Mí historia comenzó cuando Miss Stone me presionó para tomar la decisión de irme de la
empresa, todas mis órdenes como subgerente me las revocaba ante las empleadas,
perdí toda credibilidad y respeto ante las empleadas, un día viernes le
presente mí renuncia, fui hasta su oficina y le puse la renuncia en su
escritorio donde especificaba el porque me iba, ella con una sonrisa sarcástica
me dijo que me esperaba de regreso en una semana, que tomara mis vacaciones y
que regresara el viernes próximo, yo me negué rotundamente a regresar y le dije
que era una jefa insensible sobre como administrar al área, ella con calma me
dijo que me esperaba nuevamente en su oficina en una semana.
Deje la oficina confiado en que encontraría un nuevo
trabajo, el lunes comencé a buscar en el periódico, el día miércoles me había
dado cuenta de que no tendría éxito para encontrar un trabajo, no en corto
plazo, también para el día jueves, me dí cuenta de estaba muy alejado de mis
hijos y de que ya no tendría dinero para seguir pagando a la señora que me
ayudaba con el aseo, la comida y llevar a los niños a la escuela, desde que mí
esposa se había ido a trabajar fuera del país la señora nos había ayudado,
cuando que le dije que yo me haría cargo, entonces pidió un aumento de sueldo
por que entonces no tendría ayuda para hacer todo el trabajo de la casa y los
niños, yo con gusto le pague lo que me pedía, ahora me daba cuenta de que no
era tan fácil llevar la casa, la señora nuevamente me pidió aumento por que
ahora tendría que aumentar sus tareas por tenerme en la casa, yo realmente me
sentí molesto con la actitud de la señora y le pedí que se fuera el día lunes,
para el día jueves estaba totalmente estresado con llevar la casa y buscar
trabajo, no tenía otra opción que regresar con mí jefa como “perro con la cola
entre las patas”.
El día viernes después de hacer de desayunar e ir a dejar a
mí hijos a su escuela, llegue al trabajo relativamente tranquilo por el tener
que viajar en el transporte público ya que mí auto no quiso arrancar esa
mañana.
Tuve que pasar por pasillos de cubículos hasta la oficina de
mí jefa, todas las compeñeras hablaban a voz baja pero las escuchaba decir que
como me atrevía aregresar si las había tratado tan mal a todas ellas y si era tan desconsiderado con
ellas, toque con pena la puerta, mí jefa me hizo esperar un rato mientras las
compañeras me comían con sus comentarios feministas hacia mí.
Escuche el permiso para entrar, abri lentamente la puerta y
ví a mí jefa que vestía un traje sastre en negro, lucia la misma sonrisa
irónica que cuando me fui, me pidió sentarme y espero a que yo hablara para pedir
disculpas, traque saliva y con dificultad le dije que ella tenía razón de iba a volver y que me
disculpara por llamarla insensible, baje un poco la cabeza para aceptar la
situación, Miss Stone hablo entonces para decirme algo que no esperaba: usted es
un buen elemento para esta área, por eso lo elegí como mí subgerente, por eso
acepte que se fuera para que pensara las cosas, usted tiene experiencia de como
manejar el área y todo el papeleo administrativo, también lo que me dijo que
era insensible con las compañeras usted también lo tiene, así que ambos debemos
trabajar en eso, usted más que yo, lo único que le voy a pedir si realmente
desea nuevamente trabajar en su puesto, que use el mismo código de vestimenta
que usan las compañeras, que por cierto usted tanta atención puso en sus
reportes, también usted se hará cargo de dirigir a las compañeras de atención
al cliente, deberá demostrar como atender
y hablar correctamente con los clientes, también se encargara de ayudar
al personal de recepción en caso de que alguna de ella no llegue, además va
llevar mí agenda y mis juntas pendientes, ira a las juntas directivas conmigo
para tomar minutas, además yo voy a supervisar minusiosamente el como vista, yo
notó algo malo en usted le voy a descontar un día de salario, le parece? No eso
era lo que usted proponía para las compañeras? Creo que no tiene ningún
inconveniente en los términos que estamos acordando verdad?—no tenía salida, mí
jefa me estaba aplicando mí propia medicina, era una lección que me imponía para
ser más considerado con los demás, acepte con un leve “sí” , pero no le pareció
bien y me hizo decirlo más alto, además de firmar el acuerdo que me obligo
hacer, me tenía totalmente atrapado, debía demostrar que podía ser el mejor
subgerente, siendo una subgerente con las mejores cualidades para serlo, era un
reto entre ella y yo, cualquier queja perdería un día de salario, cualquier
falla en la forma de vestir, hablar o mí maquillaje perdería dos días de
salario, pero no tenía salida, ese día frente a todas las compañeras les
explico lo que me había comprometido hacer hasta que Miss Stone decidiera otra
cosa, todas me llamarían Subgerente Miss Swan, todas se alegraron en que iba
ayudar en sus áreas y estaría al pendiente de ellas siendo parte del equipo,
Miss Stone a cambio les pidió que ninguna de ellas se burlaría de mí o me haría
sentir mal o me lastimaría de alguna forma y en caso de que Miss Stone no
pudiera estar entonces yo me haría cargo del área, ellas aceptaron también el
reto.
