Sumisión y Sacrificio: La historia de Miss Heather Merry Turner: el inicio, todo comienza en un pueblo de los años 50´s. en Centro de los estados sureños...

El inicio

Mi jefe 

me había recomendado para hacerme cargo de la zona sur del país, a mis 21 años despues de terminar la preparatoria ya era vendedor profesional, mi jefe era com un padre decia  que podía vender todo lo que me dieran para vender, entonces me dijo: pienso que uste ya tiene la experiencia para se vaya a a la región sureña del país!. 

No sabía porqué los mejores vendedores de esa empresa no quería vender en esa región?, durante mí capacitación de 21 días había escuchado que varios vendedores habían desaparecido sin saber a donde se habían ido, pero lo raro era que las ventas que habían realizado antes desaparecer habían sido las más grandes ventas, así que mí jefe me dijo que solo era una leyenda urbana y que realmente era una buena región para vender madera ya que la mayoría de los muebles de las casas eran de madera de estilo tradicional americano, era antiguas pero a la vez modernas, había pueblos muy tradicionales que no les gustaban los vendedores, las casas de  apuestas eran los lugares que frecuentaban dueños de ranchos, minas y mobiliarias, eran el mejor lugar para conseguir clientes potencialmente importantes.

Decidido a hacer mí propia vida en las ventas, ya que mí padre alcohólico no había podido darme una carrera universitaria, quería  destacar ante mí familia como una persona respetada y con mejor posición que mis gordas hermanas y primas pobres.

Mí padre siempre dijo en sus estados de sobriedad que no lograría ser lo que tenía que ser al menos que aceptara lo que era, que yo era lo que decía de y no pasaría de un pobre hombre si seguía a su lado—nunca  entendí lo que me decía, yo solo quería demostrar que podía trabajar

como vendedor era una buena profesión como el lo hizo, sacando a su familia adelante como el hombre de la casa, ese era mí ejemplo y lo que anhelaba a ser.

Una vez concluida mí capacitación en los precios y tipos de maderas, estaba listo para mí primer viaje de negocios, tome mí maleta, metí mí único traje de oficina, compre mí boleto de autobús y me dirigí al sur.

**

En el primer pueblo vendí mucha madera barata para minas, hice buenos clientes, eso me dio una ganancia baja pero aceptable, seguí mí camino pase 10 pueblos sin vender nada, otros 10 vendiendo más madera barata, había perfeccionado mí técnica, pero conforme iba avanzando por la región los pueblos se iban tornando más tradicionales, los hombres eran los que trabajaban y las mujeres en sus casas,  pero aun veía algunas mujeres trabajadoras de oficinas o tiendas, como me habían dicho, las casas de apuestas eran buen lugar  para vender, mí primer venta importante llegó al apostarle a un hombre de traje vaquero sureño a la carta 21, me compró una buena cantidad de madera fina.

Recibí mí cheque por mensajería, era una buena suma para seguir mí viaje de negocios, tome un autobús de pasajeros de dos ejes, el número era el 4141 para el siguiente pueblo y  tenía la seguridad de que lograría mí venta número 41 de mí viaje; presentía que mí suerte iba  cambiar y con ella mí vida también debía cambiar, pensaba en conseguír una novia, comprar una casa para casarme, tome el camión por la mañana y habían pasado 5 horas aburridas en pequeñas carreteras de dos carriles, los campos abandonados pasaban por

ventanilla, cuando por la ventanilla del camión ví un letrero que decía próxima salida a Stepford Ville  habitantes 1000, 1 mujer por cada 100 habitantes, Bienvenidos,   vi el mapa íbamos rumbo al norte y ese nombre de pueblo no aparecía, se suponía que el 

pueblo más cercado estaba a 3 horas, no a 5 horas, camine hasta el chofer del autobús, resulto que era una mujer de color y bastante rubusta, su apariencia era más bien de boxeadora, pero al hablar su voz era pequeña, le pregunte a donde estabamos, ella me dijo que estábamos en centro de la mágica y bella región sur, le pregunte que había visto un letrero con el nombre de Sthephord ville, ella me aclaró que por radio le habían informado de que la carretera 69 estaba atascada por un accidente y había tomado la 41 para llegar al otro estado sin contratiempos, le dije que yo no quería salir del estado por que no me correspondía hacer ventas fuera de la zona  sureste.

La mujer me dijo que era mejor no bajar en los pueblos que no aparecían el mapa, que tenía la orden de no detenerese en esos pueblos por la seguridad de los pasajeros  y en tres horas más estaríamos fuera del estado, si no quería salir de esa zona debía bajarme  hasta la ciudad del norte y luego regresar pero yo le dije que quería ir a Sthephorville y que estaba proxima la salida para el pueblo, le dije que no tenía el dinero para tomar otro autobús al sureste para a completar mí viaje, la mujer bajo mí insistencia

acepto bajarme bajo mí responsabilidad si me pasaba algo sobre la carretera ya que no su autobús no entraría al pueblo, hasta el último momento la mujer chofer me advirtió que no lo hiciera, que sería mejor llegar al norte y luego regresar por la otra carretera,  me volvió a mencionar la leyenda urbana de que varios tipos vendedores que se bajaron jamás regresaron, me reía de ella diciendo que había llegado hasta allí sin que sucediera nada malo, le dije que esos tipos quizás no eran tan buenos vendedores que yo y se largaron para no vender más.

Le dije que no creía en eso, le dije con sarcasmo que quizás encontraron una linda mujer y se casaron para ser felices, la mujer se sonrió con burla y abrió la puerta del autobús para que me bajara.

Baje del autobús y entre el polvo que levantaba vi como se iba, cuando deje de escuchar el motor del autobús y el polvo bajo al suelo, observe alrededor de mí, no se escuchaba ni un pájaro, todo estaba en tranquilidad, solo una nube negra de de lluvia advertía que llegara hasta mí en menos de una hora, se veian los campos de trigo apunto de cosecha y las bardas blancas de los pastizales con caballos dentro de ellos,

Camine un poco más hasta la intereccion de caminos, un letrero de madera anunciaba que estaba por entrar al Sthephorville nuevamente vi el anuncio de que había una mujer por 1000 habitantes, el letrero era adornado con una bella mujer de cabello rubio y diadema rosa.

Camine durante media hora y no veia llegar el pueblo, la lluvia me había alcanzado, no importaba si corria por que estaba totalmente empapado, después de una hora por fin llegue a un bonito 
pueblo de casas de madera, muy tradicional a la usanza de los años 50´s, habia tiendas de rifles, ropa, comida,  restaurantes de comida rápida y una pequeña cantina, pase frente a la 

comisaria, uno oficial con lentes me 

observo mientras iba hacia a él para 

preguntarle por el hotel, pero antes de 

que pudiera preguntar el oficial me dijo 

que les gustaba los forasteros, ni los 

vendedores, yo era las dos cosas, estaba 

en problemas, pero lo que más me 

sorprendió que la voz del oficial fuera 

aguda como el de una mujer, aunque usaba  el cabello corto y no se veia que tuviera pechos.

Me puse a la defensiva, le dije que solo estaba de paso y no quería causar 
problemas, le dije que era representante comercial de maderas finas y no un vendedor cualquiera, el oficial sin quitarse los lentes, vio mí identificación y cambio su actitud, dijo: mire amigo, por aquí tenemos mucha madera y no necesitamos más, pero quizás el hijo del viejo Will necesite algo de madera para su nuevo negocio, 
recuerdo que el me dijo que cuando viera una persona como usted le avisara, quizás pueda verlo mañana por que el viene todos los viernes al bar,  ya es tarde para que regrese, es mejor que se quede en el pueblo, no tenemos hotel, pero si  una casa de huéspedes que la atiende la vieja Merry, al final de la calle hay una casa de madera tres pisos, pase el jardín y solo toque la campana, ella le va abrir, diga  que yo le autorice ir allí, si mañana no encontró lo que quería, será mejor que se vaya o sino me hago cargo de usted, entendió?—pense que con su suave voz su advertencia era una broma, pensé que estaba loco.

Camine entre la calles mojadas del viejo pueblo hasta la casa vieja casa de estilo romántico para huéspedes, pase el elegante y bien podado jardín,  toque y una linda mujer de cabellos rubios salió, era la misma figura del letrero de bienvenida, mantenía su linda sonrisa esperando a que le explicara por que estaba allí y quien era, de inmediato le explique que me llamaba Harry Turner y le dije lo mismo que al oficial, le agregué que el me había dado autorización para ir hasta allí, le dije que yo era un hombre de una buena persona y tenía una familia, para darle seguridad era de confiar.

La mujer sonrio un poco por mí declaración, no entedí por que lo hizo, entonces quito su brazo de la puerta y  me invitó a pasar, me explico que estaba a punto de dar de cenar, me dijo que por la estancia sería 100.00 la noche, yo tenía suficiente dinero, así le extendí los 100.00, era una inversión para obtener más, pensé que al dichoso capitán podría venderle buena madera como lo había hecho en el primer pueblo,  la mujer tomo el dinero y lo guardo en sus grandes pechos, ella usaba un ajustado vestido verde debajo de su delantal, a pesar de los años se podía dar cuenta de que fue una linda mujer, sobre todo había tenido un buen trasero que no pude dejar de notar por que iba por delante de mí subiendo una pequeña escalera en mal estado.

Note los bordes de su pantaletas y de los ligeros de sus viejas medias, me ofreció una pequeña habitación sin mucha decoración que daba a la calle, la vieja cama era suave y olía a humedad, el cuarto tenía baño y goteaba la llave, me dijo que podía lavarme y cambiarme antes de la cena, me explico como abrir la llave del agua, tomar las toallas y donde dejarlas, la mujer era extraña en su forma de hablar sureña, pero lo extraño era que su voz era ronca y gruesa.
Me cambie por los únicos pantalones de 

mezclilla que tenía y baje para cenar, allí conocí a 5 hombres rudos que iban a trabajar en el arreo de bueyes contratados por el SR. Horson, realmente no conocían a nadie del pueblo o sus costumbres, solo habían recibido un cheque con una buena cantidad de dinero y la dirección la casa de huéspedes para ser recogidos para llevarlos al rancho Horson hubicado en la zona de las montañas del sur más alejadas del pueblo, en los tiempos actuales todos sabían que ya no había gente con experiencia en el manejo de ganado a la vieja usansa y su trabajo era valioso, se podía decir que ellos eran verdaderos hombres de campo.

La Sra. Merry solo sirvió la cena sin hablar con nosotros, lo que me extraño

fue que me veía con una mirada extraña.

Estaba cansado y dormí bastante bien, escuche pájaros cantar enfrente de mí ventana, escuche la ronca voz de la sra. Merry llamar a desayunar, me levante, me vestí con la única ropa que estaba seca y baje al comedor.

En la mesa descubrí sentada una chica de cabello rubio, perfectamente maquillada con un vestido elegante floreado y un sueter rosa, guantes blancos y  con zapatos de tacón también blancos, realmente era hermosa y perfecta, mientras me lavaba las manos la Sra. Merry me explico que ella era Merry Su la hija del Sr. Horson y venia por sus trabajadores, que no la molestara o tratara de hablar con ella, al ver a la Sra. Merry  dijo que venia por sus ricos panques de pasas que le había prometido y no ser iria sin comerlos, la joven era linda con una sonrisa maravillosa, sus pechos eran agradables, su cintura era pequeña y su cadera grande, el vestido hacia que su figura se viera aun más bonita.

 Me senté en la mesa sin verla, pero  antes de que me sentara me pregunto quien era yo?, le explique que era vendedor de maderas y lo que había pasado con el oficial, que después de desayunar iría a buscar a un posible comprador, los 5 hombres bajaron y se sentaron a la mesa, la Sra. Merry comezo a servir los ricos panques, comimos en silencio, la joven mantenía su agradable sonrisa al comer y no me dejaba de ver.

