Cuando entras al mercado del
desempleo es difícil salir, al menos que puedas cambiar tus hábitos y forma de
pensar, logrando la imagen perfecta que necesitan los reclutadores,
el camino es fácil pero cuando pones empeño y consigues lo que los otros
desean de ti, es un estado de maravillosa alegría.
Estaba frente a la reclutadora con mi
único buen traje, cuando escuche la propuesta que me hacía para ayudarme,
por había sido cruel al mostrarme la realidad de que jamás iba conseguir
trabaja y mi vida estaba arruinada, que vistiendo de esa manera jamás me darían
una oportunidad, intente aguantar de que mis ojos no se humedecieran,
pero no lo logre, la hermosa mujer que tenía frente a mí, hizo una mueca de
lastima y pena, así que me hizo una propuesta porque había algo en mí que
quizás necesitaba la empresa, pero tendría que entrar a un programa especial de
reclutamiento, sin goce de sueldo pero con altas posibilidades de entrar a
trabajar en la empresa a nivel de asistencia administrativa, solo debía
alcanzar el nivel óptimo satisfactorio en los resultados y desempeño del curso
de dos semanas, la empresa estaba interesada de generar nuevos talentos porque sabía
que el mercado laboral no lo tenía, el departamento de recursos humanos estaba
realizando una investigación sobre cómo mejorar el desempeño según el perfil
más adecuado para el puesto.
La mujer reclutadora me pido mis
datos y me hizo hacer un test de personalidad, espere un rato para saber mis
resultados, sin decirme el resultado me confirmó que podría entrar al programa
especial de reclutamiento, yo debía invertir en el costo del curso para
adquirir las habilidades necesarias para ese puesto administrativo y de esa
manera tendría una pequeña posibilidad de oportunidad de conseguir empleo, me
hizo firmar un documento donde decía que era mi decisión asistir al curso de
"re-ordenamiento de la personalidad y la adquisición de nuevos hábitos
efectivos para una vida feliz", que la empresa no se hacía responsable de
mi o problemas de salud, mientras durara el curso, ni tampoco de contratarme
sino cumplía con los requerimientos del puesto al 100%.
La mujer me dio un esquema de los
temas del curso y los objetivos generales de la "Escuela Gerencial de
re-entrenamiento para la efectividad laboral", el folleto se veía muy
profesional, con imágenes de mujeres que estaban laborando o presentándose
frente a los clientes.
La información y los temas mostrados,
realmente no eran diferentes de lo que alguna vez tome en otra empresa para
lograr la efectividad, acepte entrar al dichoso curso y no había otra
alternativa para mejorar mi economía, hasta ahora el finiquito me había
alcanzado para ayudar a mis hijos
La mujer me pidió leer bien el
folleto y me di otra hoja con requerimientos previos para asistir al curso, me
hablo francamente diciendo que realmente tenía muchas posibilidades y estaba confiando
en mi para obtener una buena vacante en la empresa, me dijo que durante el
curso se estaría evaluado el desempeño de todos los participantes e irían
saliendo si no alcanzaban los requerimientos, me deseo buena suerte y con
un fuerte apretón me despidió.
**
Llegue a mi casa con alegría y
comencé hacer la cena, mientras leía la información, encontré la diferencia y
el plus del curso, el curso era para formar "mujeres ejecutivas" con
un alto nivel de servicio y atención a los clientes, después comencé a leer la
hoja que me dieron para ver los requerimientos previos para asistir al curso.
Al terminar de leer, entendí que me
había metido un gran lío, pero era mi única oportunidad para lograr un empleo.
Durante la cena con mis hijos no
comenté nada, solo mi hija menor que ya tenía 14 años, me preguntó por qué
estaba triste, le dije que había recordado a su madre.
Me fui a mí recamara para volver a
leer la hoja de requerimientos:
Durante el curso es necesario vestir
en forma cómoda, hasta que sea requerido venir vestida formalmente.
(Liggins, pantalón, falda o vestido
de diario; no short cortos, ni pantalón)
Para desarrollar una correcta postura
Se requerirá que las participantes para desarrollar el curso cuenten con
zapatos de tacón de 3, 5 y 10 cm, además un libro grande y pesado.
Tomen en cuenta de que las clases
duraran de 3 a 4 horas por lo cual deberán traer louch y agua.
Se dará una constancia de valor
curricular, por lo que es importante que sus datos estén correctos, por favor
revise su hoja de inscripción con la institución que la inscribió al curso.
Recordé que mi esposa había dejado
algo de ropa en la cesta sucia de su recamara, busque en la cesta y para mi
suerte encontré un par de Liggins usados y dos blusas, estaban junto con la
ropa interior que había usado por última vez, antes de irse de la casa, tenía
lo necesario para salir de la casa para ir al curso, me pregunte si aún quedaba
algo de ropa en su closet,
Ya no había más ropa en la casa que
los 2 liggins y las dos blusas, pero para mí fortuna encontré un viejo bolso y
unos zapatos de tacón bajo como de 3 cm y otros como de 10 cm, solo me
faltarían los zapatos de 5 cm,
Resignado me bañe y me provee la
ropa, para mi fortuna me quedaba perfectamente, era de la misma talla que ella
y con los kilos de más acumulados, se ajustaba a mi cuerpo, quizás hasta mejor
que ella, pero en ese momento no lo sabía.
También para mi fortuna encontré en
el bolso su equipo de maquillaje, tenía todo pero no sabía cómo usarlo, en el
folleto de presentación del curso decía: "el 99% de las mujeres ejecutivas
pierden un contrato por: no hablar correctamente y su voz es
desagradable, no
tener una imagen agradable y ejecutiva, no sabe coordinar su ropa para cada
evento, no saben caminar con calzado ejecutivo, no cuidan su aspecto y dejan
que desear en la etiqueta de negocios, no saben sentarse correctamente, no
distinguen jerarquías, su imagen ya no es pulcra y agradable, en una palabra se
han masculinizado, pero no tiene por qué ser así, una verdadera dama de
negocios obtiene más de lo que da, logra negocios siendo ella misma, nosotros
tenemos la garantía de lograr casos de éxitos, logrando la confianza y la
imagen de mujeres pulcramente ganadoras en solo dos semanas".
Recordé lo que me dijo la
reclutadora, es un experimento laboral, había firmado un documento donde me comprometía
a dar lo mejor de mí, era una oportunidad que no iba a desperdiciar, debía
morir en el intento, lo primero que debía hacer era quitarme el miedo a que me
vieran salir con la ropa de mi esposa, para eso debía hacer lo mejor para
mostrar una imagen femenina, mi cabello no lo tenía corto, ni largo, podría
hacer algo con él, mi voz era muy ronca y podría suavizarla si tomaba algún te
para suavizar la garganta, recordé que mi abuela me daba te de mandrágora,
quizás ahora podría usarla para agudizar mi voz, en
cuanto a verme como mujer
lo más fielmente, tendría que saber cómo hacerlo, tome la computadora de mi
hija mayor y comencé una búsqueda sobre "métodos eficaces para ocultar
penes", al principio no encontré páginas que pudiera utilizar todo era muy
gay y tendencioso, eran muy burdos los métodos y no daban confianza, sentía que
debía ser algo natural y que pudiera hacer mis necesidades sin tener que
quitarme o ponerme algo; se me ocurrió buscar lo mismo pero en lenguaje
asiático-oriental, me sorprendí lo que encontré, no sabía el idioma pero las
fotos y lo que podía traducir, me dieron la confianza de poder hacerlo
correctamente, también conseguí el método para agrandar los pechos en
forma natural, por casualidad también se usaba raíz femenina de mandrágora, esa
planta se daba en mi jardín, solo era cuestión de salir y recoger lo que
necesitaba.
