mismo, si solo renunciaba a mi mismo.

Con seriedad me dijo que yo tenía muchas buenas cualidades que yo no conocía pero que ella veía en mi y me servirían para obtener el empleo que yo necesitaba, debía olvidarme de mis conceptos machistas y estúpidos, solo para aceptar mi nueva realidad, debía quitarme lo que me sobraba y agregar lo que me faltaba.

Lo primero que tendría que hacer sería una purga de las cosas que ya no me iba a servir para cumplir con mis nuevas metas, además debía sin quejarme aceptar las cosas que Beth me ofrecía, diciendo siempre gracias y por favor, pero antes debí aprender a sonreír siempre  cuando me habla o me daba algo en las manos,aunque ella fuera grosera conmigo, antes que otra cosa sucediera Beth me hizo ver que una de las hermosas cualidades que tenía, estaba en mi carácter el se amable y servicial con los demás, mi actitud machista era el principal enemigo a vencer y debía amarrarme a mi lado de mujer sumisa.

En cuanto mi físico las ventajas que tenía para conseguir el empleo, eran el hecho por ser rellenito, bajo de estatura con piernas largas y gordas, me daba una ventaja enorme sobre las demás postulantes, el aumento de peso por haber estado en reposo aumentaba la imagen natural con unas nalgas de una madre madura y o una mujer sedentaria  y trabajadora, por sedentarismo de comer chatarra en una oficina mi  trasero era enorme y gordo.

Me mostró como, a pesar de tener pechos pequeños, podría aumentarlos considerablemente usando una pócima caliente y aceitosa en base de mandrágora con ajenjo, por más de  una hora amarro y estrujo mis pechos hasta obtener volumen, debí soportar el  dolor con una sonrisa todo el tiempo, así obtuve un considerable aumento de pechos, al ponerme uno de sus brasieres de Beth para descansarlos me di cuenta de que mis pechos cupieron perfectamente sin ajustar los tirantes, era un alivió enorme en usar un brassier suave y lindo,  me di cuenta de que realmente era muy efectivo ese remedio natural en base mandrágora para tener volumen en los pechos, solo para mantener los efectos debía mantener los masajes todas las noches, o en tres horas regresarían a su estado orginal.

// Beth me  hizo prometer que no diría el secreto del método  para esconder o mejor dicho para desaparecer mi pene para obtener una vagina bastante real y funcional, Beth me aseguró que ningún hombre podría diferenciarla de una verdadera, aun si la tocaran o insertar sus dedos en el fingido conducto vaginal o la friccionaban, no se daría cuenta de que era falsa; si aprendía a hacer bien el los pasos correctos con seguridad y sin temor a lastimarme, no tendría dolor permanente y el canal vaginal  podría tener la profundidad de un dedo o aproximadamente de unos 17 cm y además de unos labios flexibles y largos, serían tan realistas que si alguien me viera sin pantaletas o metiera sus dedos a mis pantaletas no se daría cuenta de que era falsa.


Realmente sude para aprender hacerlo a la perfección, Beth me obligó a subir y bajar mis trufas-pandas varias veces hasta perder el miedo y no sentir dolor, al subirlos. 

De algún modo el hecho de saber subir mis trufas-testiculos a mi hueso sacro y tomar analgesicos me dio una ventaja para tener menos dolor,  valió la pena los esfuerzos por aguantar el dolor, ahora tenia un  
perfecto cuerpo de mujer, con vagina de  labios vaginales largos y flexibles, como los de cualquier mujer, era como si jamás hubiera tenido  un pene, me sentía cómodo sin pene.

Beth me ordenó confirmar que habia hecho un buen trabajo en mi vagina, así que Introduje mi dedo lentamente hasta el fondo para sentir que llegaba hasta mi zona G y dar un pequeño gimido, allí era donde tenia atrapado mi pene con un pequeño anillo de plata que vibraba cuando lo tocaba ligeramente, era tan reducido no podía eyacular, solo hacer pipí,  sentia un agradable dolor que me hacia gemir,era bastante realista ese dolor, Beth dijo que sería como una pequeña. 

Siempre tuve las caderas anchas y al usar la ropa modeladora de Beth, me aplano el vientre y me redujo la cintura en al menos dos tallas, ahora tenia unas hermosas curvas de mujer madura, además de un vientre liso y agradable.

Ya sin pene las pantaletas de Beth se ajustaban a la perfección a mi cuerpo en el área del tiro de la pantaleta, mostrando un lindo pie de camello se se veía por debajo de mi vientre, era fantástico el ver el monte de venus muy natural.


Mis pechos levantados por el body modelador, se veían hermosos y llenos de vida, del mismo tamaño que los de Beth.

Mis gordos muslos  eran más hermosos por las medias que usaba, Beth me enseño a ponerme correctamente las medias de tubo para no engancharlos al momento de hacer pipi.

También me enseño a colocarme correctamente toallas femeninas, eso me daría más confianza sobre lo que iba hacer, si iba a ir al baño la oficina de la empresa, alguna de las compañeras me pediria una toalla o sería raro que no usara una, así que era algo que era necesario aprender,  de esa forma nadie dudaría que no era mujer, fijamos el día 28 al día 7 de cada mes como mi fecha de festejo de la luna roja.

Me hizo ponerme un cort y delgado vestido cruzado tipo suéter de lana en color gris y una botas al tobillo de tacón alto y fino, mis pantorrillas se veía delgadas y femeninas,  el vestido acentuaba aun más mi figura de mujer de oficina, como hombre me gustaba mucho la mujer que veía en el espejo.

Beth me entrego un cinturón ancho para ajustar más mi figura, ahora veía a la mujer con la que soñé toda la vida, era la de mis sueños.


No tenía frío a pesar de que solo traía puesto ese vestido y la ropa interior, la sensación era increíblemente agradable, sentia la sauavidad de mis pantaletas y la sencación de que mis muslos se rozaban al caminar, tenía nervios, para calmarme Beth me pellizco mi monte de venus, sin compasión mantuvo la presión, me advirtió que dejara de pensar en tonterías y me concentrar en lo que estaba haciendo, me hizo prometer que dejaría de pensar como una niña y pensara como un adulta, nadie podría dañarme al menos que yo lo quisiera.


Después me concentre en  descubrir mi belleza de mi rostro, fue un momento difícil por que cometí muchos errores al tomar los productos correctos y el uso de las brochas.

Solo me dió los pasos necesarios para embellecer mi rostro, yo debía aprender por mi cuenta como hacer un buen maquillaje como cualquier mujer de ofcina, pero me advirtió que eso solo se logra hacerlo decentemente bien, si se hace todos los días con la actitud de sentir la belleza de mi rostro, esa era una actitud que solo yo debía disfrutar haciendola para mi mismo,  solo con la experiencia y el interes por tener el  rostro más bello que podía logar todos los días sin importar si me veía o no así se logra la maestría del automaquillaje.