A Miss Stone le pedí dos días para prepararme para el reto, pero
ella solo me dio uno, el día miércoles Miss Swan debía regresar a trabajar,
antes de irme me dio una copia del reglamento de trabajo de empleadas
femeninas, me pidió leerlo frente a ella para que no hubiera duda de como debía
venir vestido el día miércoles, no podía usar flats o zapato bajo, debía usar
zapato ejecutivo en colores obscuros y cerrados, no menor a 5 cm o mayor de 10
cm, debía usar medias y las faldas o vestidos no podías pasar 3 cm arriba de la
rodilla o 3 debajo de la rodilla, solo se podía usar pantalón los días viernes
que era de ropa informal, pero no debían ser de mezclilla, ni tipo pescador,
debía ser pantalones para oficina, el cabello debía estar recogido y no usar
joyas ostentosas, las uñas debían solo estar esmaltadas y colores suaves, se
debía cuidar de no traer blusas transparentes y que dejaran ver la ropa
interior, el maquillaje no debía ser exagerado, pero no se podía llegar al
trabajo sin maquillaje, el perfume que usara debía ser agradable y suave, sobre
todo se estaba en mis días, aunque miss Stone se rio de esa parte.
Me dejó a ir para recoger a mis hijos, debía cambiarlos de
horario para que comieran en la escuela y poder sacarlos dos horas más tarde,
realmente estaba muy extrañado por todo lo que tenía que hacer, no sabía por
donde comenzar, llegue a la escuela de mis hijos pase a la dirección para
cambiarlos de horario y pagar por adelantado el servicio de comedor, le
explique a la directora mí situación de trabajo y que no podría llegar tiempo para recogerlos, ella me calmo
diciendo que podrían cuidarlos después de la hora de salida pero eso me
costaría una cantidad más por cada minuto
que llegara tarde.
Me sentía mal por todo lo que estaba pasando y les dije a
los niños si querían ir a comer una hamburguesas ya que no teníamos comida en
la casa, mientras comía mí hamburguesa y
los niños jugaban, observaba a las mujeres que estaban en el restaurante,
realmente no eran unas bellezas, alqunas de ellas realmente eran feas y vestían
también feo, estaba haciendo eso, cuando mí hija se acerco y me pregunto si podía decirle que me estaba
pasando?, no pude mentirle y le explique con detalle lo que me había pasado en
el trabajo y como tenía que ir vestido para el día miércoles, ella sin
preocupación me dijo que no me preocupara por que toda la ropa de su madre aun
estaba en su closet y podía usarla, eso era verdad, pero eso no me preocupaba,
sino perder dinero si no hacia bien las cosas, mí hijo regreso de jugar y mí
hija le explicó lo que me estaba pasando, sin problema me dijo que miedo me
dijo que había visto una casa de ropa especial para hombres que usan las
mujeres antes de entrar al restaurante, le pregunte por que sabia eso, el me
explico que en la marquesina decía eso, pero en el aparador había maniquís con
ropa de mujer.