Ya con la información comencé los
preparativos, salí a mi patio y para mi suerte era noche de luna llena y según
la recta de la pócima se potencializaba al prepararla en luna llena, para
asegurar su efecto agregué un poco más de ingredientes, me tome la parte para
la garganta el resto debía usarla como fomento para estimular la absorción de líquidos
de mi células de mis pechos, masajeando efusivamente en forma circular hasta
obtener el volumen adecuado, la receta recomendaba que el masaje se repitiera
por varios días, aunque la retención de líquidos podría permanecer por dos
días, pero al repetir el masaje podría permanecer por más días.
Subí nuevamente a la recamara de mi
ex me senté en la taza y puse hielo bastante sobre mi pene y debajo de mis
testículos, recomendaba 15 minutos pero yo permanece por 30 minutos hasta que
no sentía nada, entonces como recomendaba tomar con tres dedos uno de los
testículo y con rapidez llevarlo hasta arriba del hueso sacro y soltarlo, pero
yo lo tome con dos dedos y mucha delicadeza, a pesar de todo sentía dolor pero
aguantado poco a poco lo puse en su lugar, con el segundo decidí hacerlo como
recomendaban con tres dedos, lo hice con rapidez y sin miramientos, no sentí
dolor, fue grado darme cuenta de que no se saldrían de su lugar y una sensación
de libertad al darme cuenta de que mis muslos podían tocarse.
El segundo paso se podía hacer de dos
maneras: la primera era jalar con fuerza el pene hacia atrás lo más que se
pudiera pegarlo en un lugar estratégico para poder hacer pipí como una
mujer sin problemas pero me mojaría más, la segunda era introducir el pene
sobre sí mismo con dos dedos y ajustar el lugar donde saldría la pipi, de esa
manera sería más natural hacer pipí, aunque de las dos maneras tendría que
hacerlo sentado.
Me
decidí por la segunda para mi comodidad, lo hice rápido y sin problemas, solo
debía poner mucho pegamento permanente, cuando se secó, comencé mi obra
maestra, usando una foto de una verdadera vagina fui diseñando mi vagina con la
piel del escroto, la receta recomendaba usar vibradores en lugares estratégicos
para una mayor experiencia, pero nos tenía, así que solo haría lo mejor
posible, después de 35 minutos logre la misma imagen de la foto, hasta logre un
canal vaginal de 10 cm.
Como no tenía tiempo para lavar, me
puse las últimas pantaletas de mi esposa, realmente estaban limpias, la tela
era muy transparente así que al ponérmelas podía ver que mi vagina era muy
parecida a la de mi esposa.
Seguí con mis pechos, masaje por una
hora hasta lograr unos pechos discentes que cupieran en brassier de mi esposa
en color morado, me alegré saber que tenía la misma talla de brassier que ella
y de darme cuenta de que el bra hacía que lucieran más grandes de lo que
eran.
Me vi al espejo para darme cuenta de
que estaba viendo el mismo cuerpo de mi esposa, traía su
ropa, me puse el liggins, su blusa halter y sus zapatos bajos, recordé muchas
cosas al ver la imagen de mi esposa reflejada en el espejo, ella le gustaba usar
diademas, así que me puse una de ellas, un collar y una pulsera que había
olvidado, no había diferencia entre ella y yo, quizás por ser más bajo que ella
era la única diferencia, pero el tamaño de mi trasero y pechos eran los mismos,
quizás mayor tamaño.
Me alegre de lograr pasar por una
mujer, intente hablar pero mi voz aun no era buena, decidí irme a dormir a mi
recamara.
A la mañana siguiente había dejado
todo listo para que mis hijos tomaran sus lonches y salieran para su escuela,
así que me levante un poco después de que se fueron, me vestí con la ropa de mi
esposa, tome el bolso y salí rumbo a mi curso.
Entregue la hoja y la mujer que me lo
recibió me explico que debía ir a una sala a esperar a que la profesora llegara
agregando el término "Señora", increíblemente mi voz era más aguda de
lo que era, mi cara no estaba maquillada totalmente femenina, solo había puesto
un poco de lápiz labial y levantado mis pestañas, quizás la forma en que peine
mi cabello con la diadema me confundía, o quizás era que mi liggins mostraba un
pie de camello, pero eso era bueno, me daba mucha confianza hasta ese
momento nadie se había fijado en mí.
Cuando entro la profesora, se
presentó y dijo que el 90 de las mujeres que estaba allí no acabaría el curso,
luego pidió separarnos según nuestras características, mujeres manzana,
mujeres peras, mujeres tabla, a mí me catalogó como mujer pera pero realmente
dijo que era reloj, le llamó la atención por tener la cadera más ancha de las
mujeres que estaban allí, eso haría que girara mi cadera y debía tener cuidado
de no dar pasos grandes, debían ser pequeños.
Los ejercicios de caminar comenzaron,
primero solo era caminar para descubrir nuestro paso, me di cuenta de que la
mayoría de los participantes al curso no eran "Mujeres ejecutivas",
en muchos de ellos trataban de fingir algo que no eran.
Íbamos y veníamos por el salón, la
maestra observaba sin intervenir, al grupo de "caderas grandes ni siquiera
lo miraba, estaba más atenta a los de cuerpo de tabla.
En un descuido mis tobillos se
doblaron, entonces la maestra tomo de base el incidente para cambiar los
ejercicios para fortalecer las pantorrillas y muslos, durante el resto del
tiempo levantamos los tobillos pegados a la pared con un libro en la cabeza,
hicimos sentadillas, mantuvimos el equilibrio colocando un pie adelante del
otro, sin avanzar.
Termino la clase dando ejercicios
para hacer en casa, yo sentía que no había avanzado mucho, pero pensé también
que el hecho de que la maestra no mostrara interés en nosotros era porque lo
habíamos hecho bien, al final una de las mujeres que estaba conmigo me hablo
para decirme lo mismo que estaba pensado no lo habíamos hecho mejor que los
demás, entonces aclarando mi voz para ajustarla, le dije que el hecho de que la
maestra no nos dijera nada era porque lo hacíamos bien.
Para seguir el curso entramos a un
salón para tomar una clase teórica, entró una mujer vestida ejecutivamente, se presentó
como Miss Hammer, durante las dos horas y media que duró la clase, marco mi
vida para mejorarla y tomar de base sus enseñanzas, hablo sobre cuerpo místico
de la mujer, su centro de energía y como cuidarlo manteniendo una postura
correcta, las misiones de la mujer en la sociedad y el hogar, aprendí que
muchas mujeres están desequilibradas por no conocer el importante papel
secundario en una relación.