Utilizamos una hora hasta que pude maquillarme por mi mismo en una forma decente, me dejó admirar mi trabajo, era increíble lo bello que era mi rostro, mi labios eran lindos con lapíz labial, la sobras en los parpados, hacían más grandes mis ojos, dando seriedad a mi rostro, Beth dijo que habia perdido mucho tiempo y debía hacerlo mejor, me recomendó ir a un buen salón de belleza.

Al bello rostro que estaba viendo, Beth me ordenó colocarle unas arracadas a las orejas y  un pequeño collar de cuentas de madera, además de ponerme su perfume favorito de feromonas, me hizo colocarme uñas falsas,    entonces me pidio levantarme para acomodar unos detalles,  antes me acomodo mi cola de caballo y luego me levanto el vestido para jalar mis pantaletas hacia afuera, para evitar las dobles nalgüitas, en ese aspecto debía ser muy cuidadoso.

Me hizo darme una vuelta, caminar y agacharme de lado, lo repetí hasta que Beth estuvo conforme en la forma de caminar y moverme. 

Me hizo notar que los bordes de mis pantaletas y los tirantes se notaban, pero me dijo que eso eso no importaba y era normal por que me daba un toque  sexy y descuidado, como a cualquier mujer de casa que quiere llamar la atención, así que para darme confianza y valor, me pidió quitarme las pantaletas, para evitar un pellizco lo hice sin pensar mucho las cosas.

Todo lo que Beth me habia prometido se iba cumpliendo, mi voz se habia aniñado después del fuerte apretón de mis pandas, así que con un poco de práctica usando un tono agudo de mujer tonta, Beth me enseño a manejar frases estúpidas al decirlas en un modo sureño, pero el verdadero secreto era la pócima de Mandragora con androgina, ese era el secreto para mantener una fiel imagen femenina sin temor a que se dieran cuenta de que no lo era.

 Beth me dijo que lo demás solo era actitud y hecharme hacia adelante como cualquier mujer, no debía temer a nada.

Ella para probar mi actitud y mi decisión por conseguir  ese trabajo, me pidió regresar a mi casa para informarle a mi esposa sobre mi plan para ayudarle a la situación financiera, debía usar la frases que había hecho aprenderme y no usar mi tono de niño, sino de niña sureña,  pero antes de irme debía probarle que podría hacerlo así que me ordenó  recibir al fontanero que llegaría para arreglar su lavatrastes y esperar hasta que terminara su trabajo, en ese momento tocaron la puerta y me ordenó bajar para abrir la puerta, no recordé que no traía pantaletas hasta que vi las miradas furtivas de Jorge el fontanero, pero no sucedió nada fuera de mi control, mantuve las piernas cruzadas y el rostro serio, cuando le page y se fue, Beth me hizo ver que no era malo dar vistas agradables a los hombres que hacian nuestros trabajo, por que de esa manera la proxima vez lo hacen mejor.


***

Camine directo a la recamara de mi esposa, le habia dejado de comer antes de irme y descansaba en su cama, abrí lentamente la puerta y entre, espere hasta que abrió sus ojos, me vio y se sorprendio, pero comence hablar con ella, le explique mi idea sobre ayudar con la economía familiar, por un momento no estuvo de acuerdo, por que sabía que ella podría conseguir un buen trabajo después de recuperarse, pero al ver lo tan bien que podía pasar como mujer acepto, le agrado ver que mis nalgas se movían como una gelatina, con mi nueva imagen y las frases de niña tonta de Beth  la convencí al decirle que solo sería por un tiempo, mientras ella se recuperaba.

 Acepto que yo fuera a trabajar, entonces me dio buenas palabras  sobre la mujer que veía frente a ella, acepto que tenia un bonito trasero y una piernas bonitas en medias, acepto que yo era más agradable que ella en sus buenos tiempos, ahora que tenía más músculos que grasa, le parecía lejano el momento que uso vestidos y faldas.

Me dijo que mis piernas eran hermosas bajo las medias brillosas, y mi ancho trasero era bonito para ella, me pidio que le enseñara a maquillarse como yo.


Me regaló  toda su ropa que ya no usaba y la tenia guardada en el desvan,  diciendo que a mi me quedaría mejor que a ella, por tener más curvas que ella,  mis pies eran más pequeños así que debería comprar algunos pares de zapatos.

**

Una semana después pude entrar al programa con ayuda de Beth, me ofreció una documentación completa con el apellido de mi esposa, de una aspiranta que nunca regreso, así que me convertí en la hermana menor de mi esposa, ahora me llamaría Heather Tomas.

Preparamos emocionalmente mi historia, yo diría que  que mi esposo me abandonó con mis hijos y mi hermana me daba cobijo en su casa, diría que tenia experiencia administrativa; la trabajadora social vino a mi casa y durante dos horas estuvo realizando su inspección, conoció a mi esposa, pero por su musculosos brazos paso como el esposo de mi esposa. 

Esa historá funcionó y en dos semanas estaba trabajando,  para ir al trabajo había reciclado algunos buenos vestidos se mi esposa y con mi ahorros compre seis pares de zapatos y pantimedias. Otros de vestidos para oficina Beth me los habia regalado.

Como jefa Beth era muy ruda conmigo y me cargaba de trabajo y malos tratos, pero en tres meses estaba adaptado a mi nuevo rol de fiel esposa y trabajadora sumisa,  mis hijos me daban en lugar como su madre verdadera, hacia de comer e  iba a sus escuelas para firmar sus boletas y a las juntas como su madre, además le compraba ropa.

Mi esposa comenzó a caminar y andar por la casa, estaba molesta conmigo por que yo era más bonita que ella y  ahora era el sustento de la casa, nuevamente los papeles estaban invertidos, pero de alguna manera le gustaba más mi nueva personalidad y estaba decidido a mantener mi decisión hasta el final.

El entender la situación que ella estaba pasando, me hizo que nos acercaramos más,me volví un poco más atrevido al usar  vestidos cortos que eran sus preferidos a la hora de preparar de comer.desde el principio me prohibio usar pantalones de mezclilla, pero no las faldas cortas de mezcilla, de esa manera me sentía más cómodo en casa y distraía a mi esposa.

Nuestra vida matrimonial cambio, lo roles cambiaron y se mantuvieron estabels, ella se volvió más intensa, el aceptar a mi esposa usar pantaletas con vibrador hacia más entretenidos los momentos en casa, para llevarle su comida o lo que necesitaba.

Mi unica diversión era comprar ropa y zapatos, Beth me habia iniciado en ese hobby.