Me causo gracia como lo dijo, nos reímos acabamos nuestras hamburguesas y
le pregunte si ya nos íbamos, el niño dijo que aun no podíamos irnos sino hasta
que fuéramos a esa tienda, el niño me tomó de la mano y me jalo hasta la
tienda, mí hija también me empujaba, llegamos hasta el establecimiento pero
parecía que iban a cerrar, una joven y una mujer mayor estaban bajando la cortina de metal, la
mujer mayor vió como mis hijos me llevaban, mí hijo que iba al frente le dijo a
la mujer mayor que necesitaba ayuda, mí hija salió detrás de mí y también le
dijo que necesitaba ayuda para comprar ropa como la de su mamá pero de trabajo,
la joven dijo que vineramos al siguiente día ya estaban cerrando, pero la mujer
mayor acepto ayudarme pero al día siguiente ya que tenía un compromiso con una
cliente, me dio una tarjeta y se despidió de nosotros, los niños estaban
contentos de que ella me podría ayudar para que pudiera seguir trabajando.
Ví la tarjeta decía “el emporio de Thelma”.
Al día siguiente después de llevar a los niños a su escuela
tenía mis dudas sobre la ayuda ofrecida, así que tarde para decidirme a
regresar al centro comercial, mientras caminaba hacia allá reflexionaba mis
opciones y tenía otra camino que hacer lo que me pedía mí jefa, era por el bien
de la familia, pase el restaurante y camine hasta la puerta del local, la joven
y linda empleada me recibió y me informó que la Sra. Thelma no se encontraba
pero que pronto vendría, me pidió caminar entre la ropa para si me gustaba
algo, todo parecía como cualquier ropa de mujer, la única diferencia eran las
tallas grandes, con timidez trate de ver las tallas que me pudieran quedar,
observe que mí talla era talla chica, yo era un hombre de estatura baja y
llenito, con el cabello arena, en las últimas dos semanas mí cabello había
crecido y podía hacerme fácilmente una pequeña cola de caballo, desde pequeño
fui lampiño, la única habilidad que tenía para sobre pasar el reto era mí voz
que podía imitar a la de mí hermana o mis amigas, también quizás mí trasero
gordo fura parecido al de una chica, eso me había percatado cuando mí amigo
jhon me pidió ayudarlo aprende a bailar.
La señora thelma llegó y la joven bonita empleada me sañalo
con el dedo la sra Thelma se acerco a mí y me invitó a desayunar algo mientras
le contaba mí historia, acepte la invitación y fuimos a un pequeño restaurante
de comida italiana en el segundo piso, la señora era muy amable y ofreció pagar
el desayuno, mientras comia le explique a detalle lo que me estaba pasando, lo
que había pasado después de que mí esposa se fue a trabajar lejos con otra
amiga del trabajo, el problema con la señora que me ayudaba y la situación
laboral que eso era realmente lo que me preocupaba, Thelma me escuchaba con
atención, cuando termine de hablar lo que tenía que decirle, Thelma con calidez
me dijo que no tenía que preocuparme de nada, que al día siguiente podría ir a
trabajar sin problemas, que por lo que había visto ayer tenía lo necesario para
lograrlo, no era necesario de ropa especial, solo que fuera yo mismo, que mí
alma tenía algo especial y tenía que sacarlo, me dijo que también mí jefa había
observado y por eso me había puesto todas esas pruebas.
Acabamos de comer y seguí a Thelma fuera del restaurante que
también era de ella, fuimos a su tienda pasamos a la trastienda donde había
varios probadores y tres espejos juntos para ver como quedaban las prendas, un
pequeño tocador con un espejo.