Aprendí que siempre había estado en
el lado equivocado de la vida y debía enseñar a mis hijas a ser mujeres,
también aprendí que debía organizar mis actividades y brindar lo mejor de mí a
los demás, no era importante el tiempo sino la atención y cuidado hacia los
demás, debía acercarme a mis hijos y conocerlos mejor.
Salí motivado del primer día, el
convivir con otras mujeres que me consideraban como una igual me daba mucha
confianza, Miss Hammer nos motivó para tomar decisiones y no dejar que los
comentarios de los demás decidieran lo que éramos, nos pidió salir al sol y
comenzara cuidarnos, que esa tarde fuéramos a un salón de belleza y nos
embelleciéramos nuestra alma, que apreciaremos nuestra cara.
Junto con otras 3 mujeres que
asistían al curso corrimos al salón de belleza más cercano, dándome valor por
estar con mujeres genéricas y fingiendo lo que estaba haciendo, pedí una
depilación de piernas, un manicure de pies y manos, un tratamiento de piel y un
corte de cabello, durante 3 horas conviví y habla con mujeres, siguiendo el
consejo de Miss Hammer sobre ser como un camaleón y absorber la forma en que
otras mujeres se comunican y lo que dicen y como lo dicen.
Durante las pláticas descubrí la
mejor clínica para aumentarse los pechos a un buen costo financiado y en dos
días se podría tener unas buenas bubis, que centro comercial tiene buenos
precios y buena ropa para comprar, pero en el aspecto de comprar ropa y
accesorios, mi nueva amiga llamada Beth, me dio un mejor tipo porque ella
"iba a la tienda de saldos" que estaba camino de mi casa, acordamos
que iríamos "juntas" a renovar nuestro armario.
Salí renovado del salón de
belleza, había sido una experiencia maravillosa conocer nuevas mujeres y
poder relacionarme con ellas, mi confianza estaba muy alta, era como si hubiera
recordado quien era, el entrar a una conversación y comentar algo desde el
punto de vista emocional era muy liberador.
Me sentía fresco ya sin bello en mis
axilas, piernas y brazos, mi cara la sentía fresca y limpia, aprendí a
descubrir mis zonas obscuras y la forma de mis cejas, sentí por primera
vez lo que era tener la "cara bonita", para mi nueva amiga era
algo normal, para mí era maravillosamente perfecto, debí disimular mi emoción,
Beth tenía un pequeño coche blanco, ella trabajaba como asistente ejecutiva y
había terminado sus estudios en administración y deseaba postular para un
puesto ejecutivo de jefatura, tenía la experiencia, pero no la oportunidad, su
jefa la había mandado al curso para mejorar su actitud y ayudarla a ser mejor
empleada, realmente su jefa no quería ayudarla sino usarla para alcanzar ella
subir de puesto, era una hipócrita compulsiva, pensé era para aprender de ella
y como debía comportarme con otras mujeres de su tipo, ella me di un tip sobre cómo
poner límites y decir las cosas sin remordimiento para ubicarlas, era aprender
a lastimarlas pero sin dañarlas físicamente.
Llegamos a la pequeña tienda de
Saldos, nos bajamos del pequeño auto blanco, tome mi bolso y lo acomode en mi
hombro, comencé a caminar al lado de Beth, ella hablaba sobre sus experiencias
de haber comprado en el lugar, mientras yo veía la diferencia entre la forma de
caminar de ella y la mía, trataba de igualar la distancia de sus pasos y el
largo del balance de mis brazos.
Entramos a la fresca tienda, tomamos
una canasta de plástico, ella se la colocó en el antebrazo yo hice lo mismo,
mientras ella organizaba el recorrido, compraríamos ropa para oficina, iríamos
a la sección de ropa para damas, luego compraríamos accesorios y zapatos.
Mi presupuesto no era alto, después
de gastar en el salón de belleza, pero debía invertir en ropa, traía la tarjeta
de crédito y podría usarla.
pero para llegar al área de
damos debíamos pasar por el área de ferretería, debí aguantarme de ver ofertas
en herramientas, cuando llegamos a la maravillosa sección que buscábamos Beth
me enseño a valorar lo que íbamos a comprar, lo primero que vimos fue un stand
de medias y pantimedias, me enseño a ver los defectos y la calidad de lo iba a
usar, vi el precio y solo me alcanzaba para comprar 6 paquetes,
aprendí que debía agregar a mi compra ligeros, cuando llegamos a la sección de
faldas y vestidos, aprendí a checar bastillas y costuras, botones y tallas,
como eran saldos las tallas estaban mal colocadas, lo mejor era probárselas, debíamos
ir a los probadores de ropa, eso era lo mejor de ir de compras, ponerse
linda para mirarse al espejo y revisar la ropa y darse cuenta de lo que
si le quedaba y no le quedaba a uno y si no le quedaba pero le gustaba el
modelo o salir a buscar la talla correcta, ese procedimiento lo repetí mucha
veces, a la señorita que atendía los vestidores, ni siquiera le importaba lo
que tomaba y dejaba cuando no me quedaba, seguía haciendo su trabajo, muchas
mujeres hacían eso mismo, Beth me recomendó comprar unos bodis que estaban
promocionando en la televisión que prometían bajar dos tallas, así que debía
comprar ropa dos tallas menos, le hice caso y compre mi ropa más pequeña de lo
que era, fue una buena experiencia comprar ropa que no me quedaba y después
probarla para darme cuenta de que si era mi talla, en mi emoción de ver los
precios tan bajos pero no poderlos comprar me provee mucha ropa para
darme cuenta de que lo mío era las faldas y vestidos pegados, me derretía al
verme dentro de ellos, algo me decía que ese era mi estilo, para mi gusto
me hubiera una docena de cada una por no decidirme cual era mejor, pero
solo compre dos faldas y un vestido, una para el trabajo otra de diario y el
vestido podría usarlo tanto para el trabajo como para ir de compras, sobre
blusas me provee muchas y escogí pocas, cuando terminé de probarme y salir con
mis prendas para pagarlas, me di cuenta de que Beth llevaba más ropa que yo.
Aún faltaba probarnos más ropa, había
oferta en pantalones de mujer, así que aprendí a escoger pantalones cómodos y ajustados,
los mejores de esa temporada eran los que no tenían bolsas eran los más cómodos
por ajustarse perfectamente al cuerpo al sentarse o hacer movimientos, escogí
un pantalón tradicional que hacia lucir mi trasero y uno sin bolsas para
acostumbrarme a no llevar nada en los pantalones, todos se ajustaban
perfectamente a mi nuevo cuerpo, era otra nueva experiencia para usar
pantalones ajustados y no depender de llevar algo en los bolsillos.
Hablando de ajustados, aprendí
por experiencia lo que era tener "gorditos",
"chaparreras" y "rollizos".
así que necesitaba algo para eliminar
o disimularlos, así que fuimos al área de ropa
interior, Beth me hizo probarme por encima los brassieres, Beth me hizo escoger
mi bodyaire y un bodymagic, unas
fajas de control, debía acostumbrarme a llevarlas, le había dicho
que en mi último cambio de casa los había perdido, la historia que
manejaba era que mi esposo me había dejado y necesitaba un trabajo para seguir
adelante; en lo que más nos tardamos fue en los zapatos, encontré el gozo de
ponerse y quitarse zapatos, conseguí los zapatos de 5 cm. eran hermosos y
cómodos.