Cuando mi esposa se recupero por completo las cosas volvieron a la normalidad, se dedico a  consiguir un buen trabajo
y me advirtió que debía salirme de trabajar.


Beth me incitaba a seguir trabajando, su idea era promoverme para ser asistente ejecutiva; me aseguraba que  ganaría más dinero que mi esposa, estaba en una decisión importante, con toda mi alma quería seguir trabajando como asistente administrativa, era bueno en eso.

Ahora me sentía bien vistiendo como asistente y con lo que estaba haciendo, quería continuar pero también quería ayudar a mi esposa, habia hecho una promesa y no podia reusarme, debía aceptar salirme de trabajar.

Beth nuevamente me ayudo para resolver mi problema, habia hablado con uno de los jefes mayores de la empresa, diciendo que mi esposa era un buen empleado, pero debido a un pequeño descuido había salido de la empresa, pero habia aprendido su lección y no volvería a cometer ese error.
Después de negociar un poco logro que ella volviera a trabajar, solo con una condición, que yo también seguiera trabajando.

Beth me dijo que Le habia conseguido a mi esposa un trabajo en una pequeña agencia de autos en una pequeña ciudad sureña, pero también necesitaban una coordinadora adminstrativa, así que yo debía seguir trabajando como asistente, así que debimos mudarnos al pequeño pueblo donde estaba la agencia de autos.

Mis hijos segurían su preparatoria sin problemas en la nueva pequeña ciudad, sería un nuevo cambio para la familia, comenza de cero llegando a ser felices, manteniendo nuestros roles que hasta ahora estaban funcionado a la perfección.

El pueblo era un alegre, era tradicional pueblo respecto a que los hombre aun dominaban todos los aspectos de la economía familiar.

Para algunas mujeres de se pueblo en hecho de que trabajara estaba mal visto, pero como se supónia que era mujer de la ciudad, no era tan malo, decidimos mantener el perfil bajo aceptando nuestro roles
de hombre y mujer, sin llamara la atención en lo que realmente eramos.



Pero antes de irme de la ciudad sin decirle a mi esposa pague mi pequeña cirugía de aumento los pechos, sabía que el hacer eso me daría una ventaja importante
para mantener mi empleo, nadie podría dudar que no era mujer al ver uno hermosos pechos verdaderos, ajustados por un lindo brassiere, por debajo de mi blusa blanca.

Mi esposa no cupo de alegría cuando descubrió que ya tenía pechos propios y eran más lindos que los de ella. Ahora caminaba con mas urgullo y confianza, mis hijos también aceptaron que fue una buena decisión. Me daba más confianza en usar la ropa escotada de mi esposa, que ella jamás se puso, pero que a mi si me quedaba ese estilo.

Beth me habia entrenado bien en todo lo referente a los procesos administrativos y darle asistencia femenina a los gerentes cuando estaban cansados, sabía que  podría cumplir a la perfección todo  lo que solicitaran al momento que lo necesitaran,  el gerente era un hombre alfa que llevaba su oficina con firmeza y decisión, no le gustaban los "NO", yo solo debía ayudarlo y dejar que el tomara las decisiones, otra habilidad importante fue descubir que mi garganta era más profunda de lo que pensaba, un buena cualidad en una asistente  que ayuda para hacer negocios.

A pesar de mi esposa me habia prohibido usar pantalones, yo  habia comenzado a usar pantalones para ir a la oficina, era la moda en la ciudad, sabía que mi trasero era lindo y podía lucir, pero  ahora en pequeña ciudad, debía aceptar que las políticas del gerente de la agencia, su politica era  "cero pantalones" para ir a la oficina, solo debía verme linda al usar vestidos, faldas, blusas con botones a la izquierda 
y verme linda, tener el escritorio lindo con una flor, llevarle su cafe a tiempo y caliente, además de no negarme a sus pedimentos, la unica ventaja sería que podría ir sin medias, y las piernas desnudas.

Todos en la agencia supieron que mi esposa y yo eramos pareja, así que llegábamos juntos a la oficina para tomar asistencia.
yo me iba a mi escritorio frente al gerente y ella al taller con el jefe de mecánicos, yo hacia el trabajo limpio y ella el sucio.

El gerente me acepto de inmediato como su mano fuerte en los procesos administrativos y me daba consideraciones para ir por mis hijos o llegar tarde, si yo hacia bien mi trabajo.
Realmente Creía que el aumento de pechos habia sido una buena decisión, daba una buena imagen a la agencia y el gerente me trataba mejor que sus demás empleadas.

Los domingos ibamos a misa toda la familia como una buena familia del lugar, yo usaba los viejos vestidos de mi esposa y otros de los vestidos que habia arreglado para re-usarlos, era feliz con este estilo de vida de mujer puebleria, el usar medias con vestidos lindos, ropa interior suave y linda, además de faldas y vestidos iba conmigo,  que más podía pedir?.

ahora pensaba que habia nacido para ser mujer, mi misión era esa, además de disfrutar el rol de esposa y  trabajadora de oficina, debía mantenerme bella y hermosa para mi.

Ahora aceptaba mi lugar en este mundo y la felicidad me llegaba a manos llenas, gracias al apretón de mis panditas.

El reto

Comenzamos a discutir en elevador del edificio corporativo, mi esposa estaba molesta por reclamarle su falta de atención a la familia, ella se excuso diciendo que no entendía lo que ella estaba pasando por cumplir con su trabajo.

Le conteste que yo también trabajaba y atendía a mis hijos, los llevaba a la escuela y llegaba a tiempo al trabajo, compra la comida y hacía la cena, cuando ella llegaba todo estaba limpio, para que ella comiera.

Ella no estaba de acuerdo y alegó que su trabajo era más pesado que el mio, ella tenía que atender a su jefe cuando el la necesitara y quedarse tarde para termina su trabajo, se justificó diciendo que su horario era más estricto y debía estar antes que su jefe, debía imprimir y engargolar cientos presentaciones al día, además estar en las reuniones para hacer las minutas y mantener el archivo al día. Con molestia ella me reclamó diciendo que mi trabajo era más tranquilo, recibiendo y sellando documentos de operaciones, me la pasaba sentado todo el tiempo.

En el elevador iban varios de nuestros compañeros de piso, entre ellos estaba la jefa de recursos humanos, para detener el conflicto levanto su voz, para dar una propuesta de solución: en elevador se abrió y debíamos salir, caminamos fuera junto con los compañeros, la jefa de recursos se llamaba Beth y nos tomó de las manos para que no huyéramos, nos rodearen los demás compañeros esperando la solución a nuestro conflicto.