Terminamos de desayunar, los hombres salieron para buscar sus sillas de montar que dejaron atrás de la casa, me quede con la joven un momento y la señora fue por una vianda de paques para entrégaselas a la joven, entonces con soberbia me ofreció su mano enguantada diciendo que quizás este no sería el mejor lugar para encontrar mí destino, que si era inteligente entonces me fuera del pueblo, le agradecí su comentario y apreté levemente su mano pero ella me la apretó con fuerza, fue extraño el momento, pero lo más extraño fue que su voz también era ronca como la de la Sra. Merry eso contrastaba  con su imagen sumamente femenina y ligera, vi como salía de la casa moviendo su vestido con su lindo trasero, realmente no tenía importancia su voz al verla caminar.

**

Alrededor de las 11 de la 
mañana salí de la casa de huéspedes, prometiendo regresar por mis cosas para irme del pueblo, una vez que haya podido ver a mí cliente y venderle buena cantidad de madera para su negocio, vi una cierta cara de preocupación en la vieja Merry hacía mi, sin esperarlo me dijo que me cuidara.

Tenía la mente positiva y durante el viaje había podido negociar con viejos duros, tenía la experiencia para obtener una buenas ventas en tipos rudos.

Ya con el traje seco y los zapatos limpios, camine rumbo al salón de apuestas, traía mí catálogo de maderas, mis solicitudes listas para ser firmadas, mí pluma fina y tome una flor de un jardín para adornar la solapa superior de mí traje.

Pase frente a la comisaría nuevamente, el oficial me saludo con dos dedos sobre su visera, yo solo hice un leve saludo con la mano, me señalo su reloj diciendo que solo tenía dos horas para irme o sino moriría—fue extraño la forma que me lo dijo usando sus manos.

Comenzaba a llover nuevamente, entre al lugar abriendo la puerta de cristal negro, de inmediato apareció una sala con alfombra roja y unas taquillas con barrillas de acero de enrejado para cambiar los billetes por monedas, me sentía con suerte así  saque un billete de 100 y cambie por monedas, lo mejor era pasar por interés del juego más que de vender.

Del otro lado de la taquilla apareció un joven de cabello rubio con un chaleco negro y corbata de nudo blanca, usaba guantes, le puse el billete en la abertura de la taquilla, el joven me dio 5 monedas y me indico donde estaban las máquinas de juego de manijas, le dije que quería jugar 21, el joven extrañado me dijo que para apostar en las mesas debía al menos apostar 1000,00, entonces me resigne a ir a las maquinas de manija, pero antes de irme le pregunte por el viejo capitán Will; se extrañó más por mí pregunta, pero en voz baja me dijo que quizás estaría en el bar o quizás en lobby de caballeros, pero la entrada valía 100 más las bebidas, saque mis últimos 200 y los cambié, quizás debía invertir un poco más para sacar una buena venta, de esa manera podría tener acceso al bar y al lobby.

El  joven rubio  me dio 20  monedas más, pero antes de dármelas no quito su mano hasta que lo vi a los ojos, me dijo: aquí no queremos problemas, ni forasteros, por su bien mejor váyase, o si quieres una cita fácil este no es el lugar, mejor vete o la policía se hará cargo de ti.

  Con calma espere a que quitara su mano de las fichas, entonces le dije: ando buscando al  viejo capitán will para ofrecerle un negocio, soy responsable regional de maderas Tomson, el oficial de policía me autorizo buscarlo para ofrecerle mis maderas finas, solo voy a estar hoy y por la tarde me voy, estás conforme o desea que hable con su jefe, el joven entendió la situación, se disculpó y agregó un tono raro a “Señor”.

Entre a la sala de apuestas, había poca gente, todos ellos de aspecto pueblerino pero tranquilo, varios de ellos estaban jugando con sus esposas con lindos vestido de rayas rojas y blancas o vestidos floreados; la mesa de 21 estaba cerrada, decidí entonces ir al bar, allí lo encontraría o me darían razón de él, page mí acceso al joven recepcionista y entre al bar, ví que el lobby de caballeros tenía una puerta de madera negra, otro joven muy fornido cuidaba la puerta, llegue a la barra y pedí un wiski seco y puse un billete de 20, el joven que atendía le vi una leve cara de sorpresa cuando pedí mí bebida, pero me sirvió y se quedó del otro lado de la barra vigilando mis movimientos, pero antes de preguntarle por el Viejo Capitan will, el joven me dijo que el capitán me esperaba en el lobby, le hizo una mirada por detrás de mí al joven fornido para que me dejara pasar, tome mí vaso y caminé hacía el lobby, el joven fornido siguió leyendo su revista, sin importarle que entrara, abrí la puerta y entre al lobby, todo los detalles de la paredes, columnas y muebles era de madera fina en color caoba obscuro, la iluminación era indirecta con lámparas de imitación de aceite al estilo sureño, había sillones de cuero negro en grupos de cuatro, había cortinas que dividían las áreas y bajaban la luz aun más de las ventanas, era un ambiente elegante, tranquilo y cálido, con una elegante alfombra en colores rojos y negros; por el ambiente tranquilo parecía que no había nadie, pero escuche una voz al final de lobby, en una sección tapada por una planta de sombra, que me hablaba por mí nombre, la voz era aguda, dijo: Joven Turner, estoy aquí por favor venga hasta aquí.

Camine hasta donde oí la voz, antes de llegar vi que un hombre gordo con un saco de estilo sureño en color café obscuro, sorbata de listón con sombrero de ala ancha en color beige, pantalón de mezclilla y botas de punta, su estilo era de hombre rudo y curtido por el sol, llegue hasta el hombre y le ofrecí mí mano diciendo que era representante de industrias madereras y venia a ofrecerle un gran negocio, la forma en que me presente le llamó la atención, se me quedo viendo como inspeccionando si era una persona para confiar o quizás quisiera hacerle algo, pero decidió que era lo primero, me ofreció el asiento de enfrente con su mano, me senté y puse mí vaso de wiski en la mesa del lado mió, me acomodé mí saco y comencé mí técnica de ventas: Capitán es un honor conocerlo, mí nombre es Harry Tomson y deje decirle que  vive en un hermosos pueblo, lleno de hombres rudos y trabajadores, he visto sus hermosas hectáreas llenas de ganado, es agradable vivir en esta parte del país, muy tradicional y hermosa, pero déjeme decirle que sería una lastima que tanta belleza se pierda solo por talar árboles, pero yo tengo la solución para que eso no pase, es increíble que solo con un poco de inversión en maderas, se pueda salvar sus hermosas tierras, déjeme decirle algo relevante e importante, usted tiene en sus manos a la mejor empresa maderera del país, importamos maderas del Brasil a buenos precios, eso nos hace competitivos, además obtendrá la suficiente madera que necesita, sin incluir gastos de transportación hasta su casa,  tenemos los mejores transportistas, además el transporte esta asegurado contra robos, no es que dija que aquí alla robos, pero ya sabe usted como eso de las carreteras, déjeme mostrarle el catálogo de nuestras maderas…

En ese momento me detuvo  mí speech levantando su mano en forma de Stop, el hombre hablo y dijo: creo que es un maravilloso vendedor y me ha interesado por comprar madera, ha tocado un buen punto para comprarle su madera, pero eso no es lo que yo quería hablar con usted, relájese tome su copa, vamos hablar sobre cosas importantes, el hombre de la voz suave y tranquila, olió su copa y sorbió un poco de vino, tomo un habano de tabaco crudo y lo encendió, eso me hizo tocer y que no me ofreciera uno de sus caros habanos, tome un poco de vino para sacar el mal olor de tacaco de mí garganta.

Dio grandes fumadas sin mirarme, disfruto de su copa de vino hasta el final, yo había detendido mí inquietud de saber lo que me tenía  decir y era importante para mí.

Casi me daba sueño cuando el hombre hablo: Joven!!, usted es como me lo describieron, agradable, atento, sin rastro de maldad, se podía decir que ingenuo, algo regordete y bajo de estatura, no es como la mayoría de los hombres de trabajo que hay por aquí, me dijeron que usted no tenía el carácter para destacar en el trabajo de campo, era más bien como un empleado de oficina o quizás de casa, pero creo que ha superado mis expectativas, veo que usted es un joven capaz, vigoroso, si alegre pero serio en su trabajo, dedicado y entusiasta por terminar su trabajo, determinado a lograr una venta y déjeme decirle que lo logro, hágame un pedido de 500 toneladas de madera de caoba del Brasil, para mí negocio de muebles, pero eso no es importante, le propongo algo más que una simple venta, le propongo una vida sin problemas económicos, totalmente arreglada de comodidades, sin otra necesidad que vivir su destino de vida, sin tener otros  sufrimientos que hacer lo que se le pida, de esa manera obtendrá la seguridad que usted necesita.

No entendía lo que me estaba ofreciendo, pero algo me detenía en mí silla, no podía moverme, quería saber a donde iba allegar todo sus conversación, en mís oídos se habían quedado las palabras: “sin problemas económicos”.

Señor déjeme comentarle que mí hijo tiene una loca idea de poner torres de teléfono, por aquí eso no es un negocio, pero lo he dejado que lo haga para que se distraiga de la muerte de su padre, (que no  el era su padre?), no quiero la misma vida de los chicos de este pueblo para él, el desde que conoció la gran ciudad y estudio, ha sido muy diferente a todos los jóvenes del lugar, trajo ideas extrañas sobre la forma de actuar de los jóvenes, déjeme decirle que desde que se fundo este pueblo hace 200 años, jamás ha habiado un problema al respecto sobre la forma en que las cosas deben ser, sobre todo la posición de los jóvenes, ellos deben ser secundarios y no principales, pero eso tampoco es importante, lo que debe saber es que usted me va ayudar a que mí hijo sea feliz—eso me extraño y levante la ceja, el hombre sin imutarse comenzo a explicarme como iba a solucionar el supuesto problema de su hijo, continuó: mire como le decía, por aquí somos muy tradicionales, el pueblo tiene más de 50 años que no ha cambiado nada, solo por algunas personas ideseables, pero eso lo hemos arreglado, (su comentario me hizo pensar que el problema había sido los vendedores y los habían matado) el gran problema de este pueblo  son las herencias, por que todos somos ricos, pero no tenemos a quien heredar, cuando se fundó este pueblo se hizo por las viejas fuertes y férreas mujeres que llegaron del este, hicieron historia para fundar este pueblo, hicieron sus propias leyes que han subsistido hasta ahora, sin cambio, ahora los tiempos modernos nos están alcanzando, pero aun hay esperanza (que esperanza hay?), por ley solo las personas con vagina pueden tener propiedades, no las personas con pene, según nuestra constitución solo son necesarios para la procreación y el trabajo, no para tomar decisiones y llevar a la familia.

Como le he dicho yo no creo en muchas de sus leyes y tradiciones, por eso mande a mí hijo fuera de este pueblo, pero el esta necio en su negocio y no puedo convencerlo que acepte su destino, pero lo que si puedo es ayudarlo, sin que el pueblo y sus leyes digan que no puede hacer lo que el quiere hacer, verdad Jhon?, del otro lado del salón es escucho otra voz grave que salía de un hombre de traje negro y corbata dorada que leia un periódico , parecia como un viejo banquero, pero por lo que dijo era más bien un abogado: si capitán, por acá no solo las leyes  cuentan para las transacciones!!  Sino lo que diga el pueblo—el hombre se levantó y camino hacia nosotros, se sentó en la silla aun lado mio, se acomodó cruzando una pierna y dijo: Capitan usted sabe que solo una persona nacida en este pueblo puede heredar, no tiene otra opción que vender sus tierras, su hijo raro debe dejar de hacer lo que esta haciendo y ocupar su lugar, como va ayudarle este joven a eso?