Me pidió quitarme mí ropa, mientras ella me traía un nuevo
producto, yo le había aclarado que mí presupuesto no era muy elevado, ella con
una sonrisa me entregó dos cajas y cerró
la puerta para probarme los productos que me trajo, las abrí y me dí cuenta de
que era una pantivagina muy realista y unos pechos de material plástico de
bordes transparentes, leí las instrucciones, la pantivagina era muy cómoda por
que podía esconder mí pene y hacer todas
mis necesidades sin quitármela, podía fingir una regla con un compartimento
especial lleno de sangre fingida, pero con el mismo olor de sangre, además
tenía una fantástica abertura vaginal de 17 cm, a los pechos debía ponerles
pegamento que según en instructivo durarían 15 días sin despegarse, decidí
ponerle un poco más de pegamento de lo que sugería el instructivo, espere el
tiempo necesario y los coloque espere hasta que estuvieron en su lugar,
entonces me percate del pequeño artilugio que tenía, si las chichis se
apretaban con la fuerza suficiente podían crecer, pero eso no era todo, en mis
pechos naturales se reflejaban la forma en que eran tocados un pequeño roce
podía sentirlo en mis pechos naturales, era fantástica, Thelma regreso y me
pidió ponerme nuevamente mí ropa, lo hice para darme cuenta de que el botón de
mí camisa se estiraba al máximo y mí pantalón podía subirlo sin lastimarme con
el tiro, no sabía por que me pedía eso, quizás para ver la ropa que compraría
con ella, pero no era así, me tomó de la mano y me llevó me llevó a otra tienda de ropa normal para
mujeres, me llevó a la sección de ropa ejecutiva sin pena me puso en mís brazos
tres suits de tres piezas (falda, chaleco y saco), un suit de 4 piezas (falda,
pantlón chaleco y saco), 4 blusas de diferentes colores que hacían juego con lo
suits, además me puso 5 faldas y 3
vestidos, pero eso no bastaba, me puso un bodysuit y varios juegos de ropa
interior, me llevó a los probadores que había muchas mujeres probando ropa,
tuvimos que esperar a que se desocupar uno, mientras veia a las mujeres para
comparar sus pechos y sus piernas con los míos, ellas al ver mis pechos no dudaban
que era una mujer más de la que compraban, la Sra. Thelma estaba contenta con
ver mí cara de espanto, pase a uno de los probadores, me puse el bodysit y un
juego de ropa para ver que me quedaba perfecto al igual que toda la ropa, eran
de mí talla, era lo que yo necesitaba,
salí para decirle que si me quedaban, me había puesto de nuevo mí ropa que
traía, fuimos a pagar y para mí sorpresa no excedía mí presupuesto, Cuando
salimos Thelma me dijo que ahora debía arreglar mí cabello en su salón de belleza,
allí estuve 3 horas donde Thelma hizo que me diera cuenta de que realmente Miss
Swan estaba dentro de mí y ahora había salido, mí cabello lucia un lindo corte
de pegaboy, mí cara estaba bien maquillada, con lindos labios, pestañas largas
y delineadas, mis uñas estaban como las necesitaba para trabajar, ví el reloj
era tarde para recoger a mí hijos, Thelma había logrado darme mucha confianza y
deseo de continuar trabajando en mí, faltaban comprar zapatos, pero mí pareja
tenía zapato que me podría servir para el día siguiente mientras compraba los
míos, con la misma ropa de la mañana fui por mis hijos, cuando me vieron se
abalanzaron hacia mí agradeciendo que su mamá hubiera ido por ellos, la maestra
que me los entregó ni siguiera dudo que yo fuera su madre, los niños estaban
contentos, pasamos a comprar alimentos para preparar la cena.
Al día siguiente.
Llegue sobre el tiempo pase mí huella sobre el aparato de
registro, se puso verde y avance, nadie se dio cuenta, era una más de las
empleadas, pero antes de entrar a mí oficina debía ir al baño era necesario que
entrara, mí pantivagina era nueva y traía lleno mí compartimento de sangre,
sentí un ligera vibración y luego humedad,
lo bueno fue que Thelma me había advertido de eso, en el bolso traía una
toalla que mí pareja había guardado en el viejo bolso que traía, solo era
cuestión de cambiarme, lo hice obteniendo experiencia para hacerlo en un
pequeño baño, con bolso medias y zapatos
altos, salí sin solo con una pequeña mancha en mis pantaletas blancas, nada de
consideración Thelma me dijo que la sangre era lavable.
