Las Deudas del Sr. Keys.

A penas cumplia los 30 y estaba sumido en deudas, mi ex me absorbía la mitad de mi sueldo, a la empresa debía 3 prestamos y a mi jefe le debía dos préstamos, por desgracia perdí la quínela entre los compañeros, eso aumento más mis deudas, no sabia que hacer, no podía pagar la renta y en un mes me desalojarían, sin embargo en los proyectos de trabajo estaban saliendo bien y quizás podría tener un aumento y una promoción.

Un día viernes después del trabajo estábamos festejando el fin de un proyecto con buenas ganancias, me quede solo en la mesa con mi jefe, era el momento de solicitarle el aumento y la promoción, el me vio con cara de sorpresa, traía alcohol en la sangre y parecia divertido por la propuesta que le hacia, el me miró, me puso su mano en el hombro, es broma verdad tu no sabes que la nueva política es darle oportunidad a las empleadas que se lo merezcan, tu sales de ese contexto, no crees?—yo no sabía que decir, el sabia bien mi situación, continuo diciendo: Denis, yo te conozco y se que te haz esforzado mucho por hacer tu trabajo, tu podrías ser un buen candidato si solo pudieras usar falda—se rio de mi, pero continuo diciendo: eso que te dijo es verdad, vamos hacer algo, tu me debes mucho dinero, además no creo que la empresa de deje ir, si tu intentras buscar otro trabajo, estas atrapado, tienes que hacer algo como desaparecer o ser una persona diferente, te he estado viendo desde que llegastes, me caes bien, se que eres buen trabajador, solo que no sabes cuidar tu dinero, te propongo algo para que tu deuda conmigo se salde, mira este fin de semana mi hermano y su espoa me invitaron a una presentación de un libro, pero mi pareja me abandonó, mi hermano no lo sabe, así que necesito ir con alguien que tenga el cabello rubio y sea como de tu estatura, tanga los ojos azules y sea delgada como tú, estarías dispuesto a ir conmigo?, solo vas a estar a mi lado y no vas hablar, yo te presentaría como mi novia Beth, te he visto subir las escaleras, tu tienes un trasero  igual al de ella, caminas igual y hablas igual, solo tendrías que hacerte pasar por ella por un fin de semana, creo que te verias bien en falda—le dio un sorbo a su bebida y continuó diciendo: te apuesto todo lo que me debes a que puedes hacerlo, que dices?

Mi jefe estaba borracho y estaba desvariando, pero sonaba atractiva su oferta, entonces tome una servilleta escribí su propuesta y se la puse para que firmara, sin leerla la firmó, cuando paso eso se quedo dormido, le tomé la servilleta e intenté levantarme para irme, pero el se despertó diciendo que se quería ir a su casa, el barman viendo su estado le quitó las llaves de su auto y llamó un taxi, yo me tendría que hacer cargo de él para llevarlo  a su casa, el taxista entró por mi jefe y me ayudo a llevarlo, entramos al taxi, yo tomé su billetera para ver dónde vivía, le dije al taxista su dirección, el me dijo que no estaba muy lejos y le pagara por adelantado, tome un par de billetes y le pague, me quede viendo la foto de su exnovia, realmente era como el la describió, su cabello no estaba cuidado y realmente no usaba mucho maquillaje, tampoco tenia mucho pecho, solo un gran trasero.