El capitán dijo: fui y regrese de la guerra y se que las cosas no son como ustedes dicen, ayúdeme con este joven a que pueda pertenecer a esta comunidad, usted sabe que la hija de Merry Tomson ya no va a regresar, solo debemos arreglarlo—el capitán saco un gran fajo de dinero y lo puso en la mesa donde tenía su vaco vacío de vino, agrego otro fajo que saco de su cartera—el hombre llamado jhon de suave voz, se volvió acomodar en su lugar y en cribó: Capitan usted sabe como son las leyes, he visto que últimamente que el terreno que tiene en la entrada del pueblo esta muy abandonado, Bill me ha dicho que lo quiere arreglar, quizás podíamos solucionar su situación si  le ayuda a amigo Bill—el capitán saco su disgusto diciendo: el avaro bill, ya tiene la casa de apuesta de la mina y quiere otra, eso no puedo aceptarlo, me haría competencia—el otro hombre, se acercó a tomar el dinero y comenzó a contarlo, el capitán se rascó la cabeza y se sobo la panza, entonces dijo con decisión: ok…solo va a ser 3/4 partes del terreno, solo que todo esto se queda en este lugar,  si sale algo mal usted y bill, lo lamentaran con sus manos y su cabeza—eso  último sonó muy tétrico y extremo.

El hombre llamado Jhon termino de contar su dinero y dijo: no se preocupe todo es confidencial, usted sabe que el juez Bill es un buen juez y sabe lo que hace, el también quiere nuevos negocios, solo debe confiar y dejar las cosas en mis manos, el hombre guardo el dinero y se levantó para darle la mano el Capitan, vi como se saludaban usando toda su fuerza, al final gano el Capitan, el hombre llamado Jhon movió su mano para indicarme y decirme que fuera con él, el Capitán me ordeno sin miramientos que fuera con él, como si yo debería hacer lo que el decía, además si hubiera entendido todo de lo que me había hablado, era como un títere en todo este acto de teatro, iba a tomar mí portafolio con mis solicitudes de venta para largarme de ese pueblo, pero el capitán puso su mano sobre ellas y dijo antes de abandonar el lobby, atrás del Abogado jhon: recuerde que hizo una venta conmigo y yo jamás renuncio algo que prometo.

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Salimos del lobby, el abogado de llevaba tomado de la nuca y del cuello, no podía zafarme, pasamos por detrás de la barra del bar, el joven ni se inmutó, ni le interesó en que pasaramos, entramos a la cocina, estaba vacía y salimos a la calle por escalera de emergencia, una camioneta ranchera estaba estacionada, no había nadie en la calle trasera de la casa de apuestas, el abogado abrió la puerta trasera y literalmente me hecho al haciento trasero, antes de que me recobrara, el abogado estaba del lado del chofer y arrancó sin saber a dónde íbamos,  pasamos por la calle principal y avanzamos velozmente por la continuación de la carretera donde había llegado, ví como el pueblo desapareció, solo se veían tierras de cereal y vallas blancas, hasta que me desesperé y le grite al abogado Jhon que donde íbamos? Que se detuviera, el hombre paro abrutamente la camioneta, me pegue contra el asiento delantero y regrese a mí lugar, el abogado estaba enojado, me tomo de los cabellos para darme dos cachetadas, puso su dedo índice frente a mis ojos y dijo: cállate!! tu aceptastes, escuche perfectamente, déjame decirte  que muchas de las mujeres de donde vienes, quisieran la vida que te ofrece el capitán, una casa grande, bienes materiales, una vida fácil, solo tienes que procrear y cuidar a tu familia, también muchas de por aquí la quisieran, el tu quiere ayudar y yo que tu no me gustaría ver tu linda cabeza sobre el asfalto de la carretera, las cosas por aquí son diferentes y hay una gran diferencia entre tener o no tener, tu tienes la posibilidad de tener aprovechala, tu destino es este y te aconsejo que te dejes llevar, realmente no es la malo el capitán, el quiere hacer nuevos negocios con gente ajena al pueblo, pero muy poderosa, eso le va dar un nuevo auge al pueblo, muchos negocios y gente importante visitarían el pueblo, solo que por aquí no les interesa el cambio, a mucha gente le parece atractiva la vida de este pueblo

Tu tienes la oportunidad de cambiar y tener dos mundos a tus pies, piénsalo!! ahora no llores y déjame conducir.

No se como se me quedo la imagen  de mí cabeza en el asfalto, no dejaba de pensar en eso, cuando apareció del lado derecho un gran enrrejado de hierro forjado en color verde, del otro lado se veia un camino empedrado con cedros a cada lado del camino, el abogado abrió su ventanilla se estiro un poco para presionar botón del interfono, mientras le contestaban, movía en su dedo su anillo de oro, se escucho una voz ronca del otro lado, el abogado solo dijo que traía a la nueva alumna.

**

Diez minutos sobre el camino empedrado apareció una enorme casa de estilo ingles con el techo rojo y ventas de madera, era un hermoso cuadro, enfrente de la casa y al final del camino estaba una enorme fuente con un ganso con el pico levantado de donde salía un gran chorro de agua.

La camioneta se detuvo frente a los arcos de mármol de la entrada principal, dos mujeres esperaban al abogado, una de ellas ttraia una bata de doctor, la otra un elegante traje sastre de corte ingles en color azul, su cabello lucia un perfecto chongo alto, pero antes de haber llegado realmente me amenazó el abogado: no tienes otra opción y lo haces por las buenas o realmente yo te voy a asesinar, así que deja de llorar y refunfuñar, en esta escuela vas aprender lo que necesitas, es la mejor del estado, la ha pagado el Capitan y le debes un favor, estas en deuda con él, esta es la última vez que hablo contigo de esta manera, voy a estar al tanto de tu progreso, pero tu no lo sabrás, con el único contacto que tendrás con alguíen de este pueblo es a través de la Sra. Merry, ella te va ayudar en lo que necesitas y no huyas porque te va ir mál, solo acepta tu destino y las cosas van a mejorar, bájate.

Me baje como dijo, pensando que estaba loco y que en cuanto tuviera oportunidad me iria de allí, las dos hermosas mujeres se acercaron para saludar al abogado, el sin verlas a la cara y abriendo su saco y poniendo sus manos en la cintura, hablo algo con ellas, por supuesto que fue una amenaza cordial, solo dio media vuelta, se subió a su vieja camioneta y se alejó de nuevo por el camino empedrado,

La mujer de bata blanca me tomo de los hombros y la mujer de traje me pidió acompañarla

**

No entramos por la puerta principal, me llevaron hasta detrás de la enorme casa, pasamos los establos de caballos, el garaje de autos, un granero y un potrero, hasta un edificio contiguo con un letrero en la entrada que decía Administración Escolar.

Entramos en silencio, pasamos las oficinas aun tenían maquinas de escribir mecánicas y viejos teléfonos de plástico negro, estaban vacías las instalaciones, me llevaron hasta una amplia habitación que parecía la enfermería, la mujer de bata blanca me dijo que era la doctora de la escuela y se llamaba Teresa y podía decirle de esa manera, su tono era  muy amable y me dio confianza, la mujer era hermosa con grandes pechos, pero lo extraño era su voz ronca, me hizo sentar en la mesa de auscultación, me explico que era muy exclusivo y todas las alumnas eran de importantes familias del estado, y tenían estrictos protocolos de higiene, que todas las alumnas que entraban al instituto tenían que purificarse y limpiarse antes de tener contacto con las demás, por el bien del instituto y las familias benefactoras, me dijo que no me iba a pasar nada malo, que era normal para todas las alumnas, yo le iba a decir que yo no era un alumna y que me tenía que ir de allí que era una equivocación, no era la persona que ellas creían, que no era mujer, pero la Directora intervino, y dijo con su dedo: es mejor que no escapes, hay una barda electrificada y guardas que esperan que escape alguna nueva alumna, les pagamos muy bien por encontrar a alumnas renegadas, espero que tu no seas una de esas, veo mucho potencial en ti, el Capitan es un gran benefactor y no podemos defraudarlo, vamos hacer de ti lo que el necesita, y déjame decirte que solo tenemos seis meses en lugar de 14 meses para lograr el mismo resultado, vas a estar bajo mí cuidado personal, nadie debe saber que vienes del mundo exterior, por aquí las cosas son diferentes y yo te voy ayudar adaptarte, aunque seas difícil y llores, lo vamos a lograr, la reputación de la escuela esta en juego, así que no podemos fallar, tu no puedes fallar, la primera regla que debes aprender es que siempre debes ser pulcra y limpia, la segunda regla es que no puedes llegar tarde a ningún   lugar que se te pida ir, jamás deberás quejarte ante mí por ninguna situación, siempre te dirigiras ante mí como Miss Hammer, las demás reglas yo te las voy a ir enseñando, yo te voy a convertir en una verdadera señorita de sociedad, además recibirras una extensa y cara educación como se debe, ahora te vas a quedar con la doctora Teresa Jeringa, cuando acabes con ella se te hará tu recepción a las 7 pm ante todas las alumnas del colegio—la doctora tenía una jeringa preparada y le pregunto si serían 2 inyecciones diarias?, ella dijo que serían 5 y una dotación completa de medicamentos, debían surtir efecto de inmediato, en un mes debía tener resultados y si no era así entonces buscaría a otra doctora más eficiente

La directora salió de la habitación dando pasos firmes moviendo su hermoso trasero, lo extraño era su voz ronca profunda, me daba miedo.

La Doctora me sonrió y me pidió acostarme para recibir mí primera inyección, la doctora me calmo diciendo que solo eran vitaminas para ayudar a mí crecimiento, ella vio mí intención de correr, así que me tomo del brazo y me giro sobre mí y me recostó de espalda, me quito los pantalones y los bajó, sin mucho esfuerzo, me puso las 5 inyecciones una tras otra, sentí que se me adormecían las piernas y no podía moverme, se suponía que serían 5, pero sentí 6 piquetazos en mis nalgas, la Doctora sin esfuerzo me volteó hacia arriba, no podía moverme y solo podía ver de re-ojo lo que hacia, observe que tomaba un tubo de pegamento médico, mientras trabajaba delante de mí a la altura de mí cadera, no sentía nada, me quede dormido por unos momentos, pero cuando acabo, me pidió levantarme lo hice sin esfuerzo o dolor, solo sentí que me jalaban la piel de mí pecho, descubrí que tenía dos pechos del tamaño de una niña de 17 años, uno era más grande que el otro, la doctora me dijo que no podía esperar al desarrollo de mis pechos, solo sería un apoyo, pero en cuanto se comenzaran a crecer normalmente, entonces me quitaría las ayudas, pero mientras debía acostumbrarme a ellos, pero eso no fue lo que más me sorprendió, vi que ahora tenía vagina y mí pene ya no estaba, en vez de eso tenía una hendidura en medio de dos grandes y flexibles labios vaginales, podía estirarlos y regresaban a su lugar, con tecnisismos me explico que mis testículos era importantes y no podía cortalos, así que los había escondido y anclado en mí hueso sacro, de allí no escaparían por un buen tiempo, con el prepucio había hecho una obra maestra para tener una vagina anatómicamente perfecta, tenía un conducto vaginal de 12 cm y al final de ellos tenía expuesta mí zona G, por que mí pene estaba completamente atrapado porque estaba pegado hacia atrás y la doctora me dijo que para no lastimarme debía hacer pipí sentado, pero eso no fue todo lo que hizo para que fuera una obra maestra, ella había puesto dentro de mí zona G un pequeño vibrador que al tocarlo me hacia sentir muchas cosas raras hasta sentir dolor, según la intensidad con que me apretaban, en el borde de la vagina también había puesto una pequeño accesorio digital en forma de una pequeña protuberancia que  al apretarlo el vibrador se accionaba haciendo sentir con más intensidad un vibración que recorría todo mí cuerpo, ella me recomendó que no debía tocarlo si no era necesario, yo pensé que era preferible que nadie lo hiciera sin mí consentimiento, pero yo sabia que la Directora tenía un control remoto para que vibrara sin mí consentimiento.