Salí para lavarme las manos, revise mí ropa estuviera
intacta, arregle mis labios como todas las mujeres que estaban en el baño lo
hacía, me dí cuenta de que varias de ellas trataban de impresionar con sus
grandes pechos o sus traseros enormes, yo solo revise el botón de la blusa y
salí para comenzar mí trabajo, camine lentamente sin llamar la atención, todas
estaban en lo suyo, solo Bárbara se fijó en mí cuando entre a mí oficina, me
senté encendí mí computadora guarde el bolso en mí cajón para comenzar mí dia
de trabajo, sonó el teléfono era Miss Stone que me ordenaba ir a su oficina,
así comenzó mí primer día de trabajo, fue intenso y comprometedor con todas las
compeñaras, trabaje a la par de ella, tuve que atender a 8 clientes, apoyar
recepción, ir a la junta directiva de la tarde y hacer la minuta, llevar varios
cafes a mí jefa, todo lo hice sin quejarme, ninguna de las compañeras tampoco
se quejo de mí, me alegraba que ahora tenía más empatía con ellas, realmente me
sentí muy cómodo trabajando de esa manera, solo quería repetir lo que había
vivido ese día.
Así pasaron el resto de los días de trabajo, cada día me
adaptaba más a mí nueva forma de trabajo, por orden de mí jefa en las reuniones
debía estar callado sin expresar ninguna opinión y sentado escribiendo lo que decían, si tenía algún
comentario que decir le debía pasar un papel a mí jefa y ella debía decir mí
duda o mí comentario, eso me hizo poner más atención a lo que decían los demás
y saber mí lugar en una reunión de trabajo para después pensar bien las cosas y
dar mí opinión en privado, mí jefa siempre estaba fijándose en como vestia y me
comportaba, solo había perdido un día de trabajo cuando al final del día se
fijo que mí medía se había roto, realmente no se rompió solo fue un pequeño
desgarro, pero compromiso era compromiso y acepte el castigo, en la quincena
ganaría menos dinero, pero ahora tenía más experiencia, debía tener un kit de
emergencias, ahora sabía que un poco de esmalte podía detener el desgarro y
sabía que las medias que me compre eran muy malas, también aprendí que debía cargar
papel higiénico, ligas para un liguero roto, también me dí cuenta que lo mejor
para ir a trabajar y no sufrir de calor eran las medias de tubo, también
aprendí cual desodorante era el mejor para el trabajo, además del perfume un
kit completo de maquillaje, medias extras y pantaletas también debía ir en el
kit, un espejo, un desarmador, una lima, cargador para teléfono, pinzas para
enchinar pestañas y paquete de toallas femeninas.
Tambíen me di cuenta de que no era difícil mantener las
piernas juntas, solo era cuestión de mantener mí postura correcta y apretar mí
vientre, pero además de eso debía siempre tener mis brazos pegados al cuerpo y
sobre mis piernas, aunque en varias ocasiones falle en mantener mí postura pero
como dijo Thelma no debía preocuparme mucho el como camino, hablo o me siento,
muchas de las mujeres jamás lo va hacer igual que tú, muchas no les importa
como lo hace, a ti tampoco debe preocuparte, cuando estés entre ellas te vas a
dar cuenta de que muchas no les importa que abran de más sus piernas o por
descuido se vean sus pantaletas, eso es mas muy común de lo que piensas, solo
cuida de traer tus pantaletas limpias y usar toalla por que el producto es
nuevo y puede tener escurrimientos, lo mejor es que lo uses, cuando suceda vas
a sentir una pequeña vibración quizás te duela un poco, pero va a pasar, solo
tienes que cambiarte y eso es todo.
Mis hijos estaban felices cuando iba por ellos, no se
quejaban que llegaba tarde por que los recompensaba comprando algo que les
gustaba, también aprendí hacer nuevos platos de comida, por que entre las
compañeras era un tema muy recurrente y aprendí a romper el hielo con ellas al
preguntarles que harían de comer, también me atrevía a preguntar donde compraba
sus medias o ropa que me gustaba, también les hacia cumplidos sinceros en la
forma que vestían o se maquillaban, ellas me decían donde compraban y me daban
tips de como comprar, también me regresaban el cumplido, ahora estaba haciendo
muchas amigas, sentia que solo era yo mismo y me estaba gustando como estaban
las cosas.