Esa tarde fui muy feliz por primera
vez en mi vida, regrese a la casa y guarde mis cosas antes de que llegaran mis
hijos, Beth me llevó hasta mi casa y me despedí de ella, ahora éramos amigas,
ella quedo de pasar por mí al otro día.
Como siempre a mis hijos no les
importó que estuviera en casa.
**
Paso la semana y llego el fin de
semana, había crecido y aprendido nuevas cosas, pero sobre todo había adquirido
una nueva actitud de vida, Beth ahora era mi mejor amiga y compartíamos muchas
cosas, ella sabía de mi problema y seguíamos apoyándonos.
El día viernes tome un nuevo impuso y
me mostré ante mis hijos como una mujer, mis hijas no se sorprendieron tanto
porque habían estado espiándome mientras me probaba mi ropa nueva, mi hijo fue
quien se sorprendió de verme con la ropa de su madre, siempre le gustaba llevar
un vestido halter estampado con flores amarillas y rosas, porque mi
suerte me llevo a al ático para encontrar toda la ropa de ella, de un
momento a otro llene el closet nuevamente con su ropa, ahora era mía y le daba
una nueva oportunidad a la ropa para ser usada nuevamente.
Preparaba la mesa y les grite que
bajaran para cenar, que cenaríamos juntos, mi voz seguía agudizándose más
mientras pasaban más días, así que fingí engrosarla.
Cuando bajaron todos y me vieron
parado frente a la cocina con el vestido favorito de su madre y sus zapatos
preferidos, vi sus expresiones de asombro y alegría, por ver
nuevamente la imagen de su madre.
Hablamos por un par de horas sobre mi
nueva actitud de vida y lo que sentía por ellos, lo que estaba haciendo era por
ellos, mi hija mayor descubrió una vieja foto de su madre y nos dimos cuenta
de que mi imagen era muy parecida a la de su madre verdadera, éramos como
hermanas gemelas, al mostrarme una foto con la misma ropa que estaba usando,
noto que a mí me quedaba mejor que a ella y mis piernas eran más bonitas.
El fin de semana conviví con mis
hijos más de lo que había imaginado, me aceptaron tal como era, mi hijo me sorprendió
a decirme mamá sin darse cuenta, fuimos de compras a la tienda de saldos, les
compre un poco de compre y cosas que necesitábamos, por supuesto que
compre la herramienta que nos hacía falta, mi hijo le gusto que los dos compráramos
juntos esas herramientas, a mis hijas les enseñe como comprar ropa y en que
fijarse, disfrutamos juntas probarnos ropa y zapatos, también juntas
compramos toallas femeninas, se sorprendieron de saber que yo sabía mucho sobre
el tema, Beth se encargó de enseñarme, solo compartí lo que aprendí.
El día domingo hable con mis
hijas para comentarles que había decidido aumentarme los pechos en la próxima
semana después de que acabara el curso, ella estuvieron de acuerdo en que
lo hiciera, les dije que sería una inversión y eso aseguraría un buen empleo.
Mi vida se tornó buena y agradable,
en cada clase aprendía nuevas cosas y las ponía inmediatamente en práctica,
ahora podía caminar sin problemas con zapatos de 10 cm, para mí era un gran
logro un éxito y un logro, también era un logro el sentarme correctamente y el
mostrar una imagen poderosa al desenvolverme con otras personas, el aprender a
usar falda y tacones había sido la mejor experiencia de mi vida, también había
aprendido a usar toallas femeninas, pantimedias y ligeros, que me daba plus a
mi experiencia.
++
Llegó el último día del curso, usaba
el mejor traje sastre de mi esposa, usaba pantimedias obscuras y ropa interior
roja, mi cabello lucia pulcro e impecable, mis uñas perfectas, olía
discretamente a flores, mis zapatos nuevos de 10 cm hacían lucir mis
pantorrillas, ahora sabía maquillarme y lucía una perfecta cara, eso me daba la
seguridad de hacer bien mi trabajo, había superado todas las pruebas y
condiciones requeridas, sabía que tenía más y mejor que muchas de las mujeres
que llegaron hasta el final, en varios aspectos era mejor que ellas.
Primero recibimos nuestro
reconocimiento y luego nos dirían quienes habían conseguido el empleo, entre
las personas que estaban en el podio de entrega vi a la mujer que me haya
entrevistado.
Por supuesto que no me reconoció,
pero si yo a ella.
Fui por mi reconocimiento, camine, subí,
di la mano y baje como toda una dama, sin caerme y sin exagerar mis
movimientos. Me senté como era debido y mantuve mi postura como me enseñaron.
Entonces con gran emoción fueron
diciendo los nombres de las que se quedaron con las vacantes.
Beth si aprobó y se quedó con el
puesto de jefatura que tango deseaba. la felicite por su logro, pero no dijeron
mi nombre, por un momento me desilusione, pero faltaban las vacantes
especiales, las de asistencia gerencial, fui el último nombre que dijeron, Beth
me felicito y fui a recoger mi contrato para firmarlo y entregarlo en la
oficina de recursos humanos donde me había llevado a tonar el curso, la
reclutadora si sabía quién era, cuando le ofrecí la mano ella me ofreció su
mejilla y le di un beso, la hacerlo me dijo al oído, siempre supe que podrías
ser una magnifica asistente.
++
Llegó el día lunes ya acostumbrado a
mis nuevos pechos y traía el mejor traje sastre de mi esposa, llegue a la
oficina de RR.HH. la reclutadora hizo todo mi tramite de ingreso y como me
había dicho nadie debe saber quién era, ella había modificado mi documentación
bajo el nombre de Heather Swan black, licenciada en negocios, casada con 3
hijos.
Con amabilidad me indico que no
usaría uniforme ejecutivo porque la compañía solo pagaba por los uniformes a
empleados de nivel 0, como yo era nivel uno personal de asistencia gerencial,
no tendría que usar mi propia ropa, así que me dio los vales para comprar
mi comida en el comedor del edificio, me deseo buena suerte y me llevo
hasta el piso 41 donde trabajaría con la gerente de finanzas, me advirtió que
ella era la más enérgica, estricta y severa jefa que había en el edificio, me
contó que yo era la quinta asistente que llegaba a trabajar en 3 meses y
había corrido a 5 de sus empleados asistenciales por no comportarse a la
altura, ese era el motivo por el cual había apostado en mí, realmente me
felicitó por mi buen desempeño en el curso, pero me advirtió que este era el
mundo real y debía hacerlo mejor que en el curso, para ayudarme me dio una
advertencia muy clara: "jamás, jamás contradigas a tu jefa, no te quejes
haciendo muecas o chasquidos, se la persona más sumisa que puedas y practica tu
sonrisa mientras haces tu trabajo, viste lo más pulcramente que puedas y cuida
tus uñas como cuides tus pantis", .
Con mi nueva credencial de
identificación para entrar al edificio colocada en mi bolsillo fingido de
del saco de mi esposa, me llevó hasta la oficina de mi nueva jefa, en el
trayecto me fue diciendo que el piso 41 era de jefas Gerentes y personal
ejecutivo; donde las decisiones de la empresa comenzaban, nuevamente me
felicitó por entrar a trabajar en ese piso, cuando el elevador se abrió vi por
última vez mi imagen reflejada de una perfecta de una asistente Gerencial, respire,
di mi primer paso firme para salir a mi nuevo trabajo.