Mientras de una maleta sacaba algo, me explico amablemente que nadie debía saber que tenía pene, aunque se burlaran de mí o me hiceran abusos debía mantenerme sin decir nada, me dijo que eso le había faltado a la directora decirme, me explico que a los varones que quieren vivir como mujeres no son bien vistos, aunque fuera de una buena familia o fuera una recomendada como era mí caso, me dijo que todo lo entendería después, que mientras hiciera lo que me pedían y las cosas mejorarían, me explico que debía asistir a las clases por la mañana con el uniforme de la escuela y por la tarde podía cambiar por ropa de vestir de diario y asistir a la biblioteca para hacer mis tareas, los fines de semana vendría un camión para llevarnos al pueblo para ver a nuestras familias, la Doctora me pregunto si yo era familiar de la Sra. Merry tompson la dueña de la posaba, por lo que había vivido ese día, lo mejor era que dijera que sí, esa sería mí oportunidad par largarme de aquí solo debía soportar una semana esta pesadilla rara y después me largaría,  la Doctora por fin encontró lo que buscaba en la maleta, un juego de ropa interior de mujer en color blanco, era de algodón sin detalles, solo los resortes eran rosas tenían un poco de encaje, un pequeño moño en frente para saber por donde debía subirlo, la doctora me dio las pantaletas y vio como me las subia, se acomodaron perfectamente a mí nuevo cuerpo, se me hizo un lindo pie de camello, para el bra la doctora me ajusto los tirantes para que no me lastimara las pequeñas heridas que me había hecho a los lados de mis pechos, más de lo debido, me dijo que no hiciera mucho esfuerzo durante esa semana y durmiera boca arriba, me dijo que me había agregado un calmante si tenía dolor, me dijo que todos los días debía estar en su consultorio a las 7 am, 3 pm y 8 pm sin falta y sino llegaba a tiempo entonces tendría que reportarme, solo tenía un minuto de retraso, también me advirtió que jamás podía correr por la escuela ya que las señoritas jamás corren como los hombres, solo caminan apresuradamente sin perder la compostura.

Vi con cuidado lo que hacia para acomodarme el bra y las pantaletas para evitar mis dobles nalgas, se admiró por ser rollizo y tener un bonito trasero natural, también  le gusto el color de mí cabello rojo, por que aunque lo pintaba de negro para evitar las burlas de mis compañeros y la gente, la falta de tiempo por el viaje había olvidado pintar la raíz de mí cabello y tenía un mechón rojo como flequillo, me dijo que me ayudaría a que regresará a su color original y no debía apenarme por eso, muchas de las chicas en la escuela se lo pintaban de rojo y el mio era natural, me dijo que quizás tuviera varias compañeras envidiosas por mí cabello, de su loquer saco dos vestido tipo jumper con el logo de la escuela bordado, uno era más grande que el otro, me puse el primero por encima de mí cabeza como la doctora me lo indico, pero antes me había puesto una blusa de puntas de cuello redondas con delicados botones blancos, descubri que el jumper tenía un delgado cierre por un lado, lo subí para ajustarlo, sentí que era muy grande para mí,  se ajustaba holgadamente a mí cintura, entonces me hizo probar el otro, lo levante por encima y me lo puse, fue un poco difícil por tener pechos grandes, la doctora jaló con firmeza el jumper hacia abajo sin lastimarme mucho, subí el cierre y se ajusto perfectamente a mí cintura, mis pechos se vian agradables en el jumper, sin sentir presión, el escote del jumper era cuadrado, la doctora me dio un listo negro para ponérmelo como corbata en nudo, ella ajusto el nudo y me indico como hacerlo bien, me dio un suéter, unas calcetas blancas nuevas y una boina verde, ese era el uniforme, me puse las calcetas y me indico que siempre debía traerlas subidas y dobladas por debajo de las rodillas, debía tener cuidado o sino me pondrían un demerito a los 5 tendría una falta y con tres faltas un castigo mayor, también la boina siempre debía estar en su lugar, el suéter jamás debía ponérmelo en la cintura, para ponerme la boina, la doctora se quito sus dos prendedores de cabello para ponérmelos, me enseño como debía arreglar mí cabello y presumir mí flequillo de cabello rojo, la boina quedo perfectamente bien colocada en su lugar, las calcetas bien arregladas, el sueter bien puesto y abotonado., me hizo por último probarme uno zapatos bajos de tacón de 3 cm y correa lateral, era muy femeninos.

Pensé que estaba listo para ir donde la directora dijo, pero aun faltaba lo más importante arreglar mí cara, saco su bolsa de maquillaje, me explico que realmente debía aprender hacerlo por que eso era muy importante y aunque tendría una clase de eso, muchas de las chicas de instituto tenían mucha experiencia, me dio una pequeña clase para maquillar la cara tipo ovalada y cejas rectas, me quito el exceso de ceja y las pinto, me dijo que mí piel era muy lampiña pero con los medicamentos que iba a tomar ese problema iba ir desapareciendo, puso un poco de corrector y me dijo como expanderlo, luego se enfoco en las sombras de mí parpados, me dijo como debía poner la sombra y expandirla, luego siguió con los labios lo más importante para una chica de escuela, me enseño que debía primer perfilarlos y luego pintarlos de esa manera lucirían bonitos, lo hice como me dijo y tome nota metal para hacerlo bien, luego puso un poco de rubor en mí mejillas y estaba listo para irme, me dejo verme al espejo, estaba completamente sorprendido de ver una chica bonita en el espejo, jamás hubiera pensado que fuera tan bonita mí cara si fuera maquillada, pero antes de irme me dio la última revisión, me levantó la falda me reviso que mí pantaleta luciera bien puesta, me advirtió que era de mal gusto que aunque se tuviera pene se mostrara, que una señorita jamás debía dejar que lo vieran o se viera por un descuido, era de mal gusto, siempre debía tener cuidado, aunque me advirtió que yo no tendría ese problema por le trabajo que hizo ella en mí, pero debía tener cuidado de eso.

Me puso un poco de perfume en la  entrepierna, atrás de las rodillas, en las muñecas, en el cuello y atrás de las orejas, de esa manera estaba listo para irme a mí presentación en mí nueva escuela, pero antes de irme la Doctora me dio un pequeño obsequio, un dije en forma de cruz, me dijo que todas la chicas del instituto tenía una igual, que siempre lo cuidara y el me iba a cuidar, me abrazo, me tomo de la mano y caminamos hacia la escuela, sentí un poco de fresco que subia por mis piernas, eso me hizo ruburizarme y ponerme la piel de cochino, pero sabia que debía acostumbrarme a eso.

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La doctora me dejo entrar primero, ví que la directora estaba al final de una gran  escalera de doble subida, y todas las alumnas hacían baya a los lados de los escalones, la mayoría de ellas eran rubias y altas, sus boinas y cabellos estaban perfectamente peinados, sus uniformes lucían impiecables y sus calcetas sumamente limpias, sentí miedo subir toda es escalera y pasar enfrente de todas esas chicas, traque saliva ya Doctora me dio un pequeño empujo, voltee a verla quería huir, pero las pierna no me dejaban avanzar, con el empujon solo podía avanzar hacia adelante, voltee a ver a la doctora me sonrio para darme confianza y decirme que siguiera avanzando.

Vi que al inicio de la escalera estaba otras mujeres con el mismo traje sastre de la directora, ella parecían que eran las maestras y las asistentes escolares, ellas comenzaron a aplaudir, al igual que las demás chicas, algunas de ellas sonreían y otras estaban serias, llegue hasta donde estaban las mujeres  dos de ellas me dieron un abrazo y un beso en la mejilla diciéndome que era bievenida, me dieron un pequeño empujo en la espalda para seguir subiendo, el miedo me decía que avanzara quen o podía detenerme, fui subiendo escalon por escalón, en medio de pena por las miradas de las chicas una de ellas traía unos lentes y me apretó mí mano para infundirme confianza para llegar hasta arriba, cuando por fin llegue la directora dijo después de un largo silencio, donde los aplausos de detuvieron: dio un pasó hacia mí, me tomo de los hombros, me dio un abrazo, olí su perfume de maderas finas: me volteo hacia atrás para que me pudieran ver todas desde la posición más alta de la escalera: Señoritas, permítanme presentarles a la Señorita (miss) Heather Merry Turnner, si apellido pertenece al linaje más antiguo de las fundadoras de este pueblo, es un honor tenerla entre nosotros, aplaudamos su decisión de ser una de nosotras—escuche como los aplausos recorrían todo el edificio, la directora pidió silencio y continuó: los valores de esta institución precederán tu vida, La práctica sumisión, la lealtad, la Honra, y el sacrificio te dará una  vida feliz, te harán encontrar tu destino en tu familia;  la sumisión te dará  encontrar tu lugar en tu linaje, la lealtad te ayudara a tomar la mejor decisión por el bien de tu linaje; la honra es lo que es el honor en los hombres, es el complemento de la palabra empeñada por tu padre y tu futuro esposo, jamás deberás perderla o engañar o mentir, deberás permanecer pulcra y sencilla, siempre, el sacrificio es el principal factor para la grandeza, el olvidarnos de nosotras mismas, nos harán llegar a la nobleza de carácter, eso es más fuerte que todos los hombres juntos, el sacrificio debe ser silencioso no ostentoso, el silencio y la moderación es el principal carácter de una buena mujer—luego se dirigió ante todas las chicas que estaban perfectamente bien colocadas en los bordes de las escaleras—ustedes chicas, todas ustedes, que tienen el destino de procrear y cuidar a los grandes hombres que vendrán y les darán vida, los cuidarán, tienen una gran responsabilidad en sus manos, es una tarea ardua para toda la vida, el destino está en sus manos.

Tu Heather Merry Turnner, tu tienes una gran familia fundadora, tu estirpe precede a grandes hombres de lucha y éxito, tu no puedes olvidar eso, jamás, tu deberás sacrificarte por algo más grande que tu misma, esa grandeza que solo olvidando tu soberbia y quitando tu pequeño ego para ser tu misma—la Directora tomo una pequeña caja que estaba en una bandeja de plata que traía cargando una chica de cabello rubio y cara angulosa, pero hermosamente maquillada, abrió la cajita y saco un prendedor con los valores y el nombre del instituto, con una voz ronca pero dramática volvió a recitar los valores del instituto: “Sumisión, Lealtad, Honra y Sacrificio”, mientras me lo colocaba en el lado derecho del suéter, yo mantenía una postura con las piernas juntas y las manos frente de mí, deje que lo pusiera, sus últimas palabras que recuerdo fueron: “Señorita ahora usted perteneces a esta comunidad y siempre deberá honrarla, jamás lo olvide”.

Esa noche tenía mucha emoción y pensaba que el estar allí era por algo que no podía entender; porque en la vida que había llevado hasta ahora, no había logrado nada, era mediocre y sin significancia, mí pobre destino solo sería un vendedor callejero, como lo fue mí padre, el alcoholismo de mí padre era mí destino, pero a pesar de eso, ahora tenía una oportunidad para cambiarlo, tenía la oportunidad de ser alguien en la vida, ser importante, ser distinguida y con éxito, además de tener buenos estudios, mí padre jamás me hubiera podido dar eso, ahora mí vida y mí destino se abría para ser algo más grande que yo mismo.

Solo debía estar allí y cumplir con lo que me pedían, ser lo que la sociedad me pedia que fuera, el destino me había llevado al lugar y al momento correcto, ya no podría escaparme, ni debería hacerlo, aunque tuviera la oportunidad, las palabras de la directora me habían inspirado a lograr mí verdadero destino, costara lo que costara, era una decisión pensada y bien tomada, tenía una grandiosa vida por delante, de eso estaba bien convencido.

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La semana paso muy rápido, mí cabello había regresado a su color original, Merry Stockton era mí compañera de cuerto y mí hermana mayor, ella era quien me ayudaría adaptarme a la institución, ella usaba también el color de cabello pelirrojo, pero no era original con el mio, pero áramos las dos chicas del instituto que lo teníamos de ese color, además de esa cualidad, usábamos lentes y éramos rollizas, a Merry Stockton le gustaba peinar mí cabello mientras hablábamos en nuestras camas antes de dormirnos, aprendía rápidamente lo elemental para evitar conflictos con otras chicas, la sumisión era una parte importante de mí aprendizaje.

Esa semana fui aprendiendo nuevas cosas y me decisión por no irme aumentaba día con día, con cada aprendizaje y clases que tomaba, reforzaba mí decisión para terminar lo que había comenzado y olvidaba la forma en que había llegado allí y quien había sido.