Llegamos en 20 minutos a su departamento, le dije al taxista que me esperara a que lo llevara a su departamento y bajaba para que me llevara a mi pequeño departamento a una hora de allí, le deje un para más de billetes para que se esperara, lleve a rastras a mi jefe, el me llevaba de estatura como 30 cm,  como pude lo lleve hasta el cuarto piso en el departamento 41 metí la llave que saque de su pantalón  y lo metí cargando, intenté dejarlo en el sofá, pero me ganó su peso y cayo sobre mi en el sofá, se despertó por un momento y pensó que yo era su novia Beth y me dio un beso, yo lo empuje para que se bajara sobre mi, cayo al piso y me levanté, salí del departamento y baje por el elevador, y corrí con rapidez fuera del edificio, pero el taxista ya no estaba, la calle estaba vacía, la puerta de cristal del edificio también estaba cerrada, solo quedaba caminar hasta mi departamento, pero se me ocurrió que quizás podría entrar al departamento de mi jefe por la escalera de emergencia, me fui por atrás del edificio, brincando sobre un cajón de basura alcance la escalera corrediza, fui subiendo los 4 pisos hasta llegar al departamento de mi jefe, para mi fortuna una ventana estaba abierta, entré por ella a su habitación, me asome por la puerta y ví que mi jefe aun estaba en el suelo roncando, no podía hacer nada hasta el otro día, sin prender la luz ví que la cama estaba cómoda y decidí dormirme, pensé que al otro día todo estaría olvidado y me excusaría explicando las situación del taxi.

A la siguiente mañana sentí como el sol me deslumbraba, era mi jefe quien abría la ventana para avisarme que debía despertarme para irnos, yo aun no comprendía lo que pasaba,  me desperecé para descubrir que no tenia ropa, mi jefe estaba parado en la puerta con una gran sonrisa, espero un momento más para que estuviera despierto y dijo: veo que aceptastes mi apuesta, aquí tengo la servilleta que tu me hiciste firmar supongo para chantajearme, pero veo que el hecho de que te quedaras a dormir en la recamara de Beth eso indica que deseas cumplir tu contrato, te ayude un poco por si deseas cambiar de opinión, la única manera de salir de aquí es aceptando mi apuesta, voy a salir en dos horas regreso, para irnos a una comida con mi hermano, así que espero que Beth este lista para irnos, si no esta lista, me daría un disgusto tener que llevarte a la cárcel para pagar tu deuda conmigo—iba a cerrar y agrego antes de hacerlo: ha…todas las ventas y las puertas están cerradas, por si acaso.

