le rogue nuevamente reconsiderara dejarme trabajar, le prometí que haría un buen trabajo y no se arrpentiría de dejarme trabajar su asistente secretarial, le ofreci mi mano en forma de acuerdo.
el celular de mi jefe comenzó a sonar y me pidio salir de su oficina, paso una hora y llego la hora de la salida y ya no pude hablar con él para decirle que aceptaba el puesto.
al siguiente día habia pensado seriamente la propuesta de mi jefe, el único camino para mantener mi fuente de ingresos era hacer lo que me pedia mi jefe, en la noche leí los requisitos del manual administrativo, para ser eficiente en ese puesto, realmente no era dificil desarrollar las tareas que pedian, eran las mismas que yo hacia, solo que ahora debiria dar cuentas directas al gerente del área, y debia cumplir con las reglas de vestir y comportamiento frente a los jefes, clientes y compañeros, como estaria en una posición estrategica para atender y serivir a todos ellos, debia comportarme y tener una voz calmada y agradable, modales tranquilos y relgados, manteniendo una postura correcta al estar sentado frente a la computadora y frente a todos los compañeros, en el escritorio al frente de la oficina del gerente del área, debería servir y cuidar a mi jefe en sus necesidades, llevarle café y su correspondencia, tomar dictado y apuntes en su agenda, manteniendo el orden y la organización.
en cuanto los detalles del vestir, siempre debie mantener pulcra mi imagen, no se permitia faldas por encima de las rodillas de más de 2 cm, debia usar ropa formal y ejecutiva, evitando el uso excesvo de maquillaje y perfume, no se permitia las piernas desnudas, siempre debia usar medias y mis piernas siempre debian estar bien depildas y tersas, para no dar una mala imagen a mi jefe.
simpre debia llamar a mi superior como señor y licenciado. debia modular mi voz para evitar molestarlo, siempre debia tocar antes de entrar y pedir permiso antes de entrar.
Evalue la situación que no tenia nada para ir a trabajar como pedia el manual, así que tome la decisión de ir al pequeño emporio de Thelma, era una pequeña tienda en la esquina de mi casa, cuando iba al trabajo simpre veia a una agradable chica siempre abría la tienda, así que ella rea mi salvación para mantener mi empleo.
Baje a la calle y camine hasta detenerme frente al aparador de la pequeña tienda, me paralice frente al aparador, vi exactamente lo que necesitaba para ir al trabajo, pero no podia mover mi piernas, la amable chica, llego hasta mi para salvarme y me invito a pasar con mucha amabilidad, su voz era roca peo agradable, me explico el lema que aprecia en la puerta con letras rosas: Vestimos al hombre moderno, con absoluta seriedad y discreción, expertos en sacar la belleza interior del hombre moderno.
Me explico que realmente eran una tienda de servicios para atender todas la necesidades del hombre para enfrentar los cambios que requeria el mundo actual. desde medias, hasta cursos de maquillaje y buen vestir.
Me dio tanta confianza que le dije que eso era lo que requeria, le pedi información al respecto, la agradable joven de voz ronca, me explico con detenimiento los alcances de los cursos y lo que incluia el costo de los cursos, me ofrecio un curso especial que por el largo puente de asueto de 3 dias, se estaba concentrado el contenido de 3 cursos sobre cuidados personales, manejo de la voz, desarrollo de modales correctos para comportarse correctamente ante los demas, como mantener una conversación activa, como coordinar la ropa para los diferentes ambientes laboreles y de casa; como desarrollar la habilidad de multitareas necesaria para el nuevo papel del hombre.
me parecia perfecto el curso, le pregunte el precio, era lo justo lo que tenia en el banco, le di mi tarjeta y le dije que me incribiera, la agradable chica hizo una expresion extraña pero muy simpatica, tomo mi tarjeta y mi inscribio para el curso que comenzaria en una hora, pero no era en esa tienda debiaria ir hasta el centro comercial a la casa matriz, debia correr hasta allí para alcanzar.
La agradable chica, me di indicaciones de como llegar, pero antes de irme, me di mi primera lección, me ofrecio mis primeros zapatos de tacón alto.
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