Merry era mí apoyo e iba con ella a donde ella fuera, había momentos en que me tomaba de la mano para no perderme entre los pasillos de la enorme casa, eso está bien visto, pero debíamos tener precausión para que las institutrices no pensaran que éramos otras cosa que solo amigas, yo era como su pequeña hermana y me dejaba cuidar por ella, aprendí a como defenderme verbalmente de otras de las chicas que tenían envidia de mí cabello pelirrojo, aunque yo  prefería mantenerme en silencio y evitar la confrontación, la Directora y la Doctora me había recomenado evitar hacerlo y debía obedecerlas si quería permanecer dentro de la institución, todo intento por irme se había ido, sentía que mí carácter se tornaba tranquilo y apacible después de cada inyección, por la mañana me sentía tranquilo y sentía que volaba.

La doctora me ayudaba mucho, era también mí confidente y tolerante con mis retardos por un minuto, pero el dia viernes aprendí lo que era ser castigada, recibí 10 golpes de palo de mimbre en mis nalgas, y mantuve un vaso de agua en mis manos por una hora, con libros en la cabeza y la postura correcta de la espalda, la doctora dijo que era por mí bien.

La doctora era quien me surtia de cosas que necesitaba, cuando llegue a mí habitación compartida encontré una maleta de viaje con la ropa que usaría en el instituto, 3 juegos de ropa de dormir, una bata, 3 vestidos y 3 juegos de uniformes y dos pares de zapatos, también me había regalado su bolsa de maquillaje con buenos productos de maquillaje.

El último día de clases la maestra de administración del hogar, mientras en silencio hacíamos nuestro ejercicio, ella comenzó hablar para darnos unos consejos, deje de hacer mí ejercicio para escucharla: Señoritas hoy les voy hablar de algo importante que deben saber, escuche algunos rumores en el pasillo, quizás lo que les voy a decir les sirva, en la naturaleza del señor existen cosas que no entendemos, pero suceden y debemos aceptarlas, ser tolerantes, debemos entender que hay cosas que deben ser horizontales y otra verticales, los hombres son verticales las mujeres son horizontales y deben dar el apoyo en la vida a los demás, así debe ser y ha sido desde la fundación de este pueblo, jamás se ha cambiado nuestra naturaleza y debe ser así—en ese momento fue directo a lo que quería decir: Señoritas hay varones que nacieron para ser señoritas y no se puede remediar, debemos ser tolerantes, no debemos juzgar, ni criticar, eso es muy malo, cada una de ustedes solo se deben enfocar en ustedes mismas, es ser mejores mujeres y cumplir con su destino de ser buenas mujeres, el destino común de nosotras es procrear y el dar nuestra vida a otros, así que apoyemos a esas personas débiles—me identifique con sus últimas palabras, yo realmente era una persona débil comparada con las demás chicas del instituto, era de estatura menor a todas las demás, tenía más cadera que las otras y más pechos, que las demás, Merry me decía que eso me daba una ventaja ante los chicos, pero ante las demás chicas me hacia que tuvieran envidia, por ser más bonita y cuidadosa por mí aseo personal.

El día sábado Merry me ayudo a prepararme para salir del instituto e ir al pueblo, tenía miedo de salir del internado, pero Merry me abrazo y me dio fuerzas para hacerlo, me dijo que ella sabia que mí tia no era una mala persona, yo le había dicho que realmente no conocía bien a mí tía, ya que había vivido con mí padre fuera del pueblo y a la muerte de mí padre la corte del juzgado estatal había hecho que regresara con ella para que fuera mí tutora, esa era historia de mí vida que la doctora me había  hecho aprender de memoria.

Merry me dio fuerzas diciendo que hiciera solo lo que me pedia no la hiciera enojar, esa sería la mejor manera de llevar las cosas, mí aprendizaje de sumisión debía seguir fuera del instituto; también llevaría mis nuevos conocimientos de costura y tejido, cocina y administración del hogar, en la costura y costura sentía que no era muy bueno al igual que cocina, en administración me defendía y hacia bien las cosas,  pero mí nueva tía se encargaría en hacerme una buena tejedora y costurera, ella tenía fama de hacer los mejores vestidos para chicas de fin de cursos.

En cuanto a literatura realmente mí fuerte, porque la maestra decía que era muy imaginativa,  la directora decía que eso era una debilidad en mí carácter, debía controlarla y poner los pies en la tierra.

La Doctora que me ayudaba mucho y estaba al tanto de que tomara mis medicamentos, me sugirió que para fortalecer mí cuerpo, debía postular al equipo de animadoras, por que quizás por ser pequeña podría coronar las formaciones, además consideraba que sería una buena forma de relacionarme con otras chicas de otras familias importantes, en ocasiones importantes podría salir del instituto para conocer un poco más el pueblo, las personas y benefactores del instituto.

La Doctora me dijo que realmente la Directora había sugerido que hiciera ejercicio para fortalecer mis piernas y brazos, así que el viernes después de mis inyecciones fui con Merry a la audición para las nuevas postulantes, yo sentía que mí cuerpo rollizo no podría competir con las demás, hice todo lo que me pidió la capitana y le demostré mí flexibilidad de estirar completamente mis piernas, mí abuela paterna descubrió esa facultad en mí y siempre lo hacia ante ella, la capitana y la educadora de deportes, con formalidad nos dijo que los resultados serían colocados fuera del gimnasio el día lunes, quede emocionado por saber el resultado y pensando en eso todo el fin de semana con mí tía Merry.

Con eso en la mente me subí al camión escolar para dejar la escuela, tenía mí ropa y  zapatos limpios, en mí maleta con un poco de ropa y mi libro que había sacado de la biblioteca y debía terminar de leer: la mujer perfecta, no existe, se hace! De Merry Sthephor, una de las personas fundadoras del pueblo.

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Cuarenta minutos después de disfrutar el paseo por los campos de trigo, llegamos nuevamente al pueblo, esta vez lo vi más animado y poblado de gente, llegamos hasta la fuente del ganzo, frente al edificio del ayuntamiento, allí esperaban nuestros familiares, era como una pequeña fiesta, me despedí de Merry, ella cruzo sus dedos para desearme suerte y la vi irse entre la gente para abrazar al Sr. Stockton su padre, yo tome mí maleta y camine entre la gente para identificar a la Sra. Turner, ya no recordaba muy bien su cara, solo recordaba que tenía una cadera grande y su cabello también era pelirrojo.

La mujer que sería mí nueva tía, me esperaba parada al final de la escalera del ayuntamiento, debi subir la escalera con mí maleta, cuando estuve frente a ella, sin esperarlo y sin mucho entusiasmo me abrazo y me dio un beso en la mejilla, luego me pidió ayudarme con mí maleta, con su sonrisa que recordaba me miro a los ojos, sabia que no me haría daño, aunque debiamos conocernos mejor, la Sra. Turner me dio la bienvenida diciendo: Bienvenida ahora sabes que eres mí Sobrina y de la familia Turner, eso es importante y deseo que nos conozcamos mejor, me han dicho que eres una maravillosa y sumisa chica, yo te voy a ayudar a que sigas siéndolo, solo confiemos entre nosotras, de una a la otra, deseo que me cuentes lo que piensas y sientes—la Sra. Turner me puso sus manos con sus guantes blancos en mis mejillas, fue una sensación extraña, pero sentí algo por ella—lo único que le dije sabía que era importante que estuviera con ella y que no me iba escapar de ningún modo, le di mí promesa y le dije que mí honra y el honor de mí familia estaría en juego, la Sra. Turner se alegro de oir eso, me abrazo fuertemente, me tomó de la mano y me dijo que me llevaría de compras.

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Por la inyección de la noche anterior y las pastillas que me tome esa mañana, me sentía que volaba, estaba emocionado por estar caminando por el hermoso pueblo que ahora sería mí casa, ahora lo veía muy diferente de cuando había llegado.

Las familias caminaban con sus hijas por entre las calles de tiendas, los viejos autos avanzaban lentamente para evitar un accidente, era una típica imagen de un pueblo americano de los años 50´s, parecia que nada hubiera cambiado, me dejaba llevar de la mano por mí nueva tía Merry, entramos a la tienda de telas, tuve mí primera clase de telas y tamaños de cortes para hacer prendas, tenía varios encargos de vestidos, compro hilos y ajugas para maquinas de coser, también compro bordados y encajes, la señorita que nos atendió era muy amable y simpatica, pero tenía su voz ronca como todas las mujeres del pueblo, ya me había acostumbrado a eso, mí nueva tía merry, me compro un patrón para hacer mí primer vestido para la fiesta de benefactores, eso sería en 6 meses y sería importante, también me compro un poco de tela de casimir de lana, para hacerme una falda para el frio, ella me enseñaría a coser y bordar.

Luego de pagar en efectivo, salimos para ir a la tienda de comestibles, allí fue mí segunda enseñanza de para poner en práctica mis conocimientos de administración del hogar, aun era muy rudimentarios, pero el hecho de que una mujer adulta con mucha experiencia en la elaboración de alimentos me mostrara como debía comprar alimentos y las cantidades adecuadas para servir a 20 huéspedes, me hizo tocar con mis manos los alimentos para olerlos y sentir su frescura, el señor tendero seguía a la Sra. Turner para tomar nota de las cantidades que necesitaba, ella era una buena clienta, el hombre se llamaba Sr. Blue y tenía un gran vientre, mí nueva tía,me presentó como su sobrina Heather la hija de su hermano Harry, el que se fue del pueblo, vi una extraña cara al momento que escucho el nombre de Harry, pero no comentó nada más, cambió de conversación preguntando si quería que se le entregara su pedido a las 6 de la tarde de ese día, la sra. Turner, sin ver al hombre le dijo que a las 6:30, por que tendría algunas cosas por hacer, entonces tomo una caja de levadura, una bolsa de harina, un envase de untar chocolate, le dijo que se iba a llevar eso en ese momento y lo demás lo esperaria a la hora que le dijo, el sr. Blue guardo las cosas en una bolsa de papel y me la ofreció para llevarla, me sonrio y dijo a mí nueva tia que tenía una maravillosa sobrina y debía cuidarla, la sra. Turner con seriedad le dijo que eso pensaba hacer para que no me pasara nada malo, por que como sabía ahora había más gente mala que antes—algo quería decirle pero no entedí exactamente lo que quiso decir.

Salimos de la tienda de comestibles, pero antes de salir tomó un lindo delantal bordado para mí en flores  de color rosa.

 Seguimos caminando y me preguntó si quería una malteada?, me dijo que en ese lugar se hacia las mejores bebidas, acepte con gusto probar esa malteada, entramos a Burger queen, el ambiente del lugar era muy tradicional en colores pasteles, me gusto mucho por los colores pasteles que abundaban, creo que esos colores serían favoritos míos, por que la doctora me había puesto ropa interior de esos colores,  mis blusas también eran de esos colores, mis pijamas y mis plumas también, así que me gustó mucho el lugar, no sentamos en una mesa, por que era de mal gusto para una señorita sentarse en la barra, mí nueva tía además de la malteada me compro una hamburguesa, me dijo que era un día especial por nuestro “re-encuentro”, me comentó que a mí padre también le gustaba las malteadas de ese lugar, lo que era extraño era que no hablaba nada de mí madre.

Termine en silencio mí haburguesa y sentía que tenía espacio para otra hamburguesa, pero mí nueva tía me recrimino que no debía tener gula y debía ser moderada, para una buena digestión debía comer poco y con moderación, acepte su consejo y me termine mí haburguesa con alegría, salimos de allí pensando que me gustaría venir muchas veces a ese bonito lugar.

Cargaba las bolsas de las compras mientras pasábamos en una tienda de suministros para armas, en ese momento salió el encargado de la tienda para detener a mí nueva Tía y entregarle un paquete que pensé que eran balas por que en el empaque tenía la marca de balas Carraid de calidad, pero no sabia que eran toallas femeninas disfrazadas de balas, era un encargo disfrazado de mí benefactor, era un engaño para que los rumores dijeran que yo era un chico raro que quería ser una chica para los estándares del pueblo, pero que se entendiera por todos que yo venia del mundo exterior y eso estaba bien visto fuera del pueblo, que estaba en un proceso de adaptación, también me di cuenta de que las toallas eran tan caras como una bala.

