viernes, 20 de abril de 2018

el mejor consejo que recibi mi jefa....me deje llevar por ella para lograr ser una mejor empleada....


"Si no lo haces, jamás vas a saber".

Si no lo intentas jamás sabrás si puedes".





Eso fueron los consejos de mí jefa, ella estaba de acuerdo en que intentara conseguir el puesto ejecutivo dentro de la empresa, ella me estaba proponiendo para el nuevo puesto ejecutivo y saliera de mi área de confort;  yo tenía dudas en que pudiera lograr el puesto y  aunque cubría en un 99% con los requerimientos del puesto, el solo 1 % que me faltaba para cubrir el puesto, era el más importante de todos los requisitos, no era tener la experiencia de al menos 3 años, ni la estar actualizado en la parte técnica del puesto, ni la edad de 30 años, ni el nivel de estudios, era simplemente que para cubrir el puesto debía ser mujer.




Yo jamás había dado dudas ami jefa de de ser gay o algo parecido, pero ella estaba segura de podía hacerlo, era una buena oportunidad de trabajo, durante los 10 años que trabaja bajo sus ordenes jamás había tenido ningún problema con ella, ahora a mis 30 años ella estaba segura de que podría desempeñarme perfectamente en un área ejecutiva.

A la hora de la comica me invitó a tomar comer con ella para seguir platicando sobre  como podría sobre pasar el único requisito que me impedía alcanzar mis metas, ella me recordó cuando llegue a la empresa y ella me entrevisto, le dije que quería llegar a ser gerente de área o al menos subgerente en 10 años, esa era mí oportunidad, aunque las cosas hubieran cambiado la meta seguía en mí mente y debía llegar a ella, eso siempre me enseño mí jefa.




Durante esos diez años jamás me queje por el exceso de trabajo o salir tarde, o no comer, ese día era uno de esos días que se debía disfrutar por no tener trabajo o haber hecho un buen trabajo,  mí jefa iba por delante de mí, ella era una mujer alta y  yo simplemente trataba de ver  lo que ella veia en los aparadores, la fui siguiendo hasta llegar al segundo piso de una pequeña plaza comercial, entro a la tienda y la seguí dentro de la tienda, ella parecía conocer a la dueña del negocio  y le pregunto a la chica vendedora por la Sra. Thelma,

La chica nos llevo a la trastienda, una mujer de cabellos blancos y sumamente bella y bien arreglada nos ofreció su mano, era muy suave su piel, me pareció muy simpática su sonrisa, me dio mucha confianza, la mujer me dio un beso en la mejilla y le pregunto a mí jefa si yo era su nueva Heather, mí jefa de rio y dijo: realmente se llamaba Harry y si creo que si es mí nueva Heather.

La jefa le explico brevemente mí situación, la dueña escucho con atención y me pregunto si realmente quería postular para ese puesto?, le dije que si quería, pero me volvió a preguntar si realmente quería ese puesto y que estaba dispuesto a perder para obtenerlo, trague saliva y le conteste que lo único que quería era tener un buen trabajo para cuidar a mí hijo.





Eso basto para que Thelma me ayudara, le pidió a la chica vendedora me ayudara con lo que necesitaba, la chica me dijo que no me preocupara que ella me iba ayudar si yo le ayudaba, le dije que lo único que quería era que mí jefa aceptara que no podía postular para el puesto, la chica solo sonrio y me pedio amablemente entrar a uno de los vestidores y quitarme la ropa para probarme uno de sus productos de importación, me dijo que todos sus productos estaban certificados y eran los mejores en el mercado, eran hipo alergénicos y totalmente sanos y naturales.


La chica agrego  a su comentario que realmente quizás solo era un apoyo, por que todo estaba dentro de mí y solo debía confiar en mí mismo, la chica se fue y me dejó dentro del vestidor, me quite la ropa y solo me deje los calzoncillo, pero cuando la chica regreso desde el otro lado me dijo como si supiera que debía quitarme toda la ropa, lo hice, la chica me paso dos cajas de cartón por encima de la puerta y mientras lo tomaba, ella tomo toda mí ropa por debajo de la puerta, estaba
 atrapado, la chica me dijo que abriera las cajas y me probara los productos, que las instrucciones estaban dentro de las cajas, abrí la primera caja, era un producto prástico en las instrucciones decía que era una pantivajina
totalmente vello natural  y podía hacer todas mis necesidades sin quitármela, me parecio divertidas las instrucciones, me decía paso por paso como debía colocarla, si lo hacia correctamente, unos pequeños vibradores se adaptaban a zonas muy sensibles, lo hice en 5 minutos, ajuste como dijo el papel y en ese momento ya tenía una vagina completamente funcional, me recomendaban hacer pipí sentado para no lastimarme, aunque podía sentarme sin lastimarme.