Paso un mes en las mismas condiciones, mí jefa se había
abierto conmigo y me platicaba sobre sus problemas familiares, me dijo que ella
no vivía con su pareja y su hijo, ella se había divorciado y su hijo lo veía
solo en vacaciones, la siguiente semana terminarían las clases y lo tendría con
ella para hacerle su fiesta de cumpleaños, entonces ella me sugirió que podía
llevar a mis hijos para que se conocieran, de esa manera podríamos interactuar
fuera de la oficina y conocernos mejor al hablar en confianza sobre nuestros
problemas.
Ella sabía de mis problemas con mis hijos y mí pareja, pero
solo someramente, ahora que mí modo de ver las cosas estaba cambiando y me
volvía más empático, atento, bondadoso con mí hijos ellos confiaban más en mí y
se divertían conmigo, me ponía a jugar con mí hijo aunque trajera falda de
mezcilla, por que los domingos estaba haciendo reuniones de catalogo en mí casa
para ganar un poco de más dinero para compensar mis fallas.
Con mí hija me ponía a ver la tele y películas que a ella le
gustaban y nos poníamos hablar mientras cocinábamos, los niños me ayudaban con
el quehacer de la casa, debí lavar toda la ropa de mí pareja, la de los niños y
la mía, no tenía mucho tiempo los fines de semana, pero todo era parte del reto.
Pude hablar con Thelma durante el cuarto fin de semana,
cuando fui por la despensa de la semana, mientras los niños estaban en su
convivencia de fin de curso, ella me sugirió que también debía pensar en mí
mismo y considerara hacer cambios definitivos en mí vida de esa manera
realmente sería feliz, solo le dije que quizás fuera muy prematuro y debía
dejar que mí jefa decidiera hasta cuando me levantaba el castigo entonces
quizás todo volvería a como era antes, Thelma con su sonrisa acostumbrada solo
me dijo que solo tenía miedo de ser lo que realmente era, que dejara de
autoboicotearme, que pensara bien las cosas durante las fiestas de fin de año y
entonces comenzando el año tendría una decisión más firme para que ella me
pudiera ayudar, le dije que lo pensaría.
La semana se fue muy rápido, adelante mí reunión de catálogo
para el día sábado por la mañana, por tarde después de hacer el aseo de la casa
fuimos a comprar el regalo del hijo de mi jefa.
Mientras comprábamos en el centro comercial, ví un lindo vestido
que no pude dejar de comprar, lo usaría para ir la fiesta de mí jefa, era
floreado corto y pegado, tipo venus que reducía mí cintura y dejaba ver mis
llenitas piernas al igual que mí gran trasero y mis pechos fingidos pero
agradables , en la oficina no podía usar ese tipo de vestido y el usarlo era
una forma de quitar la formalidad de la oficina, también haría ver a mí jefa
que el reto estaba superado y quizás me levantaría el reto.
El vestido debía usarlo con mí bodyair para mí figura fuera
más agradable, unas medias transparentes eran las indicadas, pero decidí no
llevarlas, aunque comenzaba hacer frio y por la tarde cuando saliéramos quizas
tendría que aguantar el fresco como todas las demás mujeres, no me importaba lo
importante era que pasara como cualquiera de las mujeres de la reunión, me estaba acostumbrando al frio de las mañanas
y el no usar medias hacia que el vestido luciera mas lindo, usaría los zapatos nude en color beige con
cordón al tobillo para que mis chamorros o pantorrillas se vieran muy lindos y
delgados, mí bolso en beige combinaba perfectamente con el vestido y los
zapatos, era grande y podría llevar lo que me hiciera falta más los abrigos de
mis hijos, un collar de metal dorado y unas arracadas de mí pareja eran el
complemento del atuendo, agregué una pulsera de reloj y un anillo de mí pareja
que siempre usaba pare ir a fiestas. (también decidí use su ropa interior de la
suerte en color rojo).