Con los brazos cruzados nos miró como una madre ofendida, entonces habló: Dick, Heather, les propongo hacer la técnica de posición invertida, ambos la miramos con mirada de extrañeza y duda,

Ella comenzó a explicar que los conflictos suceden cuando no existe una empatia por desconocimiento de la otra parte, lo dijo de esta manera: el cambiar de sillas a veces funciona, el no saber lo que ve la otra persona hace que se alejen, les propongo que cambien de lugares, que tu hagas lo que hace ella, y ella lo que hace él, los dos harán lo que hace el otro al menos un mes o dos, de esa manera entenderán lo que les esta pasando al otro, que les parece?

De inmediato mi esposa acepto la proposición, yo lo pensé un poco y pregunte: ¿Qué era lo que se entendía por hacer lo que hace el otro?, Beth contestó que seria hacer todo el trabajo y rol que hace el otro, entonces acepte considerando que ella se haría cargo de los niños y de la casa.

Los compañeros aplaudieron al momento de darnos las manos para concretar el trato hecho, en ese momento una de las compañeras lanzó una apuesta de que no podría lograr pasar la prueba ni un solo día, haciendo el trabajo de ella,  otro compañero aumento la aposta a favor mio, a que pasaba el mes haciendo el trabajo de mi esposa, uno más aposto un mes y medio, otra compañera aposto los dos meses y al final se dio la ultima apuesta de lograr pasar los dos meses, apostando dos meses y un día, 

Beth acepto ser la casa para las apuestas, entonces puso más condiciones y aclaraciones al trato hecho,para darle más atracción a las apuestas, dijo ante todos con entusiasmo: ok. chicos,  no se pagara la apuesta si alguno de los presentes habla de más sobre este asunto, si alguien fuera de nosotros se entera de este trato, entonces les va ir mal en la próxima quincena o quizás buscara un mejor empleo, cada día que pase se subirá una foto de los participantes de este trato, de esa manera se confirmara que cumplieron con trato hecho, en ese día, los fines de semana podrán subir fotos de sus actividades familiares, para comprobar que realmente estan cumpliendo con sus roles, el trato es por el cambio de rol es completo durante el tiempo que durante el trato  o hasta que se den por vencidos, cada uno deberá desempeñar el papel del otro íntegramente, sin queja,  si alguno se queja o dice que ya no quiere seguir un día más,  entonces los integrantes del trato pagaran las apuestas de todos los presentes, estamos de acuerdo?--todos aceptaron con un "Si" al mismo tiempo, mi esposa también acepto colocando su mano para que pusiera la mía,  solo faltaba yo, porque debía increpar la última duda que tenía: y si se enteran los jefes?, ellos sabrán de esto? y habrá represalias.

Beth con una mirada burlona y firme dijo: porque se deberán enterar?, que represalias habría, si  yo, soy la directora de recursos humanos, nadie se debe enterar de este trato, ustedes decidieron colocarse en el lugar del otro, para mi solo es un experimento social, una prueba de integración para confirmar que cualquiera puede hacer lo mismo que el otro, es una prueba 24/7 para ponerse en el lugar del otro, quien ve que es  malo?, además vas a ganar dinero, así que estas dentro o estas fuera de la empresa?--sentí que eso era una amenaza y no quería perder mi trabajo, así que levante mi mano y acepte el trato.

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Nos quedamos otro rato hablando los detalles técnicos con Beth, para hacer el trabajo de mi esposa y ella el mio,  como jefa de recursos humanos, nos daría un memorándum de reubicación temporal para cubrir vacaciones y para inducción al puesto, 

El primer día de trabajo sería de prueba para confirmar las apuestas o aumentar apuestas, ella daría el visto bueno si todo podría avanzar al siguiente nivel.

Nos hizo firmar varios pagares para asegurar las apuestas, de alguna manera mi esposa y yo estábamos juntos, pero las cosas podría cambiar y quedarse con la parte del otro, 

Mi esposa llegó de mal humor así que yo tuve que hablar con mis hijos y explicarles la situación que pasaríamos por dos meses, ellos estaban extrañados, pero les explique que si ganábamos la apuesta, entonces tendríamos un fondo para que fueran a la escuela superior.

Estuvieron de acuerdo en que ella fuera quien los llevara a la escuela.

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Las cosas no salieron como se habían acordado, sobre todo en el cuidado de nuestro hijos, por  saber que podría entrar más tarpde, ella se quedo dormida, así que yo tuve que llevarlos a sus escuelas como todos los días, 

Sabía que ella no me ayudaría a lograr una imagen lo más fiel al de una asistente, así que tome dos horas más del tiempo que usaba para arreglarme.

Quizás tuve el momento para negarme hacer esa tonta apuesta, pero también sabia que podría lograrla, mi experiencia durante la secundaría y la preparatoria me daba una ventaja que debía aprovechar.

La noche anterior había adelantado trabajo y tenía todo listo para ir a trabajar como asistente ejecutiva, mi queja hacia ella incluía que jamás tenia buen gusto para ir a trabajar, así que debía demostrarle como debía ir a trabajar, ella no era una mujer que fuera perfeccionador con su persona, era funcional y utilitaria, tampoco ponía mucho esfuerzo en su maquillaje.

Use esas dos horas para lograr una buena imagen ejecutiva, sabía que tenia buena ropa que ya no usaba por excederse de peso, yo también estaba excedido de peso, pero sabía que ella había comprado un bodyair para reducir tallas, así que lo encontré y me lo puse estaba nuevo, asi que en un segundo obtuve una buena figura con dos tallas menos y la vieja ropa de ella me quedo a la perfección.

Para mis piernas use sus mejores pantimedias y sus viejos zapatos cerrados de tacón cuadrado, trate de hacer tersas mis piernas lo más que podía al usar loción corporal.

Para mis pechos habia logrado un buen volumen y agradable firmeza.

Para ese día había escogido su viejo traje sastre color negro de lineas blancas  y blusa beige, el bra era blanco, pero las pantaletas era rojas, esa era un tradición de mi madre tenía para la buena suerte.

Me puse mis lentes y baje para seguir mi rutina diaria para prepara las viandas de mis hijos, todo transcurrió sin problemas, vi el reloj y no bajaba, era muy tarde así que les dije que subieran a la camioneta así comenzó mi día.

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Deje a mis hijos de 10 y 12 años en su escuela primaria, a mi hija mayor la deje en la secundaría a dos calles de la primera escuela, ella me avaló lo bien que había hecho mi maquillaje y lo bien que se veían mis piernas en esa falda sobre las rodillas, estaba admirada por lo bien que lucia en traje ejecutivo de su madre y por la suave voz que podía lograr, parecida a la de ella.

Conduje como un desaforado por las calles alternas para llegar a mi trabajo, no me importó lo que me gritaban cuando me atravesaba a su paso.

Llegue al estacionamiento del edificio enseñando mi identificación del trabajo.