Mí tía me hizo portar una todos los días que estuviera con ella, la doctora se encargaría de que tuviera mí regla sin problemas, también mí tía Merry me enseño que la última semana de cada mes era la semana de la paz, donde nadie salía de sus casas al menos que fuera necesario, las mujeres del pueblo debían permanecer en sus casas y ayudar a los hombres.

Por estar leyendo mí libro ahora estaba entendiendo el nuevo concepto de ser mujer, era profundo y un encuentro conmigo mismo y mí esencia, era como si entendiera por que las cosas debían ser de esa manera y no debía ser cambiados, me daba un poco de vergüenza el decir que no lo era, pero si lo era.

Pero ahora esa era mí vida afrontra nuevas cosas y salir fortalecido.

**

llegamos a la casa de huespedes de la Sra. Merry Turner, ahora vi que el jardín del enfrente de de la casa era más amplio y tenía dos hermosos árboles llenos de pájaros que cantaban.

Llegamos con las cosas hasta la cocina, me pidió dejarlas en la mesa de trabajo, al entrar en la cocina me di cuenta de que ella no estaba sola, había un grupo de jóvenes y mujeres ayudando a prepara la comida, ella solo dirigía la cocina y todas las actividades, me presentó ante todos ellos, como su sobrina, les dijo que todos debían cuidarme y ayudarme en lo que necesitaba, todos me saludaron haciendo una venia, me llamo la atención que las mujeres mantenían una postura correcta con las manos juntas al frente y las piernas perfectamente juntas, sus cabellos perfectamente peinados con chongos altos.

Mí nueva tía me indico ir con ella para llevarme a mí habitación, la primera vez que había entrado a esa casa, solo había ido a una sección de la casa más pobrle en cuanto detalles, eran los cuartos para extraños o invitados no deseados, por que la casa de huéspedes donde era usada por personas de confianza era sumamente elegante y sobria, llena de detalles en maderas finas, con muebles hechos a mano, espejos, flores y candiles, en el tercer nivel era donde ella vivía, dos cerraduras impedían la entrada a extraños solo con las dos llaves podrían entrar, así que mí nueva tía me ofrecio un viejo juego  de grandes llaves con una cadena para el cuello, al abrir la puerta me di cuenta de que un gran espejo que hacia un extraño fenómeno de agrandar la habitación, un gran candil adornaba el centro de la habitación, había una sala con sillones de tela bordada de flores, una mesa de centro y una mesita de atención para cada silla, además había una mesa altas con bustos de mármol atrás de ellas había espejos, del lado derecho había una puerta doble para entrar a la sala de lectura y a la biblioteca, había otra puerta para entrar a la oficina de trabajo de mí tía merry, había una tercera puerta para llegar a la sala de juegos, allí había una mesa de billar y trofeos de casa, también se llegaba por allí al patio techado  de fiestas

Del lado izquierdo había un una puerta para las habitaciones privadas, mí tia también me dio otra llave para acceder allí y agrego la llave de mí habitación, para llegar allí había un pasillo alfombrado, la habitación más grande y de la esquina más alejada era la de mí nueva tía, la mia sería la contigua a la de ella, así estaría al pendiente de mí, el resto de las 7 habitaciones que quedaba, estaban cerradas con llave, me dijo que cada una de ellas tenía una historia y con el tiempo me las contaria.

Mí nueva tía abrió mí habitación, hice una exclamación de sorpresa al ver mí habitación.

Era rosa de diferentes tonalidades y contrastaba con detalles azul pastel, era hermosa y delicada, sus muebles era blancos y detalles de rosas y dorado, en tocadore tenía un espejo redondo con luz y además había un enorme espejo de cuerpo completo que podía girar y mostrar otro espejo cóncavo para ver a detalle la ropa que usaba, pensé que si se ponía en cierta posición podía verse por detas de uno, la alfombra era suave, las puertas del closete era de madera blanca y podían abrirse doblándolas, mí nueva tía me enseño como debía hacerlo, me sorprendí aun más al ver dentro del closet, que perfectamente acomodados había hermosos vestidos, el closete despedía agradable olor un perfume de rosas, mí nueva tía me dijo que todos era míos, que desde que me había ido los había estado cuidando para que los usara a mí regreso.

También me mostró cajas con hermosos zapatos, tenía enaguas, ropa interior, medias para el día domingo, todo era muy femenino a agradable, tenía un escritorio para escribir, mí nueva tía abrió un cajón para mostrarme que aun tenía mí “antiguo diario”, me dio una pequeña llave con moño de listón rosa para abrirlo.

Entonces me dio mí primera tarea por hacer, esperar y atender a la Sra. Stockton, ella era la presidenta de damas del pueblo, encargada del club de damas y todos los eventos importantes del pueblo, entre ellos las fiestas de los benefactores donde se ofrecían comidas y atenciones a ellos.

Pero antes de que ella llegara, debía bajar ayudarla para preparar galletas para ella, así que debía hacer dos cambios de ropa en las próximas dos horas, mí nueva tía me escogió la ropa que usaría, yo estaba incrédulo por lo que estaba pasando, mí decisión tomada estaba pasando a otro nivel, la miraba a los ojos y quise pregunte si realmente podría usarlo y si realmente sabía quien era?, pero no importaba, mí vida estaba cambiando y debía afrontarla conforme iban sucediendo las cosas, la maestra de literatura nos había dicho que la vida era lo que nos iba sucediendo y afrontábamos las circunstancias que nos impedia ser nosotras mismas.

Apretando los labios acepte la ropa que me ponía en las manos, me tomo de las mejillas y me dio un beso en una de ellas, jámas mí padre me había dado un beso, ahora recibía uno muy calido, entonces me dijo: desde que te vi en la puerta, sabia que eras mí sobrina, ahora lo se al ver tus ojos, quizás el tatuaje de tu mano indique que eres de este pueblo, pero tus ojos no mienten—yo tenía un pequeña luna y una estrella en mí muñeca izquierda, mí padre jamás me dijo por que tenía esa luna en mí muñeca o quien me la había hecho, estaba muy confundido y no sabia si realmente mí padre era mí padre o si lo que había vivido hasta hora era verdad.

Acepte cambiarme en 10 minutos y alcanzar a mí tía en la cocina.

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Mí tía me había dado una falda larga que se ajustaba a la cintura con dos hebillas doradas y una blusa de seda blanca y encajes en líneas, el usar ropa interior de seda costosa era muy diferente al algodón de ropa de línea, me hacia sentir libre y la vez fresco, unas botitas picudas acentuaban el estilo sureño, para mí cabello practique un  chongo alto y un solo arregle flequillo en mí frente que me había hecho esa mañana, en la cajita de joyas encontré dos pequeñas arracadas dordas y un dije de oro en forma de cruz, era muy parecido al que usaba en la escuela, me lo cambie y me puse el prendedor con el escudo de la escuela. Según la tradición mientras estuviera en el instituto no debería quitármelo.

Me puse frente al enorme espejo y como había pensado si ponía el espejo en cierta posición frente al espejo del tocador, podría verme el trasero, era la primera vez que podía verme desde atrás, era como si viera a otra persona, era una chica con un trasero muy bonito, de amplias caderas, cintura delgada y pechos pequeños pero levantados por el brassiere dándoles un aspecto más grande y agradable, mí cabello rojo lucia más bonito largo y contrastaba con mí piel blanca y mis lentes, sentía que mis pecas se hacían más bonitas, sin sonreía.

Baje después de poner un poco de lápiz labial, desde que estaba en la escuela era una de las cosas que jamás debíamos olvidar de vernos bien frente a los demás, los labios era una parte importante de nuestra personalidad.

Llegué a la cocina sobre los 10 minutos que había estipulado mí tía para comenzar a preparar las galletas, antes de darme instrucciones, hice una pequeña venia como me habían enseñado en la escuela para entrar a clases o en algún lugar donde había una persona importante, me reviso con su mirada dando escrutinio profundo de como estaban mis ropas, me mantuve firme con las manos frente a mí, ella me acepto sin decir nada, había otros 3 jóvenes y 2 mujeres con mí tía, me presentó como su sobrina que había regresado por que mí padre me había abandonado y pidió que debían obedecerme como si fuera ella, además asigno a una de las mujeres jóvenes para que me ayudara con el aseo de mí recamara y mis labores.

Entonces comenzamos en silencio hacer la labores de cocina, me indicó preparar las masa con ciertos ingredientes y luego amasarla con las manos, era difícil hacerlo, pero mí Tía me dijo que debía aprender para que mis manos se fortalecieran, una forma correcta de hacerlo también fortalecía mis piernas  mis caderas para tener buenos hijos, por mí falta de experiencia puso a la chica que me ayudaría con mis actividades a mostrarme como debía hacerlo, con las piernas juntas y la espalda recta debía empujar, levanta y luego volver a empujar, lo seguí intentando sin detenerme, la chica no me veia a los ojos y simplemente hacia su trabajo sin decir nada, ella se llamaba Beth smit.

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Pusimos la levadura y seguimos batiendo, hasta que mí tía considero que estaba bien, me dolía mí vientre, mis piernas y mis hombros, sobre todo mí vientre y mis glúteos, pero la clase continuaba, tuve que aprender a moldear galletas y ponerle con mucha calma y delicadeza la chispas de chocolate, mí tía me dijo que debía hacerlo bien para que aprendiera a tener paciencia y dedicación, esas dos cualidades eran importantes para una chica, nuevamente Beth me dijo como debía tomar el servidor de chocolate, no debía apretar con fuerza, pero si con precisión, usando las dos manos.

Metimos las bandejas de galletas al horno y nos sentamos a esperar, mí tia me dio la tarea de abrir vainas de chicharos, nuevamente la paciencia era importante, pero también la postura frente a la mesa era importante, siempre debía mantener las rodillas juntas, la espalda recta y las nalgas bien atrás de la silla, de esa manera mí vientre permanecía firme y las piernas no podrían separarse, al principio me sentía incomodó, pero conforme pasó el tiempo, me sentía confortable en esa posición, me tía me dijo que solo era cuestión de sentarse bien como una señorita, manteniendo bien apretado el vientre, algo que escuche decir a mí tia era que el vientre era una parte importante por que desde allí salía nuestra esencia de mujeres, debiamos cuidarla siempre.

Cuando termine mí labor, mí tía vio su reloj y dijo que debía irme a preparar para la visita, subí con calma hasta mí habitación, lo hice con calma por que como la casa era de madera, se escuchaban los pasos que daba y me había ordenado que debía ser discreta con el sonido de mis tacones por que los clientes estaban descansando y no debía molestarlos con sonidos desagradables, por fin podía descansar por 3 minutos, me recosté en la cama y cerré los ojos, me dolía mí cuerpo, escuche que tocaban la puerta y me paré a abrir, era Beth que la había mandado para ayudarme a cambiar ya que había ordenado mí tía que usaría corete como la vieja usanza, ya que la visita era muy estricta con los modales que habían sido dados por las fundadoras, eso lo entendía por haber leido el capitulo de mí libro: las buenas maneras de las señoritas deben ser fomentados desde pequeñas.

Pero antes de comenzar a vestirme quería saber más de Beth, la chica seguía sin mirarme, entonces le pedí que me mirara, le levante la mirada, ella con temor y vergüenza me vio, le dije que no tenía que tener miedo que yo no mordía o le haría daño, que no era como las demás mujeres del pueblo o mí tía, ella sonrio e intentó bajar la mirada, pero mis dedos la detuvieron, sus ojos era cafés y sus pestañas eran largas y lindas, su cara era angulosa como todas la mujeres de es pueblo, su labios estaban bien pintados, se modio los labios y dijo con su voz roca pero suave, disculpe pero no puedo verla a los ojos, mí madre me acostumbro a servir y no a intimar con quien nos dan de comer, lo siento, señorita—le solte la barbilla y bajo la mirada, me pregunto si podía ayudarme a vestir, aun no podía entender la forma de pensar de ese pueblo, no todos tenían las oportunidades que yo estaba teniendo, valore el hecho de estar una institución privada que me haría una distinguida señorita de ese pueblo.