Abrí la segunda  caja eran unas bubis con una aurea color rosa y pezones grandes con un simple roce crecían, también vibraban en la zona de mis pezones, en la caja había varios tubos de pegamento, le puse todos para tener un máximo agarre, espere el tiempo suficiente sosteniéndolos, hasta que lo solté para sentir lo que era estirar mí piel por los pesones, era muy naturales, no eran como globos, era de mí tamaño con taza 34c, uno era más grande que el otro,  pesaban como uno normal y se movian taan bien como uno natural,  me admire en el espejo del cubículo, mis caderas había crecido y mí cintura se redujo al menos dos tallas, mis nuevos pechos eran suficientemente agradables y los bordes de mis pezones se percibían a simple vista, los bordes de los pechos eran invisibles y se diluían en mí piel por ser del mismo color que mi piel, era como si siempre los hubiera tenido.


La chica me pregunto si ya estaba listo, le dije que seguía, me dijo que mí jefa me mandaba la ropa y me apurara por que solo teníamos 40 minutos para regresar, la chica me paso un juego de suave ropa interior, un liguero y un paquete de medias de tubo obscuras, toque la suave textura del bra y las pantis era forma V en color negro que me quedaron perfectas, además un medio fondo en color negro; una blusa blow blanca, una falda en color negro y un saco rojo, era una ropa muy ejecutiva y de buena calidad, me probe la ropa y era de mí talla, se ajusto perfectamente a mí nuevo cuerpo de mujer, el hecho de no traer un pene la falda se veia perfectamente lisa en el área del vientre, un lindo valle de venus de mostraba, las pantaletas se veian lindas con sus dos bultitos en medio de una canalito, eran una vista muy lindos.


Me puse las medias de tubo pero bajo el consejo de la chica que debía ponerme primero el liguero y luego las medias, comprendí el como no quedar atrapadas las pantaletas, la blusa era muy suave y el saco de un botón, complemento mí silueta curvilínea, el saco caia sobre mis caderas, dando estilo, solo faltaban los zapatos, pero eso llegaron al momento de salir pare verme en el gran espejo fuera de los vestidores, eran zapatos de 5 cm con correa al talón, cerrados en el frente, no eran muy altos y podía caminar con ellos, eran  lo suficientemente altos  para adelgazar mis tobillos y hacerlos lindos, sentí que eran muy cómodos y seguros.

Estaba listo para que la chica aplicara sus conocimientos de
belleza y maquillaje, me dio una pequeña lección suficiente para maquillarme para un día de trabajo de oficina.


Le hizo un estilo bob a mí cabello con unos pocos cortes, me prestó sus aretes de perlita y su dije de cruz, así salí para que la sra Thelma y jefa aprobara mí nueva imagen.

Ví una ligera sonrisa a mi jefa,pero ella no espero mucho
para verme a detalle, necesitabamos regresar a la oficina,  se despidió de la dueña, me ordeno tomar un bolso nuevo que estaba en en el mostrador, salimos para regresar a la oficina, así sin pensarlo mucho salí a la calle llena de gente caminando en su suyo, sin importar a la gente quien era, camine a su paso hasta la oficina, no me dio tiempo de pensar en lo que hacia, solo debia estar al lado de mi jefa, haciendo lo que ella me pedía.



Me ordenó guardar mi nuevo bolso en el cajón de mi escritorio, estuve cargando el bolso pensando que era de ella, me ordenó tomar mi libreta de notas e ir con ella a la junta ejecutiva, de esa manera comenzaria a darme cuenta de como era el ambiente de una reunión  de jefas, solo tome mis lentes, mi lapiz, mi libreta y corrí con ella al elevador.

Me presento frente a todas esas mujeres serias y bien vestidas, como la Señorita Heather, su nueva asistente.

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