Encontre un lugar cerca del elevador por que uno de los vigilantes me indicó que lo ocupara, nunca me habia pasado eso, siempre me mandaba lejos, así que aproveche y lo tome.

Respire, volví a revisar mi maquillaje, mi ropa y mis medias estuvieran perfectas, no quería fallas o vergüenza por si alguno de los compañeros que me reconocía.

Tome mi tiempo, hice oración para que mi día fuera productivo como todos los días y salí del auto, tome el viejo bolso de mi esposa, guarde las llaves del auto, me puse el gafete de identificación laboral. 

Di unos cuantos pasos al elevador, varios compañeros esperaban el elevador, ni siquiera les importó que estuviera cerca de ellos, 

Al entrar al elevador uno de ellos me cedió el paso primero, me ubique cerca de la entrada.Los compañeros siguieron en su conversación, solo uno de ellos me miro de re-ojo.  me mantuve mirando el número de pisos.

En piso 41 debía bajarme, deje pasar a los compañeros, me ubique para saber a donde debía ir, mi camino normal era en el piso dos y caminar a la izquierda, en este piso debía ir por varios pasillos hasta el área corporativa, pasar todas las oficinas hasta el final de ellas, en un pequeño cubículo frente a la oficina del jefe de mi esposa, el Sr. Armando Grande, Director de Ventas.

Vi el pequeño reloj de mi esposa, eran 9:05, el Director aun no llegaba, debía pasar primero al área de recursos humanos por mi memorandum de asignación de puesto temporal.

Llegue al área, debía buscar a Carol una chica que llevaba el control de puestos, la Busque entre los pasillos de Cubículos, vi entrar a una chica de pantalones a un cubículo, le pregunte por Carol, me dijo que ella era, le explique que venía por un Memorándum de asignación, la chica no me permitió acabar y terminó mi explicación: si mi jefa me aviso que vendrías de recoger tu memorándum para ocupar el puesto de Heather Tomas por vacaciones, vienes de la planta, verdad? tu nombre es--vio un papel escrito en su escritorio y contunuó diciendo: Heidi Tomson, número de empleada: 04141041,asistente ejecutiva nivel B, si esperame un momento solo lo imprimo y te lo entrego, Heidi si quieres sentarte un momento--me señalo un sillón frente a su cubículo, me sentí de mejor manera, manteniendo las piernas juntas y los tobillos cruzados, Carol hizo su trabajo, fue a recoger las impresiones, me hizo firmar una de las copias, coloque el nombre de Heidi Tomson con letra más grande y recta que podía.

Carol me deseo buen día de trabajo y me dio una pequeña explicación de como era el jefe de mi esposa: el Sr. Grande es un jefe serio, que le gusta la formalidad y le hablen de usted y señor, no le gustan los errores, que más te puedo decir; bueno le gusta que los escritorios no haya papeles sobre ellos, le gusta que sus empleados pierdan tiempo, pero es buen tipo en las fiestas de la empresa--no entendí bien eso de que era "un buen tipo en las fiestas", la imagen que me daba Carol era de un hombre de carácter difícil. 

Me despedí de Carol con en beso en la mejilla y acordando que iríamos a comer cuando se pudiéramos hacerlo, me alegré que ella me reconociera como mujer.

Llegue frente a la oficina del Sr. Grande, su oficina estaba abierta, toque levemente para llamar su atención,  el estaba fumando un puro viendo por su ventanal, se volteo y pude ver que era un hombre bastante atractivo, tenía bigote bien cortado su cabello echado hacia atrás, su traje era caro y sus zapatos perfectamente limpios, me vio por un breve momento desde el lugar que estaba, yo me mantuve en la puerta con las manos al frente y el memorándum en una mano.

Me sentí turbado por la presencia del Sr. Grant, no sabia qu hacer, quería huir, pero el me invitó a pasar para entregarle el memorándum, con amabilidad me indicó que me sentara en su silla frenta a su escritorio de cristal, mientras nos acomodabamos en las sillas, el Sr. Grant me informó que sabía que yo era la suplente de Heather, que Beth Hammer le había informado sobre quien era yo y sobre que trabajaba en el planta de la empresa hacia tres años, me pidio mi memorándum para firmarlo y recordar mi nombre, comenzó a recordar los adjetivos que le había dado Beth sobre mi nueva personalidad, el sr. Grant dijo:: recuerdo que me dijo que usted es una mujer tranquila, capaz, callada, que le gusta hacer tu trabajo, eso me gusta de una asistente, solo me dijo que era usted un poco nerviosa cuando se sentía hostigada, eso me dijo ella, pero mejor diga me como es usted, tiene familia?, esta casada?, tiene problemas personales?

Me quite el bolso y lo deje a un lado, mantenía mi mejor forma de sentarme con las pierna juntas, tome aire y con aplomo cruce las piernas, me acomodé  mis lentes y puse un cabello detrás de mi oreja, para comenzar hablar tosí un poco, mi voz por los nervios se hizo extraña, pero aceptable, comencé a crear mi historia en el momento, sin detenerme a tomar aire: como dice usted, soy tranquila, no me gustan los problemas, me gusta hacer mi trabajo con calma y atención, soy ser sería con el trato a los demás, pero con amabilidad y servicio, estuve tras años en la planta--sabía como se trabajaba en la planta por que tenia mucho contacto con las asistentes así que sabía el nombre de ellas y que el gerente de la planta era un considerado jefe, salían temprano los viernes, le explique que me llevaba bien con las compañeras y le dí el nombre de cada una de ellas, continué diciendo del jefe de ellas: mi jefe es considerado y amable conmigo, jamás me grita o me llama la atención sin causa justificada, me gusta entregar a tiempo mi trabajo mecanográfico y si tengo errores, me gusta que me los digan para aprender de ellos, en cuanto a mi situación personal, soy reservada con mi vida privada, trato de no mezclar mis situaciones familiares con las del trabajo,  trato hacer lo que puedo con mis tres hijos, la grande esta en la secundaría y los otros dos están en la primaria, son mi adoración, quiero que mi hija vaya a la universidad, ella es mi adoración, los otros dos chicos soy un desastre pero los amo, mi esposo no me apoya en la casa, ni los hijos siempre se justifica con su trabajo y no me apoya esta mañana tuve que llevarlos a la escuela, por que el no se levanto para llevarlos, por la tarde tengo que ir por ellos y llevarlos a la casa, pero eso es mi problema, lo siento si le estoy contando mis cosas personales, solo que pense que sería bueno decirle, no cree usted?--el sr. Grande sonrió y contesto mi pregunta de afirmación: Heidi creo que es bueno saber en que tiene su atención además del trabajo, su compañera Heather siempre esta distraida en otras cosas y eso le complica hacer bien su trabajo, realmente muchos dicen que soy exigente, pero realmente no lo soy solo quiero que cada quien cumpla su trabajo y se responsabilice de sus errores, en cuanto el tiempo de llegada realmente no me interese que llegue tarde solo que cumpla a tiempo con su trabajo, en cuanto a irse a ver a sus hijos no tengo problema con eso, solo avíseme cuando se vaya y cuando regrese, quizás en algunas ocasiones necesite de su ayuda para los fines de semana o algunas reuniones gerenciales extraordinarias, pero eso le avisaría, en la computadora tiene mi agenda y mis contactos, usted va a atender mi correo y mi documentación, en cuanto el apoyo al área le van a pedir presentaciones de ventas, información de clientes y formatos de contratos, eso es todo lo que tiene que hacer, en cuanto los reportes del área son fáciles y le voy a enseñar hacerlos, son fáciles de hacer, pero a su compañera Heather siempre le cuesta trabajo hacerlos a tiempo, espero que usted no se le dificulte, en cuanto a su escritorio me gusta que este limpio y arreglado, no me importa si tiene alguna foto de sus hijos, lo que si me gustaría que tuviera fuera una flor para alegrar su escritorio cree que pueda hacerlo?--afirme con la cabeza a su solicitud, sabía que fuera del edificio siempre se colocaba un señor que vendía flores, solo era cuestión de pasar y comprar una flor, el sr. Gran continuo hablando: en cuanto a los apoyos extras que no son necesarios, pero si importantes, es el preparar café y traerme el periódico, por lo demás me gustaría que llegara arreglada de la misma manera en que llegó a trabajar esta mañana, cree que pueda cumplir con mis requerimientos?

