sábado, 15 de febrero de 2020


En esta oficina, Es mucho pedir para una asistente un buen trasero y que tenga inteligencia?--dijo mi jefe, dando un portón al entrar a su oficina.


Era evidente que estaba enojado, deje pasar un rato para entrar a su oficina, tenía que ir a que me firmara un documento.


Toque lentamente y espere a que me diera permiso, abrí lentamente y vi que mi jefe estaba con la cara sobre su escritorio, le pregunte si se encontraba bien?, con su mano me indico que me sentara en una de la sillas.


Sin verme dijo: por que las chicas que me mandan para que trabajen no son como tu?


Acomode mis lentes y Corrí mi cabello hacia una de mis orejas para poder verlo mejor y le pregunte como era yo?--en ese momento se levantó su cabeza del escritorio y me vio con una cara de asombro y contesto mi pregunta: pues así como tu eres, tranquilo, sonrisa agradable, ojos agradables, servicial e inteligente, si pudieramos mejorar tu aspecto y bajar un poco de peso, quizás la empresa se ahorraría unos pesos y el departamento tendría una buena asistente.


Le pregunte si el pensaba que yo podría ser su asistente? y de esa manera podría aumentar mis ingresos, mi jefe volvió a sonreir y con una cara de sarcásmo dijo: por supuesto que si, tu eres perfecto para el puesto, nadie tiene que saberlo, solo tu y yo, que te parece si mañana probamos que puedes con el puesto, crees poder hacerlo?

Tome mi tiempo, me mordí un labio y dije con decisión que si podría hacerlo, pero le advertí que realmente fuera honesto conmigo y si no daba lo que el quería no se burlaría de mi o haría que otros se rieran de como venía vestido.


Mi jefe para dareme confianza dijo: no tienes de que temer, realmente pienso que lo háras bien, Toma tu tiempo para llegar a trabajar mañana y ya veremos, te prometo que nadie en esta oficina tiene por que reirte de ti, tienes una bonita sonrisa, mañana ya veremos y te daré mi opinión sincera. 

oo

Camine directo a la oficina de mi jefe, había llegado muy temprano y cuando llegó ni siquiera me vio, paso de largo para llegar a su oficina.


 Gran parte de la noche trate de hacer mi mejor trabajo, compartía un pequeño departamento con mi mejor amiga Beth, pero ella estaba de vacaciones y no podía ayudarme con mi reto.



Después de dos horas de viaje en transporte público, tome un baño para prepararme para lo que tenía que hacer.


En la habitación de Beth tenía lo necesario para ir a trabajar como quería mi jefe.

Sabí que Beth tenia una peluca de pelo real en color rubio, que era el color de mi cabello, sabía algunos de sus trucos para maquillarse y levantarse sus pechos, ella realmente no tenía pechos, ni caderas, yo en cambio por ser rellenito tenia exceso de grasa y cadera.
Beth vendía ropa interior por catálogo, así que tenia algunos pedidos devueltos, entre ellos tenia una faja reductora y un bra levantar los pechos, los usaría para mejorar mi imagen, pero antes tenía que quitar lo que me sobraba y levantar lo que me faltaba.

En baño relajante depilé todo mi cuerpo y lo suavece lo mejor que podía, usando loción suavizante.


por mi falta de experiencia, sentí dolor al subir mis testículos y meter sobre si mi pene, pero después de varios intentos obtuve lo que quería, después usando un tubo de pegamento permanente fuí pegando la piel del prepucio hasta lograr unos buenos labios vaginales, habia aprendido esa  técnica  de mi hermana cuando le ayude hacerle ver que su novio era un frívolo.

Al finalizar me gusto lo que veía, ahora tenia un vagina muy realista, como de niña, si alguien me tocaba e introducía un dedo no la podía diferenciar de una real.


Me puse unas pantaletas nuevas que se ajustaron perfectas a mi cuerpo, era lindas y suaves, eran en V y hacían atrativa mi cadera.