**
Con tranquilidad y forma correcta de
caminar avance por la alfombra azul detrás de la reclutadora, ella era una
tabla comparada conmigo, durante el corto trayecto por donde sería mi
nueva oficina, me fui dando cuenta de que efectivamente el ambiente era
ejecutivo y formal, y que todas las jefas Gerentes usaban trajes azules de 3
piezas con elegantes corbatas, alguna de ellas fumaban y tenían sus manos en
los bolsillos de sus pantalones.
Me llevó hasta la última oficina
Gerencial de la esquina izquierda, frente a esa oficina había un pequeño
escritorio con una vieja computadora de escritorio, entre a la oficina de mi
nueva jefa después de la delgada reclutadora, vi a una mujer vestida como las demás
mujeres de ese piso, con traje azul y elegante corbata verde, me miró fijamente
y sentí que su mirada me desnudaba, traía un puro en su mano y me miraba con
severidad levantando su ceja, yo me mantenía mi mejor postura con las piernas
juntas y los tobillos uno delante del otro, con las manos al frente y la mirada
baja porque me había intimidado.
Con el enorme puro en la mano me
indico darme una vuelta, voltee a ver a la reclutadora, ella mordió su labio y
moviendo sus ojos, como diciendo: "lo tienes que hacer el estas, ella es
tu nueva jefa", comencé a girar lentamente hasta regresar a mi
lugar, la reclutadora y mi nueva jefa intercambiaron miradas, vi en la cara de
la reclutadora que pequeña sonrisa, en ese momento me acepto mi nueva jefa y
ella había hecho un buen trabajo, me nueva jefa comenzó a darme sus órdenes
desde su lugar después de que le dio una chupada a su cigarro y lanzo humo por
su nariz y dijo: Swan, no me gustan los hombrecillos llorones, ni quejosos o
melindrosos, usted haga su trabajo bien y yo no meto usted, pórtese bien y sea
bueno conmigo y yo soy bueno con usted, si comente su tercer error se vas de
aquí, usted es de mí y de nadie más, entendió eso? estas son mis reglas y Ud.
me pertenece, su mayor responsabilidad por el momento es hacerme feliz y llevar
mi agenda, no soy exigente como dice todo el mundo, solo que te quiero cuando
te necesite y ahora quiero un café, puedes hacerlo?--moviendo la cabeza le
conteste que si podía--eso es, está bien vamos a probar tu café caliente, te
puedes ir, ese es tu escritorio--señalo con su puro un escritorio frente a su
puerta, en todo momento podría verme y llamarme la atención--siempre lo quiero
limpio y sin papales encima--acepte sus reglas, agradeciendo por haberme
aceptado, gire sobre mis talones para salir, pero me detuvo con una expresión
olvido: ha ..espere podría pasarme el expediente de la Sra. Thomson, está en
último cajón de ese archivero--me señaló el archivero en la esquina de su
oficina, con un poco de miedo hice lo que me pidió, sin doblar las rodillas
haciendo mi máximo esfuerzo para hacerlo perfectamente, abrí el cajón, busque
el expediente, lo saque, me levante sin doblar las rodillas y sobre mis tacones
gire para llevar el expediente, ella pudo ver todos mis movimientos, con la
mayor tranquilidad le entregue al archivo en su escritorio, ella ni siquiera le
tomo importancia y me despidió con un movimiento de su mano.
**
Me acomode en mi nuevo escritorio y
fui a preparar el café, todo era nuevo para mí, pero debía sobreponerme a la
primera impresión, debía hacer bien mi trabajo que dependía de que hiciera buen
café, levante la cara para identificar las áreas, vi el área del garrafón
de agua, la impresora general, el área de fumar, los elevadores y el corredor
que llevaba al área de la pequeña cocina, debía caminar hasta el otro lado de
la oficina para preparar el café caliente, me quite mi saco y me levante de mi
lugar una vez que deje encendiendo la computadora.
Caminaba tranquilamente por el
pasillo cuando escuche un par de voces que se referían a mi como el "nuevo
trasero de Keys", me di cuenta que junto al garrafón de agua estaban dos
ejecutivas de trajes azules hablando entre ellas, escuche un comentario como
"tiene pechos firmes y buen trasero, eso dice mucho", sin prestarle
atención o importancia al comentario seguí caminando hasta la cocina prepare el
café de mi jefa, tome posesión del lugar, todo estaba sucio y las tazas sin
lavar, para mi fortuna había una taza limpia, prepare el café y lo llevé
manteniendo el equilibrio, mis ejercicios de caminar correctamente con un libro
en la cabeza me daban la confianza de hacerlo correctamente, hacia dos
semanas tenía miedo de llevar una taza con tacones de 3cm ahora con tacones de
5 cm lo hacía perfecto y sin miedo, eso era un avance en mi vida
profesional, de regreso por el pasillo de nuevo escuche los malos
comentarios sobre mí de las dos ejecutivas de "trajes azules", sin
importarles que las escuchara dijeron: "tiene boquita linda y pechos
firmes como le gustan a Keys", " si así es, en sus pantorrillas y su
buen trasero dicen que es muy servicial, oye mira ese lindo su traserito es
como me gustan".
Llegue hasta el escritorio sin
derramar una gota a pesar de mi nerviosismo, era un logro para mí,
la suave alfombra hacia tambalear mis tobillos, pude llegar sin
problemas, el hecho de fortalecer mis tobillos me había ayudado a logra mi
primer tarea del día.
La Sra. Keys, leía un documento y sin
importarle que había entrado espero su café, sorbió un poco y después me despidió
con un movimiento de mano, pensé que al menos le habías gustado si no me decía
nada, pero nuevamente antes de salir me pidió un nuevo expediente del
último cajón, lo hice y pensé que debía acostumbrarme hacer eso, le entregue el
expediente y espere a que me diera permiso para salir, ella me dejó salir pero
me llamó la atención: una cosa más toque antes de entrar!!
**
Pasaron 3 meses sin cometer un solo
error, era la perfecta empleada, siempre puntual, siempre pulcra y bien
arreglada, mis escritos limpios y perfectos, jamás pronunciaba una mala palabra
o queja, siempre atenta a mi jefa, siempre en mi lugar.
Ahora tenía la confianza de mi jefa y
hacia muchas actividades importantes para ella, como traerle su desayuno y
hacer resumen de noticias, además de tomar dictado y atender teléfonos, además
de mis tareas asignadas de llevar el café y tener limpia la oficina.
Realmente me gustaba mi trabajo, era
feliz haciéndolo, mi vida estaba equilibrada y feliz al lado de mis hijos,
ahora era una magnifica madre y una buena ama de casa, atendía las tareas de la
casa y mis hijos me ayudaban.
Mi trabajo era perfecto y ganaba más
de lo que esperaba ganar, así que podría ayudar a mis hijos con sus gastos y
comprar algunos gustos míos, para aumentar la ropa de mi armario y comprar
productos de maquillaje, además de ropa interior y zapatos, que más podía
pedir, era una vida perfecta.