Apreté los labios y conteste levemente con un si señor, no hay problema, su café y su periódico estarán listos en cuanto llegue.

El Sr. Grande hizo su primera solicitud: ahora cree que pueda traerme un café caliente?


Desperté de mi falta de atención por poner en orden todas tareas y  solicitudes que debía tener por la mañana, y le dije que se lo traía en un momento, después de instalarme en el escritorio.

**

Los cajones del escritorio estaban cerrados con llave, sabía una manera de abrirlos desde abajo, me agache y bote el seguro de los cajones, así pude guardar mi bolso en el cajón inferior, de inmediato camine hacia el gabinete del área asignada para prepara alimentos, junto al garrafón del agua, esa área era conocida por la de los comunicados extra-oficiales, sacaba el café y la azúcar del cajón inferior, cuando escuche la voz de un hombre que se presentaba como mi "Compañero Bob", vendedor estrella, no me calló mal, pero si un poco molesto que se presentara solo, le dí la mano y le dije que me llamaba Heidi y venia de la planta, le dije que solo estaría dos semanas apoyando a Heather, de inmediato me comunicó la imagen que tenían de ella en el departamento: no me el nombre de Heather, esa mujer es un ostión, vive en su caparazón y ni se le puede hablar siempre se molesta por hacer su trabajo, para mi sería mejor que se fuera y alguien agradable como tu ocupara su lugar, no hice caso a su comentario, solo le dije que me daba gusto conocerlo y estaba a sus órdenes para ayudarlo con su trabajo, tome el café caliente del horno y camine a la oficina de mi jefe, pero antes tome el periódico y se los entregue a mi jefe.

Después de que terminó de leer su periódico, me llamó para comenzar mi inducción de como hacer los reportes, yo había aprendido por mi cuenta la forma para imprimir presentaciones de ventas, habia imprimido 5, las engargole para  entregarlas y que me firmaran la bitacora de entrega, 
deje lo que estaba haciendo y camine a la oficina del Sr. Grande.

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Estuve dos horas con el Sr. Grande, aprendí muchas cosas de él, era un hombre de verdad, lo que más me gusto fue su loción, me hizo distraerme en algunas ocasiones, me platico un poco de su ex-esposa y su pequeña hija, realmente era un buen hombre, no la imagen que tenía a través de mi esposa de un hombre despiadado sin alma.

Llegó la hora de la comida y le pedí permiso para ausentarme, para ir por mis hijos, el acepto y me concedió media hora más para que no tuviera problemas, mientras me adaptaba al puesto.

Salí del edificio y maneje lo más rápido que podía, sin que me importara lo que me gritaran, mientras esperaba a mis hijos, mi hija llego hasta el auto, la deje entrar y comenzamos hablar de mi día de trabajo, mientras le explicaba lo que me había sucedido con el vendedor estrella, ella me llamó la atención de que otros de los papás que esperaban a sus hijos, su mirada se fijo en mi, en ese momento mi hija me hizo darme cuenta de que el perfume de feromonas de su madre si funcionaba, pero también que mi rostro era más bonito que el de su madre.

Mis hijos llegaron comenzó el regreso a mi trabajo, deje en la casa a mis hijos e hice responsable a mi hija de darle de comer, la noche anterior les había hecho su comida, solo era cuestión de servirla, yo me hice un emparedado para ir comiendo y aproveche el tiempo para cambiarme las pantimedias por una medias de tubo, me había dado cuenta de que la oficina era muy caliente y sudaba, así que debía refrescarme un poco usando medias de tubo, me puse un poco más del perfume especial de mi esposa y salí de regreso al trabajo, había trafico así que debía ir más lento, avance hasta encontrar calles libres y comencé a manejar rápido hasta dos calles antes del edifico corporativo, me faltaban 10 minutos para la hora y media que me había dado permiso mi nuevo jefe, pero el auto paso un bache y una llanta se poncho, debí orillarme y para mi fortuna encontré un lugar y allí deje el auto cerrado, camine las dos calles, entre al edificio, subí al elevador y llegue al piso, avance entre los cubículos y llegue a mi escritorio, el Sr. Grande llegaba de su comida y me saludo nuevamente, me pidió ir a su oficina, me puse un poco de más perfume y fui a su oficina.

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Estuve trabajando hasta las 6 pm, el tiempo se habia ido haciendo el ejercicio de reportes que el Sr. Grande me había pedido hacer, se lo lleve para que me lo calificara, me detecto algunos errores pero nada importante, me recomendó seguir haciendo ejercicios, pero era admiraba que por ser mi primer día había cumplido todas mis tareas y aprendía rápidamente, me dio permiso para irme a mi casa y nos veríamos al siguiente día.

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Sali del edificio y trate de ubicar donde deje el auto, camine dos calles, pronto obscurecería, la gente pasaba aun lado de mi, sin importarle quien era, las mujeres ni les importaba verme, era una mujer más en el ambiente corporativo de la zona, encontré mi auto, me alegre que estuviera completo, la llanta estaba totalmente ponchada debía sacar el repuesto y cambiarla, yo no era un hombre fuerte, así que debía usar toda mi fuerza para sacar la llanta y cambiarla, eso aunado a que usaba falta y zapatos altos seria una hazaña, pero debía hacerlo o no llegaría  a mi casa, aunque pensé que irme en autobús sería una opción, pero me imagine hombres enormes que me salían y trataban de atacarme y decidí sacar la llanta.