Por la mañana del domingo me prepare primero después de hacer el desayuno, prepare a los
niños para que fueramos a la fiestas a mí hija le puse su vestido nuevo con sus
zapatos rojos preferidos, a mí hijo le puse su pantalón y camisa nuevas, con su
chamara, los peine y a mí hija con una linda trenza, a mí hijo como yo
acostumbraba a peinarme, yo arregle mí cabello hacia un lado y maquille mí cara
lo mejor que pude para la ocasión puse un poco de más color en mis labios de lo
acostumbrado para ir al trabajo.
Me dí la últma revisada después de ir por mí chalina, todo
estaba en su lugar y lucia perfecto, mí
vientre liso, mis piernas también lisas y agradables, mí cabello bien arreglado
mí estilo Bob, mis labios estaban rojos y bien delineadas las pestañas, lo que me gustaba era la forma en que había
perfeccionado la forma de maquillarme, era mucho mejor que la mayoría de las
compañeras y mí jefa, pensé que mí pareja estaría orgullosa de como me veia o
quizás estuviera celosa, varias de mis vecinas me confundieron con ella cuando
salía a dejar a los niños, eso aproveche para invitarlas a la reuniones de
catálogo, ellas jamás dudaron que no fuera mí pareja, algunas de ellas me
hablaron después para comentar cosas que pasaban en la calle o con otros
vecinos, ahora era parte del grupo de vecinas que se apoyaban entre sí.
Tomamos un taxi y llegamos a la casa de mí jefa.
Toque la puerta, los niños estaban ansiosos de conocer a Jhon el hijo de
mí jefa, se escuchaba mucho ruido de niños y gente hablando, la puerta se abrió
una mujer joven apareció para preguntarme quien era, le dije que Joan Swany trabajaba con Miss Stone, la mujer me dejo
pasar dándome la bienvenida y me pidió el regalo que traíamos para dejarlo en
la mesa de regalos, la mujer se identificó como Paty la prima de Bety mí jefa, había muchas mujeres caminando por
la casa, Paty me dijo que su prima Bety estaba en la cocina que pasara para
saludarla, los niños estaban en el jardín jugando, querían ir a jugar les dije
que debíamos saludar a mí jefa, pero ellos se fueron corriendo al jardín,
alcance a la cocina, al verme se limpio las manos y tuvo la excusa para salir
de allí, me llevó a presentar con sus amigas y vecinas, había algunos hombres
en el patio haciendo carne asada frente
a una hornilla, nos acercamos al vernos se voltearon, todos fijaron su mirada en
mí, el primero que me presentó era el más alto de todos, era su tío jhon le
ofrecí la mano, mis uñas aun seguían pintadas de color rosa, su tío dijo que mí
jefa hablaba mucho de mí, yo le conteste que si eran cosas buenas todo estaba
bien, no reimos y luego me presentó con
sus vecinos, todos me decían que les daba gusto en conocerme, por detrás de
ellos estaba el hermano de mí jefa, que se llamaba Dick su mirada era
diferente, el solo me dio su mano y me dijo que
ya me conocía, yo con extrañeza le pregunte en donde me conocía?, el con un pequeña sonrisa y los brazos cruzados me dijo que en el
trabajo durante la últimas 4 semanas cuando todos los días pasaba enfrente de
su oficina y lo distraía, todos se
rieron de la situación hasta mí jefa, Dick era el jefe administrativo de
operaciones de entrega, yo lo único que dije era que me disculpara no era mí intención,
mí jefa solo dijo que a ella también le pasaba lo mismo, todos se rieron, el tió de mí jefa agrego un comentario: a
Dick eso le pasa muy seguido, verdad Dick?—Dick se quedo callado por un memento
y agrego: bueno realmente tenía tiempo que no me pasaba, pero creo que lo
aprendí de ti no?—la conversación se tornó álgida pero el papá de Dick mantuvo
la alegría y dijo: si es verdad, pero dejemos de hablar y dame una de esas
grandes salchichas para la invitada—dick puso una grande salchicha en un plato
y me la pasa, tome el plato y le dí una mordida, todos rieron por la cara que