Seguí con el método para aumentar mis pechos, Beth tenía un ungüento en base de raíz de madragora y aceite de pescado, para darle volumen a sus pequeños pechos, con un masaje vigoroso por 15 mintuos el unguento hacia efecto y sorprendetemente Beth aumentaba sus pechos en dos tallas y dos copas, al menos, me puse lentamente el liquido frio y comencé el masaje, al principio fue un poco agradable pero conforme pasaban los minutos y aumentaba el volumen, se tornaba más agradable e intenso el masaje, sentía mucha sensibilidad en mis pezones que crecieron al máximo.



Al ponerme un bra de Beth tuve que alargar los tirantes para que pudiera soportar el tamaño de mis pechos, pero en esencia se acomodaron perfectamente en el bra.

Ahora que tenia el cuerpo de mujer debia encontrar la ropa adecuado para lograr el reto de mi jefe. 


Tome como mio el closet de Beth, me prove toda su ropa para decidir que usar para ir  la oficina, cuando decidi que usar pasaron al menos 3 horas tome un descanso y prepararme de comer algo, mientras cenaba la puerta tocaron a la puerta, vi por la rejilla, era el joven de mantenimiento, me preguntaba si tenia un poco de azúcar, decidí probarme, si el no descubría entonces estaba a un paso de lograr mi cometido, usaba una falda corta de mesquilla  y una blusa de mangas de burbuja y resorte a la cintura, el escote eran en V y podría ver parte de mis pechos aumentados, era un buen momento para probarme, así que abrí y lo deje entrar mientras iba por la azucar, le explique que yo era la hermana de Beth, el acepto mi explicación sin dudar, pude ver que le cause tensión en sus pantalones, antes de irse me invito a tomar algo, pero lo evadí al decirle que tenia novio.
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Durante dos horas de viaje al trabajo aumente mi confianza y me tranquilice al caminar y moverme entre otras mujeres, sin siquiera importarles, para ella yo era otra mujer en ropa de oficina, habia decidido usar un traje sastre en color gris, medias transparente y zapatos ejecutivos altos de correa al tobillo, un juego de collar y aretes de perla, el reloj de Beth, una pulsera un anillo, su perfume caro y su viejo bolso de marca


La falda me llegaba por arriba de mis rodillas y era buena para caminar sin problemas, la falda maximizaba mi cadera y ajustaba mi cintura, me daba un bonito reloj de arena. 



oo



Me quede paralizado antes de llegar a la puerta de la oficina de mi jefe, sentía miedo y quería irme corriendo, pero antes de llegar, el salio de su oficina y choque con él,  el me pidió disculpas por empujarme , pero se la hacia tarde para llegar a su junta y también se disculpo por tirar mi cuaderno de notas, yo con pena lo iba a recoger y chocamos las cabezas, volvió a pedirme disculpas, yo también le pedí disculpas, en ese momento al verme a los ojos comprendió todo y sin esperar alguna explicación de mi parte me pidio acompañarlo a la reunión directiva, me pidió ir detrás de él hacia el al elevador al piso 41, camine tras de él lo más rápido que me dejaba mi falda y zapatos, pero antes de llegar al elevador, se sumo la Sra. Brow, gerente de compras y comenzaron hablar sobre cuestiones de trabajo, la gerente al darse cuenta de que yo venia con mi jefe, me pregunto si yo era su nueva asistente, ella con sarcásmo le dijo que el departamento de RH,le había hecho justicia, y se dirigo a mi diciendo que realmente él era exigente con su personal y debía acostumbrarme a los malos tratos. 

Me ofreció su mano y yo le dí la mía con suavidad que tenía las puntas de las uñas pintas de blanco y le dí el nombre de Beth, ella para darme un cumplido me dijo que realmente tenía una agradable sonrisa, mi jefe para evitar que siguiera hablando conmigo, dijo: solo espero que pueda cumplir su trabajo, realmente no mi importa lo que sea bonita o vista con formalidad o tenga buenas piernas o un gran trasero, eso a mi no me interesase lo dejo a los envidiosos, eso no es importante para mi, pero dejame decirte que para la mayoría de los clientes y gerentes de esta empresa si es importante.

Llegamos al piso y salimos para llegar a la junta con retrazo, mi jefe me ordenó sentarme una pequeña silla en una de las esquina para tomar la minuta, fuí a mi lugar y mantuve la postura correcta durante toda la junta, con las rodillas juntas, los tobillos uno delante del otro y las piernas de lado, esa era la mejor postura que se me daba. 