Como pude había logrado sacarla, ahora debía agacharme para sacar los tornillos, lo iba hacer cuando escuche una voz conocida era mi jefe, me arregle el cabello y lo salude, trate de explicar mi situación, pero el sin decir nada comenzó ayudarme, se arremangó su camisa y comenzó el trabajo arduo de desenroscar los tornillos.

En 10 minutos tenía de nuevo una llanta en mi auto, cuando acabo yo seguía explicando lo que tenía que hacer cuando llegara a la casa, le pedí disculpas por haber hecho trabajar, el sonrió dijo que realmente no era molesto hacerlo, le pasaba mucho a su esposa y sabia como hacerlo, me explicó que me había visto desde el semáforo y se había dado vuelta para ayudarme, me recordó que debía llegar a ver a mis hijos a tiempo, nos despedimos y me comprometí a llegar tiempo al día siguiente.

La Foto del día fue mi selfi con la llanta de fondo.


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Así fueron pasando los días llenos de vicisitudes que fui viviendo y pasando, cada día mi auto confianza iba aumentando.

Me había atrevido a ir sin pantaletas debajo de las pantimedias, me habia dado cuenta de que esa manera era más saludable y fresco además era común que las mujeres de mi edad lo hicieran sin tapujos, era raro que alguien las usara trayendo pantimedias.

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En cuanto a mi lección de vida y el reto que tenía enfrente, lo iba sobrellevando, la situación matrimonial, mis hijos se adaptaron rápido a mis cambios y me volví un poco más estricto con ciertas cosas de apoyo a la casa, tres de las vendedoras estaban en la apuesta y se hicieron mis amigas y me apoyaban de cierto modo para hacer mejor mi trabajo, otros dos compañeros, también comenzaron hablarme y tener relación Heidi.

un día por la mañana me entere del cambio el área administrativa de mi esposa, el área donde yo antes trabajaba tendría qie trasladarse a la planta, por que tuve que ir a entregar un documento atrasado, pensando en ver a mi esposa y ver como le iba con su trabajo y quizas fueramos a comer algo, descubrí que ya no estaba nadie en esa área, 

una hora después en la junta de dirección, mientras hacia la minuta, me entere por voz del Director mismo que vendrían nuevos cambios para mejorar la producción, todas la áras relacionadas con la planta se irían al nuevo edificio que terminaro de construir, solo nos quedaríamos en el edificio corporativo el área administrativa esencial.

Mi vida familiar debía cambiar y acostumbrarme a seguir llevando a mis hijos a la escuela, por que ella tendría que salir una hora antes de lo acostumbrado, así que mientras yo me preparaba para mi día, ella tendría que irse para poder llevar a tiempo a su trabajo, de igual forma llegaría más tarde a la casa., solo para cenar y acostarse.

La imagen del jefe de mi esposa, ahora mio fue cambiando mi forma de entender  y hacer las cosas, realmente el era un verdadero caballero, siempre atento a no sobrecargar de trabajo o a presionarme a entregar mi trabajo, me pedía todas las cosas por favor y gracias.

Sin darme cuenta el mes había pasado y la apuesta iba subiendo de nivel, si lográbamos pasar el siguiente mes tendría un fondo para mandar a la universidad a mis hijos, pero la relación con mi esposa se fue tornando más difícil.

Me habia dado cuenta de su cajón guardaba una libreta con candado, por respeto a su intimidad no trate de abrirla, solo se calló un papel con el nombre escrito de "Sam", pense que solo era un amigo.

Ella siempre estaba cansada y me reclamaba que seguía sin entender como se sentía ella, ni la apoyaba como ella lo necesitaba, considere por consejo de mis nuevas amigas, que era mejor darle su espacio y hacer lo que me correspondia hacer sin quejarme, de esa manera llegarmos al final del reto, Beth me alentaba a permanecer firme en lo que estaba haciendo, pero me llamaba la atención de que ella se había hecho amigo de mi compañero que me acosaba y de su camarilla de flojos compañeros, los fines de semana la invitaban a ver los partidos de fútbol en bares o restaurante para evitar que las esposas los estuvieran molestando, acepte eso por que quizás yo también lo pensé en su momento, me me aconsejaban mis compañeras dale su espacio, sabía que ellas tenían más experiencia que yo, sentía que yo era como una hermana menor de ellas y me trataban como una ingenua.

Seguí con mi vida atendiendo a mis hijos y haciendo mi nuevo trabajo lo mejor que podía.

Beth y las otras compañeras me enseñaron que la mejor terapia era comprar ropa y zapatos, les hice caso y fuí con ellas a comprar y probarme ropa.

en poco tiempo me hice de mi propio ajuar de ropa para el trabajo, para estar en casa y tomarme la foto diaria, usaba la ropa de mi esposa, aproveche a usar por segunda vez la ropa que ella no usaba y le daba un nuevo estilo que ella jamás se atrevió a usar, por considerar que se vería aniñada o ingenua, yo lo consideraba un poco sexy o estilo atractivo. recuerdo que una de las fotos para dar atención a la apuesta, me tome una foto desde abajo, mostrando un poco mis piernas y un poco más, me puse una vieja falda de mezclilla y una blusa abierta de hombros, mi esposa no le gustaba el estilo sureño a mi me quedaba a la perfección, mi hija también le gusto mi estilo y amb@s lo hicimos nuestro propio estilo, para andar en casa.

Una tarde de un domingo, antes de la quincena en que acabaría la apuesta, estaba lavando los platos, mis hijos estaban en sus habitaciones, Sentí una gran nalgada y un apretón de nalgas, era mi esposa, había llegado con aliento alcohólico, después de estar con sus amigos, me había dejada marcada su mano y moretones, comenzó a reirse de mi, le iba a reclamar su mala broma, pero ella me dio una pequeña cachetada y me dijo que no me quejara que debía aceptar mi nuevo rol en la familia.

yo jamás le había pagado o hecho sentir mal, pero ella si lo estaba haciendo conmigo, sus malos amigos la estaban aconsejando para ser un verdadero macho, misogino.

Decidí no seguir la pelea con ella, era mejor mantener la tranquilidad por el bien de mis hijos.