Me preguntó si podía desvetirme para ayudarme a ponerme el coret, era caso perdido jamás entendería que yo no era como las demás mujeres de ese pueblo, tampoco entendía que yo no me sentía como una mujer, aunque para ese pueblo lo fuera.

Me desabroche la falda y calló al piso, ella la levantó y la colocó pefectamente bien doblada en uno de los ganchos del closet, sacó un corset blanco con listones rosas, tenía ligueros para medias, pasó por enfrente de mí y con destreza fue jalando los broches uno por uno hasta terminar de abotonar todos en medio de mis pechos, vi que se sorprendió de ver que mis pechos fueran tan llenitos y tuvieran una aura rosadita, pareció que les agradaba, pero no dijo nada, ni se interesó en verlos con detenimiento, se regresó atrás de mí para jalar los listones, jamás había sentido la falta de aire hasta que ese momento que jalo con todas sus fuerzas y apretó todo mí cuerpo, pero no estuvo conforme en jalarlos hasta que mí cintura estuviera pequeña como 3 tallas menos, mis pechos se levantaba y mí cadera la sentía enormemente grande, debía mantenerme con la espalda recta y el vientre echado hacía atrás para respirar, de esa manera debía mantener mí postura correcta con los muslos juntos, las nalgas levantadas, el pecho levantado los hombros rectos, la cabeza levantada, era una postura como de orgullo, Beth me hizo ponerme las medias de tubo en color blanco y una crinolina, todo con esfuerzo para doblarme, comprendiendo que debía dejarme ayudar, bajo las ordenes de mí tía sacó un vestido borado en azul pastel y detalles en color rosa pastel, era muy femenino y delicado, los zapatos era una botitas blancas de 5 botones de tela, hacían mis tobillos más delgados, el busto del vestido era en B con chiffon blanco, era muy discreto pero dejaba ver la línea de mis pechos, el vestido me cubría hasta la barbilla y las mangas hasta las muñecas, Beth me hizo sentarme frente al tocador para peinarme, me deshizo el chongo y comezó a lisar con firmeza mí cabello, ya estaba acostumbrado a los jalones, estuvo conforme hasta que pudo jalar hasta el último cabello rebelde, luego con un listón rosa me hizo un nudo en forma de lindo moño, lo único que se mantuvo en su sitio (además de mí pene), fue mí flequillo de la frente, el color azul pastel y el flequillo iban a ser carácterísticos de mí nueva personalidad femenina, ambos me gustaba usarlos.

Beth me indico que debía retocar mí maquillaje, en eso ella no podía hacer nada, en mis clases había aprendido más que ella de como embellecer mí cara, las maestras sabían que yo tenía la cara más bonitas de todas las alumnas y siempre me tomaban de ejemplo o me daban tips de como maquillarme, ahora sentía que debía siempre hacerlo bien y correctamente, era como si lo hacía estuviera sin ropa.

Termine de arreglar mí cara y Beth se dedicó a ver los detalles del nudo de mí cabello, el nudo trasero del vestido, mis botitas blancas estuvieran limpias y abotonada correctamente, me pidió permiso para levantar mí crinolina y revisar las ligas de mis medias, aprovecho para acomodarme las pantaletas y subirlas un poco, yo no podía ver lo que ella hacia, solo sentí como el resorte de mis pantaletas me golpeaban mis nalgas.

Me hizo dar unos pasos por la amplia habitación y senterme en uno de los cómodos sillones, trate de hacer mí mejor forma para sentarme, mí maestra me había dicho que tenía una forma natural para hacerlo, sin exagerar mantuve mí posición con los pies juntos y mí espalda recta, aun me faltaba mucho para hacerlo correctamente, pero Beth dijo que era muy bonita mí forma se sentarme, sin mirarme me dijo que era muy bonita y mí tia estaba orgullosa de mí.

Le agradecí el cumplido y le pregunte, si también su madre estaba orgullosa de ella, Beth cambió de actitud y secamente me dijo que eso no era importante para mí, nuevamente pense que las cosas con ella no iban a cambiar.

Beth Tomo un rociador de perfume y apretando la pequeña vejiga con maestranza, me roció abundante perfume por todo mí vestido, arregló mis aretes, mí crucestia y mí prendedor del instituto, estaba todo listo para esperar a la invitada, Beth me dijo que ella me iba ayudar a la preparación de las tazas y el té ingles, además de llevar la bandeja de galletas.

Me indico que iba a ir con mí tía para avisar que estaba lista, ví como se iba de la habitación moviendo su vestido negro largo de trabajo, también tenía un bonito caminar, moviendo sus caderas.

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Me quede en la habitación solo sin saber que hacer, así que me entretuve practicando mí reverencia de saludo y la forma de ofrecer mí mano agregando la forma correcta para saludar a la Sra. Stockton, también ensaye la forma de sentarme sin colocar la espalda en el respaldo, manteniendo mis manos juntas sobre mís piernas, lo ensaye varias veces, también ensayaba la forma correcta de estar de pie, escuche el motor de un auto me asome por la ventana, era la Sra. Stockton, ví que era una mujer obesa de cabello rubio, con una boina en el cabello, traje sastre en color verde, con guantes impecablemente blancos, y zapatos altos de tacón de ahuja, su caminar era perfecto.

Ví como mí tía salía de la puerta del auto negro  a recibirla y le ofrecía su mano, como eran iguales, no estaba bien hacer venias de saludo, se dirigieron una palabras y se ofrecieron sus mejillas para terminarse de saludarse, el chofer que le había abierto la puerta le entregó un caja bellamente forrada como un present, mí tía lo acepto y la invitó a pasar, escuche como iban subiendo las escaleras, cada vez me sentía más nervisos, así que me acomode en mí posición frente a la puerta para recibir a la invitada de mí tía, mis manos juntas frente a mí vientre, mis piernas juntas y firmes, la espalda recta y los hombros rectos, hubo un silencio y luego se abrió la puerta.

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Ví a una mujer perfectamente maquillada, se había quitado sus guantes y los traía en la mano, mí tía estaba aun lado de ella, me hizo la presentación diciendo: Merry esta es mí adorable sobrina Heather Merry Turner, no crees que es la misma imagen de una Diosa griega?—yo hice mí venia de saludo y me mantuve en mí lugar hasta que la mujer dijera que era un gusto en conocerme y ofrecerme su mano, paso un segundo que me parecó una eternidad, la mujer con su voz roca dijo que era un gusto en conocerme, se acercó a saludarme y verme mejor, volteo ligeramente mí muñeca sin esfuerzo para ver mí extraña marca, mientras hacia eso mí tía le decía que estaba inscrita en el instituto de la Señorita Murphing, entonces sonrió y le dijo a mí tía: entonces vas a tener una perfecta señorita, si realmente es una de nosotras, Merry Turner, tienes una bella sobrina y bonita figura, me podrías traer un te con dos terrones de azúcar?—hice una segunda venia de saludo y baje lentamente las escaleras, la puerta de la sala de recepción se cerró atrás de mí, baje hasta la cocina Beth me esperba con las tazas de te preparadas y una fina tetera de porcelana inglesa con detalles de campiña donde se columpia una hermosa mujer.

Beth me hizo tomar la bandeja y vió que para mí estaba pesada, así que decidió llevarla ella hasta el descanso del último piso superior, entonces me dejó la garra, con cuidado subí la bandeja sin derramar el contenido de las tazas, toque la puerta dando dos puntapiés y pregunte si podía pasar? el olor de galleta recién horneada inundo la sala de recepción, las dos mujeres dejaron de hablar y observaron como llevaba la bandeja hasta ellas, mí tía espero a que acomodara las tazas para servir, tome la garra con las dos manos, una deteniendo la garra y otra tomando para servir, lo hice como la maestra de modales me había enseñado, con cuidado y sin derramar ni una gota, tampoco debía colocar la punta de la garra sobre la taza, el humo y olor del se te levanto por encima de la taza, mí pustura al servir era con las pierna juntas sin doblarlas, la espalda recta, los brazos firmes pero sin tener fuerza, el vientre debía estar firme, en ese momento entendí para que había sido el trabajo con los chicharos y el amasar la masa, ahora tenía la fuerza para servir correctamente una taza de té y poner las galletas correctamente frente a la invitada, luego de servir me quede esperando a que mí tía o la señora me indicaran que hacer, la señora me indico sentarme junto a ella en el sillón de a lado, entonces me pregunto si sabia tejer, le contesté que en la escuela me estaban enseñando y estaba haciendo un capa para el frio, volteo para decirle a mí tía que realmente estaban dandome una buena educación, mí tía le dijo yo había hecho las galletas y el té, volvió a sonreír, me pidió mostrarle mí forma de tejer, mí tía me trajo un tejido que ella estaba haciendo, ví la puntada y comencé hacerla, las dos mujeres también comenzaron a tejer mientras continuaba la conversación sobre que estaba aprendiendo, me pregunto si aun enseñaban matemáticas para el hogar, le comenté que ahora se llamaba administración para el hogar, la mujer comenzó hablar de los tiempos que ella fue al instituto, le dije que también estaban impartiendo literatura, eso para ella era muy avanzado, pero le daba gusto que podría convertirme una buena ciudadana y una magnifica esposa, le comenzó a decir que la mejor opción para mí sería el hijo de la familia Cardrait, el era un buen partido, ya que también había nacido fuera del pueblo y tenía una historia parecida a mí, quizás podríamos ser un buen matrimonio por eso, comenzó a decirme que era un admirable muchacho y ella ayudaría para que pudiéramos conocernos, mí tía acepto la ayuda con gusto, las dos mujeres estaba organizando y decidiendo mí vida en 10 minutos que llevábamos tejiendo, también comenzaron a hablar sobre las reuniones de anfitriones y sus magníficas comidas, le informó a mí nueva tía que el comité había aceptado que ella dirigiera para ese año electivo que se encargara de los aperitivos y el plato fuerte, eso era un cargo importante en comité.

Luego comenzaron hablar sobre vestidos que usarían las señoritas para la siguiente reunión en 3 meses, era como un tema importante para la economía local, se movía mucho dinero en telas accesorios y zapatos, las menos previligiadas compraban sus vestidos, pero las que mejor posición tenían mandaban hacer sus vestidos con las mejores telas que llegaban a la tienda, por eso mí Tía tenía una mangifica posición ante las damas del pueblo, la conocía todas y sabía cosas de todas las damas, servía como comunicadora oficial entre las familias, negociaba fuera de las negociaciones, quizás lo hombres eran quien decidían, pero las verdaderas negociaciones, lo hacían ellas, por ellas se movían las tierras de una familia a otra, la Familia Turner era solo importante por eso, sino por tener ¼ de las mejores tierras de cultivo, pero que actualmente por falta de un hombre en la familia, no estaban siendo trabajadas, se estaban deteriorando, por eso era imporante mí papel en todo este enredo, el Capitán estaba decidido a obtener esas tierras a costa de perder dinero, según estimaciones de la Sra. Stockton en tres años podría resolverse el caso de las tierras, cuando tuviera la edad suficiente para  que pudiera pasar frente al juez y tomar una decisión sobre mí vida, entendí fuera de tecnicismos legales  que ni el abogado jhon pudiera explicar tan claramente como las dos mujeres que tenía frene a mí la situación legal sobre mí destino, mí caso estaba en una jurisprudencia o sea una modificación del marco legal dispuesto por las fundadoras, era una cuestión legal entre leyes estatales y locales, por el momento las leyes estatales ganaban por el hecho de que yo había quedado bajo la custodia de mí tía Merry y debía ser educado como una señorita según las leyes locales y el sistema de educación local, por que según las leyes que estaban vigentes y validas, yo era una mujer con derecho a las propiedades de mí familia, pero entendí que la treta del capitán era decir que yo no era una mujer, sino un hombre, pero debido a que venia fuera de la localidad debía ser educado como mujer por que yo era una mujer fuera de la localidad y las leyes avalaban la forma en que debía ser educada de esa manera, pero hasta cumplir los 25 años, sería libre para decidir mí destino si quería seguir siendo mujer según las leyes locales o u hombre por la leyes estatales; pero a fin de cuentas el Capitán Cardrait tendría posesión de la tierras, porque si: no tenía un hombre la familia según las leyes locales, entonces las tierras serían donadas a quien las estuviera cuidando y solo se daría una cantidad dadivosa económicamente para apoyo al municipio local, y si yo decidía ser hombre según las leyes estatales, entonces no podría pertenecer al pueblo y rechazaría mí linaje, en consecuencia el linaje se perdería para siempre

En el momento de escuchar todo eso, realmente no comprendía el tamaño de mí decisión, solo comprendía que debía ayudar a la mujer que decía era mí tía, la única pregunta que tenía en ese momento fue el significado de mí pequeña luna en mí muñeca, por que tenía uno, eso que significaba para ellas, la Señora Stockton con paciencia y comprensión, todas las mujeres que nacian en el hospital del pueblo se les hacia esa pequeña marca en momento de hacerles hoyitos de las orejas, desde los tiempos de las fundadoras, decidieron marcar el destino de los linajes estaba en las  niñas y aunque entre los varones hubiera luchas y peleas, la armonía y la paz quedaría en las niñas, era una forma de vida y actuar, era una función que jamás se debía olvidar, la función de las niñas era como la luna, solo aparece cada 28 días en la semana de la paz y su deber es cuidar de los hombres, para después con sumisión dar todo de su ser para lograr la procreación y la continuidad de las familias, realmente no era un juego ser mujer, era un asunto de vida y responsabilidad.