Estaba en un estado distraído, con mi jefa me llamó a su oficina, como
acostumbraba toque antes de entrar, me senté en la silla y doble mis piernas
colocando mi pequeña libreta de dictados.
Mi jefa con inusitada alegría me ordenó prepara la sala de juntas grande en el
piso 50, vendría la planilla de la asamblea de socios y todos los gerentes de
todas las empresas del consorcio, iba ser grande la junta, yo tomaría la
minuta, así que me dio una relación con todos los nombres que asistirían,
me ordenó limpiar y arreglar la sala
con flores, preparar todas las cafeteras, adquirir galletas, servilletas y
cucharas, le pregunte qué día seria la junta?, sin mirarme me dijo que por la
tarde a las 5 en punto, eran la 1 de la tarde, solo tenía 4 horas para hacer mi
trabajo, además agrego hacer las carpetas con los temas a tratar, salí de la
oficina como siempre llevándole su expediente, esta vez por traer falda sobre
las rodillas, me pidió sacarlo del cajón alto.
Me concentre para elaborar la agenda de la junta y mande imprimir mientras
solicite las llaves para abrir la sala, luego hable con la florería para que
trajeran las flores, sería la hora de mi comida, en ese momento iría por lo que
me faltaba, pero aún no había pensado en los presentadores que debía poner en
cada lugar, baje a comer y comencé a buscar una tienda de productos para
fiestas, recordé una a 3 calles, traía zapatos de correa al tobillo y eran cómodos,
así que camine tranquilamente hasta el lugar, pero no la encontré camine otras
tres cuadras y pregunte por el lugar, me informaron que estaba a dos calles del
lugar, camine hasta allí y regrese de nuevo ni me había alcanzado el tiempo
para comer debía subir de nuevo y comenzar armar las agendas, me concentre en
hacer eso, y cuando estaba acabando me acorde de los presentadores, pero en ese
momento hablaron de la florería, debía subir al piso 50 para recibirlas, tome
las agendas y subí para al piso 50,
Recibí las flores y las acomode en lugar correcto, puse las agendas y debía
bajar de nuevo por los presentadores y las hojas impresas para cortarlas
y colocarlas en los presentadores, faltaban 35 minutos tenía tiempo
suficiente, pero no contaba con que una de mis medias se corriera, lo descubrí
en el elevador mientras revisaba mi imagen, debía cambiarlas, pero no traía de
emergencia, así que lo único que podía hacer era quitármelas y estar sin ellas,
últimamente la moda en la oficina era estar sin ellas, en las últimas semanas
mis piernas habían mejorado mucho al tomar sol en los partidos de fútbol de mi
hijo.
Entre al baño y me las retiré, sentí frescor y revise que todo estuviera bien
con mis piernas, había invertido dinero en cremas y tratamientos para mejorarlas,
realmente eran bonitas y me alegraba por ello, la falda me llegaba por encima
de las rodillas, eso hacía que lucieran más agradables, los zapatos ayudaban
también.
Salí del baño cargando las hojas y los presentadores, llegue hasta la sala y
comencé a cortar los presentadores y colocarlos en los presentadores de
plástico, desde atrás escuche una voz de hombre que me preguntaba si podía
ayudarme? volteé para ver quien me hablaba.
Era un hombre vestido de traje azul y elegante corbata, tenía barba
perfectamente cortada, me sonría y me pedía con las manos los papeles recién
cortados, sin poder decir que no, deje que me ayudara, yo colocaba los nombres
en los presentadores y el colocaba según la lista que tenía sobre la gran mesa,
sin él no hubiera acabado a tiempo mi trabajo, solo faltaba colocar el último
nombre que yo tenía en la mano, él fue hacía mi para entregarme el presentador
de plástico, él era más alto que yo y lo mire hacia arriba, por un breve
momento nos miramos, pensé que algo de mí lo había incomodado porque me dijo
que necesitaba ir al baño con urgencia, echando su dedo gordo hacia atrás; vi
que se iba al baño, tome aire, me di la última revisión y me coloque en la
puerta para recibir a los gerentes, realmente no sabía quién era el hombre que
me había ayudado.
El elevador comenzó abrirse y llegar los trajes azules, desde mi lugar en la
puerta los saludaba, la mayoría no les importaba que estuviera saludando, se
iban directo a su lugar y se ponían a platicar con sus iguales, no les
importaba si traía media o no, para el caso yo era parte del mobiliario de la
sala de juntas, era como una flor dentro del gran florero.
La sala se llenó y debía ocupar mi
lugar en una silla en la esquina más alejada de la sala, tome mi libretita de
dictados y me senté acomodándome perfectamente en mi lugar, faltaban dos
lugares de llenar, el Sr. David Dickeson Presidente del corporativo, y el Sr.
Grant Dickerson Director presidente de la asamblea corporativa, dueño y señor
del edificio y todas las empresas que ocupaban el edificio.
Todos los gerentes de finanzas estaban presentes entre ellas estaba mi jefa,
que ni siquiera se tomó el tiempo para saludarme cuando entro a la sala.
En el momento que veía a mi jefa, vi pasar por detrás de ella al hombre que me había
ayudado, camino directo a la silla del Sr. David Dickerson, él era el hijo del
Sr. Dickerson, él era quien llevaba las decisiones tomabas por su padre el Sr.
Grand Dickerson, se sentó en su lugar y volteo la cara hasta dar conmigo, yo fingí
no verlo al revisar mi libretita.
Se hizo un silencio y en ese momento hizo aparición el gran Sr. Dickeron, se escuchó
un sonido estruendoso de un helicóptero, vi como bajaba junto con un guardaespaldas,
debía abrirle la puerta con las llaves que traía, corrí para hacerlo, espere a
que entrara y luego camine detrás de él, el aire entraba por todos lados, hasta
lo más profundo de mi falda, la detuve con mi mano.
Me volví a sentar en mi pequeña silla ejecutiva y la junta comenzó, tomaba
dictado en el sistema de escritura Greg, mi madre me había enseñado para mejorar
mis calificaciones, quizás eso era el motivo por lo cual estaba en ese lugar,
no mucha gente actualmente lo usa.
Estaba distraído en un carácter cuando escuche el nombre de Miss. Heidi Swan,
ese era mi nombre actual, levante la cara para saber quién me hablaba,
era mi jefa que me llamaba la atención para contestar una pregunta, con pena
les pregunte cual era la pregunta?, David Dikcerson era quien me hacia la
pregunta, con la misma sonrisa que lo conocí, me volvió hacer la pregunta?
Nos podría decir sus actividades que realizó el día de hoy y
qué pasó para que pudiera completarlas?, me levante de la
silla y con mi pluma en la mano, con mucha pena comencé hablar, organice mis
ideas y dije tal cual sucedió, cuando llegue a donde el me ayudo, me alentó a
decir que él me ayudo, en cuanto acabe de hablar me pidió sentarme, lo hice y
espere en silencio para calmar mis nervios de haber hablado sin detenerme a
tomar aire.
David continuo hablando sobre su punto para cambiar las empresas: vean claro,
lo que hace ella, ella trabaja en equipo, ella es eficiente en lo que hace,
ella es efectiva y no se queja por hacer su trabajo, jamás la deje de ver que
sonreía, eso es trabajar en equipo, eso es lo que tienen que hacer ustedes,
basta de excusas, necesito propósitos claros, quiero que disfruten su trabajo
como Heidi, ella es un ejemplo....ahora necesito sus planeaciones estratégicas
para la próxima semana, en mi correo.