 
Sabía que Beth estaría orgulloso de mi por tomar una perfecta minuta y mostrar una verdadera imagen de asistente ejecutiva.

Pude ver que algunos de los gerentes no podían evitar verme, así que me mantuve haciendo mi trabajo evitando tener contacto visual. 


La junta termino y ahora sabía más cosas de la empresa y sabía que estaba en una buena empresa, durante los próximos cinco años tendríamos muchos proyectos por hacer, además el presupuesto para contratar nuevas vacantes estaba autorizado, pense y me alegré que ahora mi jefe tendría la asistente que el necesitaba y no alguien se hiciera pasar por una asistente.

La junta habia sido muy productiva y necesitaban la minuta ese mismo día, mi jefe se comprometió que yo la tendría por la tarde.
Bajamos a nuestro piso con junto con otros 5 gerentes, jamás me había saludo con tanto entusiasmo,  mi jefe le explico que me había encontrado entre sus empleadas de apoyo a recepción y me había dado oportunidad de elevar mi nivel a asistente gerencial. 

Llegamos hasta la oficina de inmediato me asigno el escritorio frente a su oficina me ordenó acaba la minuta y mandarla a todos los jefes, unos minutos después llegó un cliente importante para atender, hice el mejor trabajo para asistirlo mientras hablaba con mi jefe, le traje un café y un cenicero, además del expediente de facturas y contratos. 
Firmaron un nuevo contrato y tuve que hacer correcciones al contrato hasta que quedaron de acuerdo, antes de irse el cliente alabó el buen gusto de mi jefe. 

al salir el cliente ya tenía otro esperando, de igual manera lo atendí y serví a mi jefe, cuando salió de la oficina me pregunto si ya tenía la minuta, le afirme que ya la tenia terminada en unos momento se la iba a enviar para que la revisara, entoces me pidio un expediente de un cliente de los archiveros inferiores, me levante y fui a sacarlo para darselo en la mano, al entrar me di cuenta de que el gerente de operaciones habia entrado sin darme cuenta, le pregunte si quería algo de tomar, me indico que un cafe, fui hacerlo y se lo puse en el escritorio, continue con mi trabajo y mande la minuta. 

el gerente de operaciones se fue y me volvió a llamar mi jefe, necesita con urgencia copias, así que me dedique ha sacar copias hasta la hora de la comida, le pregunte a mi jefe si podía ir a comer, el vio su reloj, se levanto de su escritorio y  me dijo con entusiamo que me invitaba a comer.

Después de 5 años de trabajo por fin habia entrado al lujoso restaurante frente al edificio corporativo, mi jefe se portó amable conmigo y en varias ocasiones mientras caminábamos me tomo de la cintura para indicarme hacia donde caminar, me colocó la silla y me indico que podía pedir lo que yo quería, lo hice pero sin exagerar en la cantidad que pedia.

mientras hablama mi jefe, me di cuenta que era más agradable de lo que decian la mayoría de empleados, supe que estaba pasando por una crisis personal, por que su novia lo habia abandonado, su hermano era artista afamdo y lo invitaba a sus exposiciones y tendría una en esa semana. 

Regresamos al oficina, para mantener mi perfil bajo debía entrar al baño de las mujeres y arreglar mi maquillaje, lo hice y regrese a mi lugar, le entregue las copias y me pidio trabaja con él para ordenar los expedientes de contratos. 

Al final de la jornada, ambos estabamos muy cansado, yo habia asumido cual era mi papel como asistente, y estaba contengo en hacer mi trabajo, pero aun me faltaba mi última prueba para ocupar mi nuevo puesto laboral, mi jefe con mucha calma y compresión, me enseño una cualidad importante que debia tener como asistente, esa cualidad implicaba ser profesional si lo asumía en una posición no personal, solo era parte del trabajo el saber como relajar a mi jefe. 



Aprendí por que era importante el usar zapatilla y falda, esos elementos facilitaban mi trabajo.  




Nunca hubiera sabido cuan profunda era mi garganta si mi jefe no me hubiera enseñado el como usar mejor mi boca, con el mejor lápiz labial que tenia, realmente fue feliz en esa oficina, dando lo mejor de mi. 

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