El siguiente día, Carol llegó con un memorándum avisándome que debía presentarme a trabajar en la asistencia del área de mantenimiento, por ser asistente B y debido a las políticas de la empresa debíamos dar apoyo los servicios del edificio, por tener nivel B debía rolar para cubrir puestos administrativos, el Sr. Grande había tomado unos días para arreglar asuntos personales, así que no pudo hacer nada para cubrir esa vacante, serían 15 días y serían los últimos días del resto, serían los más dificiles, ante la actitud de mi esposa y el ambiente laboral de acoso y violencia verbal. 

Aprendí que lo mejor era ir al trabajo en pantalón para evitar miradas furtivas o comentarios acosadores, el jefe del área dejaba que sucedieran esas cosas, sin alarmarse por los desagradables piropos hacia mi persona, minimizando mis reclamos, 

El fin de semana me enteré de que uno de mis hijos había reprobado una materia y el otro no quería ir a su equipo de béisbol, debí hablar con ellos para saber que pasaba, mi hija tuvo un conflicto con su novio por saber que se iba a preparatoria.

Así que debí hacerme cargo de la situación sin ayuda o apoyo de mi esposa, hice mis labores y me fui a dormir cerrando con llave mi recamara.

Durante la siguiente semana descubrí una base de fotos de pantaletas tomadas desde el suelo a las mujeres de todo el edificio, principalmente en el elevador y la entrada a los baños, donde esperaban las mujeres un cubículo para hacer sus necesidades, eso era algo obsceno y grosero, busque por fecha hasta descubrir que yo también había sido victima de su acoso, tenía más de 100 fotos que me tomaron, lo tenían clasificadas por niveles, yo tenia el nivel "5x, las más ingenuas y estúpidas, pero bue-notas" "con el pie de camello más gordo o  peludo".

Me alegraba de algún modo saber que ellos jamás descubrieron que no era mujer, había hecho un buen trabajo para tener labios vaginales lo más reales posible y los había logrado a la perfeccionó al desarrollar una técnica oriental que aprendí en la secundaría, deje sin depilar y de esa manera era más tan agradable como cualquier vagina. 

El ver las fotos me daba la lección de que no debía ser tan ingenuo. Por suerte el jefe del área no vio que estaba indagando en su secreta base de fotos.

El día jueves después de pensarlo, decidí borrar esa base de fotos, lo hice sin remordimiento, pensando en las compañeras.

** Ese día llegue a la casa, mis hijos hacían sus tareas y mi hija hablaba por su celular,  sonó el teléfono de la cocina, fui a contestar pensando que quizás era alguna de mis amigas que quería saber que había pasado con las fotos.

Del otro lado del teléfono escuche la voz roca de mi esposa, parecía que estaba en un lugar con mucha gente como un bar, tenía tres días sin venir a la casa,  me informó sin mucha delicadeza que no llegaría a la casa por cuarto día ya que tenía que irse de viaje con el equipo de emergencias de la planta, para atender a un cliente importante, no le creí mucho pera acepte su decisión, le informe que debía aportar dinero para que pudieran entregarle el certificado escolar a su hija mayor, ella no le dio importancia a eso y dijo que me depositaria en cuanto pudiera, y agrego que ya me estaba pareciendo a las viejas histéricas de mi oficina, que dejara de ser una mujercita llorana y quejumbrosa.

Al siguiente día fui con temor a trabajar, pero durante el día el jefe de área ni siquiera me dirigió la palabra, yo me mantuve haciendo mis labores administrativas asignadas, faltaba unos minutos para salir, tome mis cosas y con un poco de alegría por irme introduje mi tarjeta de asistencia, en ese momento sentí un tiron de la cola de cabello que estaba usando  u luego sentí dolor en mi nuca por que una fuerte mano me sometió, sin poder zafarme me llevaron arrastrando hasta el baño, no podía ver quien era quien me estaba atacando, antes de entrar al baño paso algo que no esperaba, ni sabia que estaba pasando. sentí un empujón hacia la parede y caí al piso, en ese momento vi que dos hombres estaban forcejeando, uno de ellos era más alto que el otro, el algo propino tres golpes y derribo al otro hombre, alcance a ver que el hombre caído era el jefe del area, el hombre alto se aceco a mi, yo trate de alejarme, el sin tocarme me dijo que todo estaba bien, que no me asustara, el me había ayudado para evitar que me violaran, era Will uno de los trabajadores más jóvenes del área.

Me pregunto si estaba bien, me dolía mi rodilla y un poco la cara, pero estaba bien, me ayudo a levantar, me llevó hasta mi auto y sin pensarlo mucho salí del edificio, cuando llegue frente a mi casa me di cuenta de que estaba temblando y sentía mucho frío, descubrí que había olvidado mi bolso. 

Estuve en auto hasta que vi que la luz de las habitaciones de mis hijos se encendieron, salí del auto y entre a la casa.

En mi habitación comencé a llorar por la emoción contenida, revise mis magulladuras y moretones, no eran nada serios, me dolía la nuca y me tome una pastillas para el dolor mestrual de mi esposa.

Me senté la taza del baño para relajarme, el teléfono fijo, sonó lo levante y escuche quien era, tenía miedo de que fuera el jefe del área de mantenimiento que me amenazaría, pero escuche la voz de Beth:
Amiga lo se todo, como estas?, no te preocupes, todo esta bien, me informaron las personas de vigilancia, Will te salvo de ese tipo, vamos a levantar cargos, lo tenemos gravado todo, no te va hacer nada, en este momento ya esta en la cárcel.

Pero no te aflijas!! es más debes estar contenta y alegre!--le pregunte por que debía estar alegre?, me contesto: porque hoy se cumplieron los dos meses y dos días de la apuesta, haz pasado el reto amiga, ganaste todo el dinero!!

Le pregunte por que decía que gane todo el dinero, la mitad del dinero también era de mi esposa, ella continuo hablando para darme la noticia de mi esposa que ya intuía: amiga no quería decírtelo para no lastimarte, pero ella desde hace 5 días, perdió el reto, subió una foto con su nueva novia para burlarse de todos nosotros, su novia es Samatha una de las jefas de cuadrilla, la más fornida de todas las mujeres de la planta--le dije que lo había sabido desde el primer día del reto, para levantarme nuevamente el ánimo continuo diciendo: pero eso no es todo para que te alegres, el Sr. Grande te quiere en su equipo gerencial, siempre supe que podrías con el trabajo y superarías las expectativas--le conteste con un gracias y le dije que iba hacer mi mejor trabajo como su asistente como lo había sido estos dos meses, Beth me explico que no era como asistente sino como Gerente de ventas, el ahora era el Director y me quería en su puesto, Beth se había encargado de presentar mi curricular actualizado con mis cursos certificados, cumplía con los requisitos necesarios para cubrir la vacante, además podría hacer el trabajo conforme el lo quería.

Beth me hizo ver que necesitaría una ropa más gerencial y zapatos de marca.