La junta siguió, el Sr. Grant Dickerson solo escuchaba lo que decía su hijo y
asistía con la cabeza, pero cuando llego su memento de hablar, movió a todas
las empresas, anunció que habría la fusión más grande desde la depresión del
50, todos quedaron en silencio, éramos el número 1 en el país, el segundo
conglomerado era pequeño comparado con nosotros, pero fue más sorpresivo el
siguiente anuncio: se estarán pensando porque debemos fusionarnos con el
segundo conglomerado más grande?, por la simple razón de que hace 50 años
cometí un error y la vida quiere que lo remedie, hace 50 años conocí a la hija
del Sr. Hammer el dueño de la empresa rival de mi padre, ahora es el momento de
volver con ella, hemos decidido casarnos en 3 meses, la fusión se debe dar en
menos de ese tiempo, solo será un fusión legal, las empresas seguirán operando
igual, el departamento de finanzas se hará cargo de los detalles--luego me
felicito diciendo: Señorita Heidi, la felicito a usted, es un pilar importante
para este conglomerado, siga así--se levantó y se fue a su Helicóptero, me dejó
pastado con sus palabras, si le importaba y dijo que era importante.
**
Pasaron 3 semanas desde el anuncio, todos los medios hablaban de la boda
financiera más grande, nosotros trabajábamos contra presión, mi jefa había dado
contra mí y mi comentario, estaba haciendo el trabajo de ella, salía una hora
más tarde de lo acostumbrado, todo el día estaba subiendo y bajando para llevar
documentación, hacia reportes y los analizaba, hacia presentaciones, pero todo
el reconocimiento era para ella.
Estaba extenuado por tanto trabajo y en mi casa nuevamente estaban mal las
cosas por desatenderla, los fines de semana trabajaba al doble para poder salir
con mis hijos y pasar tiempo de calidad con ellos, realmente no tenía tiempo
para mí mismo.
Un viernes que me preparaba para irme a mi casa, me hablo mi jefa, corrí para
atender su orden, toque como era costumbre, ella levantó la vista y me sonrió
por primera vez en todo el tiempo que llevaba trabajando, se levantó de su
asiento, tomo su saco y me dijo que tomara mis cosas porque la iba acompañar.
Arregle rápidamente mi escritorio, lo limpie, tome mi bolso y corrí hacia el
elevador donde me esperaba mi jefa.
**
Seguí a mi jefa hasta el auto, me
senté y puse mi bolso sobre las piernas, espere a que subiera mi jefa y avanzo
el auto, me mantuve callado, sabía que no le gustaba que hablara y no pudiera
parar, entonces me preguntó por mi familia, sin hablar mucho le dije que el fin
de semana tenía un juego mi hijo y mi hija mayor me presentaría un nuevo novio.
Me pregunto que me gustaba hacer los fines de semana, escuetamente le dije que
atender a mi familia, me sentí incomodo por las preguntas, pero me mantenía en
la misma postura que subí, me acode un cabello sobre mi oreja y me mantuve
callado, entonces ella volvió a sonreír y dijo, niñita, te conozco bien desde que
llegaste a mi oficina, se quien eres y realmente te felicito por tu trabajo no tengo quejas, siempre humilde y atententa mejor que cualquier de las mujeres que he tenido, tu papel de madre afligida es bueno, conozco pocas " mujeres-madres" que hacen lo que tú
haces, te felicito por ser una linda mujercita, te puedo hacer una pregunta?--moví la cabeza para afirmar:
te he visto que todo el tiempo te la pasas sonriendo mientras haces tu trabajo,
¿por qué cuando entras a mi oficina pones la cara seria?, me tienes miedo? O te
gusto?--apreté lo labios y conteste: le pido una disculpa si le molesta eso,
voy a tratar de cambiar, solo que cuando usted me pide algo pienso que debo
concentrarme en lo que estoy haciendo, soy seria con mi trabajo por que debo
serlo, ya perdí mi trabajo por un pequeño error de actitud, no quiero que me
pase de nuevo, debo poner toda mi atención y dedicación a mi trabajo por más
simple que sea le pongo todo mi amor, lo importante es que pueda ser útil para
la empresa y a su cargo, ahora valoro mi trabajo y quiero ser feliz haciendo mi
trabajo y no perderlo por una tontería--eso contesto su pregunta, se mantuvo en silencio
manejando, hasta que llegamos al estacionamiento del mejor restaurante del
momento.
No
sabía lo que estaba pasando, mi jefa se encargó de detener mis temores, quería
decirle gritando porque me traía allí?, pero no me dejó preguntarle, apago el auto, puso
un dedo en mi boca para detener mi cerebro, luego dijo, no es lo que piensas, no me gustas, solo quiero que me acompañes a la cena de presentación de la novia del Sr.
Grand, solo quiero tener una buena imagen ante del Sr. Grant cuando entremos, tu estúpido
comentario ha subido a hasta arriba y es mejor que nos vean que te considero como mi empleada y
trabajamos en equipo, solo recuerda que "me perteneces" y no vas hacer mas que mi asistente, solo es una estupida cena,
no tienes por qué enojarte!! Sonríe niñita!!--le iba a decir que no estaba
enojada, pero si lo estaba. solo que me hubiera podido decir desde la oficina,
pero quizás yo tuve la culpa por ser débil y no poner el límite de irme a mi casa con mis
hijos, ahora tendría que hablar para decirles que llegaría tarde, acepte ir a
la cena porque era parte de mi trabajo, me baje del auto y busque mi celular en el
bolso, pero no lo traía, lo había olvidado en el cajón de mi escritorio, pensé
que era muy descuidado con mis cosas, con pena le pedí prestado su celular a mi
jefa, ella accedió mientras registrábamos nuestra llegada para que nos
asignaran una mesa cerca de la mesa del Sr. Grand. Para mi suerte me
contestó mi hija mayor, todo estaba bajo control.
**
Entramos y me tomo por la cintura para llevarme hasta la mesa donde íbamos a
cenar junto con otros gerentes, sentí su mano en mi nalga izquierda y que me
decía cerca del oído, "tú eres mía y no lo olvides", realmente sabía que jamás sería de ella.
El mesero tendió mi silla y me senté
cómodamente, puse mi bolso sobre un colgador, me entregó el menú y mi jefa sin
esperarme a que solicitara, le dijo al mesero que trajera lo mismo para mí.
Mire al rededor, vi algunas caras conocidas pero ninguna cara amiga, no vi a David por ningún lado, primero me
trajeron una copa con vino de cortesía y la comencé a tomar, mi jefa se fue de la mesa y se entretuvo hablando con otro gerente, desde lejos vi al Sr,Grant Comiendo
con su futura esposa, se veía que era una buena pareja, pensé que le iría bien
en su matrimonio, había sido una decisión bien pensada.
Comencé a comer cuando me trajeron
los platos, mi jefa seguía hablando en otra mesa sin importarle que estuviera, termine de
comer y tuve necesidad de ir al baño, como estaba acostumbrado le pedía lo lejos permiso
a mi jefa para ir al baño, tome mi bolso y fui al baño, como de costumbre
estaba ocupado, había muchas gentes yendo y viniendo, esperé con paciencia mi turno.