puse al morder la salchicha, estaba muy rica, mí jefa me pidió acompañarla para
presentarme con su madre en la sala, su
madre era una mujer alegre y bien vestida, tomaba una cerveza, se parecia mucho
a mí jefa, la salude con un beso en la mejilla y me pregunto como estaba su
hija, si continuaba siendo mandona, yo con una sonrisa y alegría le dije que
si, la señora dijo que no me preocupara que en el fondo era muy buena, entonces
me contó que cuando era niña no le gustaba ponerse vesidos y la tenía que
obligar a ponérselos para ir a misa, me reí de la situación por que mí jefa
solo le dijo que dejara de estar molestándola, yo para salir de la pena de mí jefa
dije: bueno para mí era al revez, yo siempre quise ponerme vestido y no me
dejaban, siempre fui obediente y no me gustaba que se molestara mí padre, entonces
la señora me pidió ayudarla a entregar las bebida y los bocadillos, me dio una bandeja y comencé a
repartir bebidas, mientras mí jefa se iba a la cocina para terminar los
bocadillos que faltaban, estuve repartiendo las bebidas hasta que llegaron los payasos y comenzó el espectáculo,
los niños se divirtieron mucho, luego llegó el pastel y la abertura de regalos,
los niños comenzaron a jugar con los juguetes y la fiesta se fue acabando poco
a poco, estuve hablando con mí jefa sobre su hijo y de como conoció a su ex esposo,
el era uno de los socios de la empresa y se había independizado, ahora vivía en
otro país con su hijo, pero lo peor fue que ella comentió un error al salir con
un amigo y no pudo quedarse con su hijo, yo escuchaba lo que decía, mirando a
los ojos y tratando de entender lo que sintió en el momento que me explicaba la
situación, solo volteaba a ratos para ver donde andaban mis hijos, ya eran
amigos, cuando me toco hablar yo le explique lo que había pasado con mí esposa
y como me sentía ahora, le explique que las vecinas me había confundido con
ella, de como comencé las reuniones de catálogo con ayuda de Barbara, también
le comenté como había conocido a Thelma y como me ayudo, ella con sinceridad me
dijo que estaba sorprendida en la forma que había ido el primer día y de como
supero cada prueba que me puso, de lo bien que me había unificado a las compañeras, me confeso
que jamás pensó que yo pudiera lograrlo y de lo feliz que estaba, pero ahora
solo esperaba verme llegar para alegrar su día, en su comentario agrego que
también su hermano le había dicho lo mismo, por que siempre traía una sonrisa
en la cara a pesar de las dificultades del trabajo, entonces me sorprendió
cuando dijo que deseaba que siguiera trabajando de esa manera, yo no supe que contestar, solo me dijo que lo
pensara al final de la navidades, ella me invitó a traer a los niños y pasarlas
con su familia, yo acepte la invitación y durante ese tiempo descubrí que Dick
le gustaba mucho Joan y deseaba llevar una relación con ella, yo con miedo y
sorpresa acepte la invitación para una cena, mí jefa insistió y tuve que aceptar,
durante el fin de año me invito a ir a la misa de gallo y cenar en mí casa, eso
significaba que se tendría que quedar en mí casa en el sofá, al dia siguiente
prepare el recalentado y vimos los partidos de futbol, durante todo ese tiempo
descubri que me gustaba se mujer y no quería aceptarlo, entonces cuando regrese
a trabajar con la ayuda de Thelma tenía un pequeño aumento de pechos y comencé mí
cambio con una orchirectomia.
P:D.
Durante esas navidades, la cena con Dick, la cena de nochebuena, Dick se
acercó mucho a mí y no pude evitarlo, en la noche buena hicimos el amor, la
pantivagina era fabulosa, el jamás se dio cuenta de que era plástica, jamás
noto la diferencia, hizo que mi
experiencia fuera intensa y natural, al igual que mis pechos, eran fabulosos, les
recomiendo ese producto, es excelente.
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