Escuche como cerraba la puerta principal estaba solo en ese departamento, yo estaba sin ropa en la cama debía tomar una decisión, hacer que Beth regresara o intentar escapar, respire ondo y tome la primera decisión era el camino para salir sin lastimarme,  además no perdía nada con intentarlo, en la secundaría ya habia estado en la misma posición con mi amigo Willy Dickerson, le ayude a quitar su miedo a las chicas, pero yo salí lastimado y me involucre en problemas con las chicas del equipó de porristas para pasar sus exámenes, no queria volver a pasar por eso, pero la vida me regresaba al mismo lugar que decidí no volver, me levanté para obsevar mi cuerpo en el gran espejo de la puerta, aun tenía mis pequeños pechos de niña de 17 años, mi cintura estaba regordeta al igual que mis nalgas y cadera, mis piernas estaban gordas, al igual que mis pantorrillas, debía hacer algo con mi pene, pero antes abrí el closet, estaba repleto de ropa de Beth, zapatos, vestidos, ropa de trabajo, accesorios, en un cajón sobre salía unas pantaletas rosas, debía hacer mi magia como la hice cuando mi amigo Willy me pidió ayuda, sabía bien que existía una chica dentro de mí y debía sacarla, decidí tomar un baño para comenzar mi ritual para que esa chica pudiera aparecer, pero no tenia mucho tiempo así que solo tomé un baño y después con calma subí mis testículos a mi hueso sacro uno por uno, sin dificultad y dolor lo logre, después con un poco de pegamento  cubrí mi pequeño pene con el escroto para formar dos lindos labios vaginales, al ver mi trabajo final era perfecto, la chica iba saliendo, mi bello púbico dorado cubría prefectamente mi nuevo sexo en forma muy natural, quizás debía depilar un poco pero no en ese momento, así estaba bien, para levantar mis pequeños pechos regrese a la recamara, para buscar la ropa interior que me quedara, realmente toda me quedaba,decidí usar la pantaletas que sobre salían y el bra que hacia juego en color rosa con bordados en flores, el pequeño moño lucia lindo sobre mi liso vientre, mi monte de venus también sobresalia de mis pantaletas, mis pechos necesitaban un poco de relleno, encontré los rellenos de latex que toda mujer sin pecho tiene, me los puse y crecieron más de lo que pensaba, debí ajustar los tirantes, faltaba poco tiempo, debía escoger la ropa que usaría para la comida, un vestido azul marino me gusto, pero debía usar la faja de Beth, me la puse y el vestido se ajusto perfecto a mi nuevo cuerpo, quizás un poco más apretado que Beth pero estaba bien, como era comida estaba bien ir sin medias, mis piernas depiladas lucían bien y naturales, escogí uns zapatos de cordón al tobillo, me dí cuenta que todo los zapatos eran altos, no tenia bajos, el más bajo era de 5 cm, pero esos zapatos hacían que mis pantorrillas se vieran delgas y crecia en tamaño unos centímetros, debía arreglar mi cabello y maquillarme, aunque el corte de mi cabello en forma de pegaboy daba una aspecto femenino a mi cara debía peinarlo más femino para acompletar mi imagen, quizás eso haya sido la causa de que mi jefe se diera cuenta de que habia una chica dentro de mi, peine mi cabello con raya de lado y metí hacia dentro mi cabello, me puse unas pequeñas arracadas doradas y un collar dorado, seguí con el maquillaje, aunque no tenía muchos productos de buena calidad y suficientes, trate de usarlos lo mejor posible para maquillarme como mi prima Bárbara que estudiaba arreglo personal me enseño automaquillarme, aunque realmente aprendí solo practicando muchas veces, hasta hacerlo perfecto sin ayuda, esa fue la causa de que la jefa de porristas se fijara en mi para ayudarla con su maquillaje, además de con sus exámenes, desde aquel entonces aprendí lo que era ser manipulado.

Ví el pequeño reloj dorado de Beth que encontré entre sus cosas,decía que faltaban 10 minutos para que llegara mi jefe, el sr. Keys.

Decidí buscar el bolso que combinara, en la parte superior del closet encontré un bolso de piel con aditamentos dorados, ese sería mi bolso para ese día, tenia algunas cosas y una cartera vieja con la licencia de manejo ya vencida de Beth,  ví la foto, realmente me parecia a ella, solo en el cabello un poco más largo me diferenciaba, pero fácilmente podía pasar por ella.

Me daba la última revisada a mis pantaletas de que no quedaran comidas por mis nalgas, cuando llegó el sr. Keys.

Salí de la habitación para que me viera, traía unas bolsas de compras, realmente se sorprendió de verme, era la misma expresión que tenia Willy cuando el me vió, ahora el sr. KEYS de igual forma lo hacia, me sentía bien por la forma en que me veía y quizás una sonrisa se me salió, el también tenia una gran sonrisa, se acercó a verme más de cerca, me tomo de la mano para darme una vuelta, eso indicaba que estaba siendo aprobado por mi jefe.

Me entregó las bolsas, eran un perfume y juego de collar y aretes, medias y unas cajas que no sabia que contenían, pero el sr. KEYS Me pidió que me pusiera mis regalos, me quito el collar y me puso el que me regaló también los aretes me los puse y después le pregunte si queria que me pusiera las medias, el sin afán de molestarme acepto que fuera sin medias, pero también dijo que para la cena de mañana tendría que usarlas.

Aunque realmente no recuerdo si el sr. Keys me pidió ponérmelas enfrente de él para ver mis pantaletas rosas transparentes.

Me preguntó si estaba lista y yo acepte irnos, me dejó salir primero y bajamos hasta el estacinamiento donde estaba su auto, pero antes de irnos quiso que le diera un beso, no pude resistirme a su orden, todo se daba para que lo hiciera.