Hice mi necesidad sin problemas,
ahora ya no tenía miedo entrar al baño de mujeres, seguía haciendo mis
ejercicios todas las noches y recientemente había vuelto acomodar todo en su
lugar, agregando unos pequeños vibradores en lugares estratégicos, para tener una sensación muy cercana a la de una mujer, según la información que había encontrado en internet para colocar esos vibradores en los lugares correctos, también habia agregado 5 cm más a mi canal vaginal, para llegar a 18 cm de esa manera lograr una sensación demasiado realista si alguien introducía sus dedos dentro de mi y me volvería loco si pasaba.
Perfeccione mi maquillaje, revise los
detalles de mi ropa y para mi fortuna los tirantes y mis medias estaban intactas después de un día de
trabajo, el brassier y los tacones estaban en su lugar, al igual que los botones completos, estaba tranquilo por que todo estaba
en su lugar; salí para tomar aire fresco a la terraza del restaurante, pensaba en mis hijos,
estaba resignado a que llegaría tarde a mi casa, mi jefa me tenia atrapado en ese restaurante, no conocía bien las calles y era tarde para andar caminando para una mujer sola, realmente pensaba que nunca
había llegado tarde a mi casa, veía la calle cuando escuche nuevamente la voz que me preguntaba si
quería ayuda, esta vez me pregunto si quería un aventón a mi casa?, era David voltee para
ver donde veía la voz.
**
Descubrí que estaba atrás de mí, me
sorprendió verlo, baje la cara y solo le pregunte con nerviosismo ¿qué estaba haciendo allí, le pregunte ¿sí no tenía
que estar adentro del restaurante con su padre?
Entonces me pregunto de nuevo: ¿Quieres
que te lleve a tu casa?--lo miraba a los ojos y sentía que mi respiración era acelerada, no pude negarme a su petición, le dije moviendo la cabeza que si quería irme a mi casa, estaba nervioso y comencé hablar rápido: si, si, si, es que olvide mi celular en el trabajo, yo tengo a mi hija menor en casa en la case de la vecina y no les deje para comer algo, si se!! que soy demasiado descuidada!!, pero mi hija mayor está
en la casa, así que no debo preocuparme, pero no sé quizas yo deba irme, pero no puedo por que tengo un deber con con mi trabajo..quizas si soy una mala madre!!!...--me detuvo en la
explosión de mis ideas al poner su dedo en mi boca para ordenarme que fuera a sentarme en su mesa? , nuevamente mi cerebro exploto, ni siquiera pensé que pensaría
mi jefa, solo quizás no estaba bien ir con él pero mi emoción me llevaba hacia él, pero no podía decirle que no, mi cerebro estaba en corto, simplemente su voz me deshizo y deje que la emoción de mi cuerpo hiciera lo que él me
pidiera, no podía controlar mi emoción, "sabía que era de él" y no podía detener lo que el quisiera hacer conmigo, solo quería estar a su lado.
Deje
que me tomara de la mano y me llevara a su mesa, sentí humedad en mis pantaletas, pero sabía
perfectamente que no podía eyacular, debía controlarme, jamás había conocido a
un hombre alfa como él y me gustaba mucho y no podía negar que mi cuerpo me delataba, solo pude arreglar mi fleco mientras caminaba atrás jalado por él.
Esa noche estuve en la mesa
principal y todos me veían, pero yo solo veía a David y a los personajes de esa mesa, el Sr. Grand era un magnifica persona, igual me impacto la
personalidad varonil que tenia él, tenía algo que no podía explicar, podría hacer todo lo que él
me dijera sin cuestionarme, quizas era la influencia de su personalidad Alfa del padre de David que todo abarcaba, la Sra. Thomson eran aún más encantadora, era
femenina y carismáticamente fuerte, tenía que aprender de ella, me invitó a ser una de sus 5 damas de honor, como madrina de ramo de mano, David fue quien me ordenó que podría hacerlo y acepte hacerlo, yo no tenía dinero suficiente para un buen ramo de flores y le externé mi
preocupación, ella con toda la naturalidad me dijo que eso, me lo dejaba a mi
imaginación, que realmente no quería algo muy ostentoso, solo tuviera un lindo toque femenino que yo sabría ponerle.
Como dijo David me llevo a mi casa, se me había subido un poco el vino y
realmente no recuerdo que paso exactamente pero solo recuerdo que perdí mis pantaletas
e hice un buen trabajo, mi adiestramiento riguroso que me hizo hacer Beth había resultado efectivo y
agradable para David y para mi también.
++
En la mañana del Sábado tenia jaqueca
y me pare tarde, mis hija preparaban el desayuno y me hijo se había ido prepara
su partido de fútbol que sería por a medio día, mis hijas me recordaron que
había prometido ir a su partido.
No me quería parar, pero el teléfono de mi recamara sonó, era Dick, no pensé
que tan pronto me hablara, no sabía que decirle, me explicó que ese día por la
tarde sería la prueba de vestido para las damas de honor, era importante que me
presentara, le dije que tenía que ir a juego de mi hijo y también era
importante, me propuso que iría conmigo al partido de mi hijo y después iríamos
a la prueba de vestido, le pregunté dónde estaba, él me dijo que frente a mi
casa.
Me pare de inmediato y observe por la
ventana, él estaba parado frente a mi casa y me saludaba con su mano.
Yo lo saludé y me di cuenta de que la
camiseta de pijama que usaba mostraba de más mis pechos, me tape y cerré la cortina.
**
Mi hija se encargó de abrir la puerta
y dejarlo pasar, yo me vestí con un pantalón vaquero, con una camiseta de tirantes
y la camisa de lana de mi esposa, arreglé lo mejor posible mi cara, me puse los zapatos de plataforma de corcho de mi esposa, arregle el fleco de mi cabello y solo me puse unos
aretes de arracadas.
Hice mi revisión, todo estaba en su
lugar, mis pechos se mostraban agradables y los tirantes se mostraban fuera de
la camiseta y se veían sexy, mi trasero se mostraban la líneas de mis
pantaletas sobre el ajustado pantalón de mezclilla de mi esposa y eso también
era sexy, no me daba pena mostrarlas porque sabía que le gustaban mis dobles
nalguitas y según David era los mejores que habia visto en la empresa, lo tenía en mis manos y no lo iba a dejar ir.
Baje para ver a David, sería un buen
día.
Una noche llegó con aliento alcohólico y se acostó a mi lado y sin esperarlo tomo mi pequeño pene y mis testiculos en una sola mano y me los aplasto sin querer, sentí mucho dolor, pero me aguante, al siguiente día lo volvió hacer y así hasta el 5 día donde ya no podía caminar.
Por no tener dinero fuí a una clínica particular, la doctora me atendió en 5 minutos por que tenia otro paciente que atender me recetó unos calmantes y un producto derivado de corticoide, antes de salir a su otro paciente, mientras hablaba escribía mi receta, luego me pidió salir de su consultorio por que se tenía que ir a una cirugía de emergencia, me pidio verme en mes cuando regresara de sus vacaciones.