En el libro que estaba leyendo encontré más referencias sobre la nueva y verdadera función de las mujeres, era recibir y dar, además de cuidar y velar por los demás, no era cuestión de fuerza o dominio, era cuestión de dar continuidad a la madre tierra.

Termine una vuelta de la prenda que mí tía estaba haciendo y me pidió muéstrasela a la Sra. Stockton para revisar mis puntadas, a detalles metió su pintada uña roja entre las puntadas, dijo que estaban un poco flojas, pero estaban bien, solo debía practicar más y tener fuerza en los dedos, el tener uñas largar ayudaba a tejer, pero a mí tía no le gusto y entonces deshizo lo que había hecho para que pudiera volverlo hacer, así bajo la estricta mirada de mí tía y la señor Stockton escuchando las historias de la mujeres del pueblo volví a tejer, esta vez con más cuidado, al final la postura con las piernas juntas puestas hacia un lado, la espalda recta sin encorvarla, tejiendo con las manos levantadas sin tenerlas en el regazo,  la sentía cómoda y quizás ya podría estar muchas horas en esa posición sin cansarme.

Por fin acabamos nuestro té y galletitas, el tejido quedo pendiente para ser acabado en más reuniones de té y galletas, la Sra. Stockton hablaría con la directora para que en la próxima reunión de anfitriones para que yo fuera la representante de todas las estudiantes y diera las flores al presidente del comité.

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El día domingo fue un buen día para mí, todo era nuevo y maravilloso, llegue a la iglesia en un lindo vestido de encaje blanco y medias blancas, sentía que volaba a pesar de que no había tomado mis medicamentos, sentía que era la mejor chica del pueblo, todos los chicos me veian con atención y las chicas sentía su envidia, vi a Beth en la última fila de la iglesia, traía un sencillo vestido rosa y un gorrito con flores, ella sabia su lugar en la sociedad, quizás ella podria ser fuera del pueblo otra persona y quizás ser libre, ella había decidido ser quien debía ser una mujer para servir a una familia de ricos.

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El padre dio una magnifico sermón de génesis 2.22 sobre como creo dios a la mujer, nuevamente entendí mí papel en la vida y el gran destino tenía frente a mí, el hombre fue creado y fue llevada a él, “entró en él”, la mujer entro en él, eso es la forma correcta de procreación, pero  víbora nublo la mente e hizo que el ego de la mujer cambiara de lugares el abajo y ella arriba, eso fue el motivo de dejar el paraíso.

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Mientras mí tía se despedía del padre un joven alto y fuerte que se colocó atrás de mí tía para que no viera que me estaba tratando de llamar la atención, preguntándome mí nombre con señas de su dedos, yo trate de decirle que me llamaba Heather a través de diseñar una flor de brezo en aire con los dedos, el chico no entendía, mí tía volteo hacia mí y con mí dedo le señale que quería un helado, mí tía trato de ver con quien había estado hablando, el chico fingió que no lo veia. Mientras caminaba tomado del brazo de mí tía, ella me recrimino que no debía hablar ese chico de la familia Cardraid, no entendí en ese momento, si era de la familia cardraid entonces era el hijo heredero de la familia y entonces era conquien debía casarme, no era así?, ella me dijo que ya no hiciera preguntas y caminar más rápido.

Comí un rico helado de mí restaurante favorito, y caminamos por rato por le pueblo, hice que mí tía me comprara un nuevo perfume y un prendedor para el cabello para usarlo en la escuela, con discreción compro en la tienda de municiones una caja de toallas para que las llevara en mí bolso de mí jumper todo el tiempo, eso despistaría a quien tratar de investigar mí verdadero sexo.

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Regrese con mí tía desfrute de mí tarde ayudando a preparar alimentos para los huéspedes, mientras me concentraba en mí tarea de pelar chicharos, Beth me llamo la atención de que un chico quería hablar conmigo desde la ventana, era el chico de la iglesia, no le dije que no podía salir, mí tía estaba en el comedor, Beth me dijo que ella me cubriría diciendo que estaba en baño, Beth era de mí edad y conocía la necesidad de un chico por ver a una chica, quizas la amistad de ella era diferente a lo que conocía que sería una amistad, quizás debería entender mejor lo de sumisión.

Salí por un momento al patio trasero de la casa, el chico era más alto del común de los hombres del pueblo, parecia que realmente no fuera del pueblo, le pregunte si realmente era la familia Cardraid, su voz era ronca como las mujeres de ese pueblo, pero parecia un verdadero chico, mí voz era más delgada y aguda desde que había llegado al instituto para tomar medicamentos e inyecciones, comparada con la de él, era femenina desde el punto de vista de una chica de fuera del pueblo, le pregunte como se llamaba, el jugo con su nombre diciendo que se llamaba Willy CArdraid y estaba castigado a estar en ese pueblo, le pregunte  por que?, el dijo por conocer lindas chicas como yo, le pregunte si tenía novia?, el negó que tuviera una, pero para el sería mejor permancer el pueblo, no entendía lo que decía, le dije que tenía que regresar a la casa, pero antes de irme me pregunto como me llamaba, le dije que Heather Merry Turner, ya estaba identificado con ese nombre, el me pregunto si era la chica rara que venia fuera del pueblo, le afirme con la cabeza y le dije que mí tía no quería que le hablara, el dijo que no era malo que fueramos amigos, me hizo prometerle que seríamos amigos, así solo se alejó de la casa, entre en justo momento de que mí tía entro a la cocina, fingí que estaba bostezando, ella no supo nada de mí salida furtiva, Beth había escuchado todo y mientras me ayudaba a prepara mis cosas para irme a esperar el autobús, en su forma acostumbrada para hablar con la cabeza baja, me dijo que era un buen chico además de guapo, me dijo que el jamás iba a pertenecer a la comunidad aunque el quisiera, era una suerte de que se haya fijado en mí, yo no sabia si era suerte o un problema.

Pero con todo lo que me estaba pasando era emocinante saber que un chico se fijara en mí como una chica. Quizás eso fue el motivo de que saliera para platicar con él.

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 Las semanas pasaron en el instituto aprendiendo a como comportarme con las compañeras, el hecho de ser nueva y con el encargo de realizar la próxima reunión de anfitriones, levanto envidias, pero con la ayuda de mí amiga y compañeras que había ganado por entrar al equipo de animadoras, fue sobre llevando la situación, además de ganar popularidad y confianza.

Bajo la observación de la doctora y la directora, me convertí en una digna presidenta de clase, mis pechos se desarrollarón mejor de lo que pensaban, también mis caderas aumentaron, ganando peso, pero sin llegar a ser obesa, el tener una figura linda era algo importante en el En cuanto a Willy, mí amiga sabia de él y pensaba que sería un buen partido y un augurio el hecho de que se fijara en mí.

En una junta de comité decidimos que el color de vestidos sería el azul pastel, todas estuvieron de acuerdo, serían vestidos sencillos de crinolina, usaríamos en el cabello moños rosas.

Yo daría un discurso de agradecimiento y entregaría las flores al presidente del comité de padres benefactores, la fiesta sería por la noche en el salón de deportes del instituto, todo resulto como lo planee, las chicas hicieron su parte y las animadoras dieron los mejor de sí.

frente a todos dí mi discurso enalteciendo los valores del insituto para señoritas y su contribución a la sociedad, las palabras fueron revisadas por la directora, realmente ella estaba orgullosa de mi, era un ejemplo para todas las alumnas.

En poco tiempo habia subido como la espuma, un año más tarde todas las hijas de las principales familias era mis amigas, era feliz al lado de mi tía merry.

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en ese año habia superado mis miedos y ahora era como cualquiera de las mujeres del pueblo, me energullecia en serlo, mi principal benefactor deseaba que saliera con honores, mi tía también, por que de esa manera podria trabajar en alguna de los negocios de mi benefactor, realmente no se solicitaba trabajo, se invitaba a trabajar, yo recibí mi invitación para trabajar en muebles Cardrait, sabía de maderas, de contabilidad y de manejo de archivo, además de escribir correctamente en maquina de escribir, tenia lo necesario para un importante trabajo como asistente secretarial.

Trabajaria mientras mi futuro esposo regresaba de universidad de la guerra, para ocupar el principal posición en el pueblo y su familia, pero realmente el proceso legal continuaba y estaba estancado por enfermedad del juez que llevaba el caso, yo trataba de mantener la calma, pero sería una decisión díficil.

pero mientras sucedia eso, yo debia trabajar para ayudar a mi tía, por un tiempo tenia libertad de decidir lo mejor para mi, aunque solo tuviera tiempo para ir a trabajar y regresa a la casa de huéspedes de mi Tia para ayudarla con los inquilinos.

era una vida cómoda para una chica de mi edad, iba a cumplir 25 años y ya no recordaba a la persona que habia llegado a los 22 años a vender madera, ahora era una orgullosa jóven que trabajaba bajo las ordenes del Gerente genera el Sr. Keys.

mi ropa debia cambiar, ya no podia usar crinolinas, ahora debia vestir formal para oficina, bajo la ayuda de mi tía, diseñe mi propia ropa de oficina, por haber vivido fura del pueblo recordaba la ropa que usaba las asistentes ejecutivas o mejor dicho en palabras para el pueblo: secretarías, así diseñe faldas largas de lapiz, blusas blow, sacos cortos o blusas son mangas, el hecho de usar lentes me daba un aspecto más inteligente, mi jefe decia que era la más linda de sus empleada que habia tenido, mi tía habia hecho traer zapatos altos solo para mi, por mi educación podira caminar en ellos sin problemas.

Pero dentro de mi apicible vida, tenia una preocupación: Willy  realmente me habia enamorado de él, el también de mi, pero nadia debia saberlo, hasta el momento habimos podido disimular nuestra relación, en las fiestas de benefactores nos veiamos a escondidas y cuando estaba en le pueblo con mi tía, pero yo aun no entendía por que no debia enamorarme de él, por que mi novio oficial desde la primera reunión de benefactores que organice me fue presentado, también hicimos un click por nuestro pensar muy parecido sobre los nuevos cambios que debia tener el pueblo, para mi sentía que era como un hermano, durante las visitas a mi tía habia un espacio y un tiempo para él, comia conmigo en la casa y me invitaba a ir a mi lugar favorito para tomar una malteada, me llevaba regalos caros y cosas lindas para alegrarme mi día, me gustaba estar con él y hacer cosas con él, pero en cuanto se iba, Willy aparecia para voltearme de cabeza por su necedad de verme y preguntarme cosas raras, no se porque le dí un beso en la primera reunión de benefactores que organice, mi amiga me ayudo a verlo a escondidas argumentando que me habia dolido la cabeza.

ahora que tenia más tiempo y mi novio no estaba podia hacer de las suyas, el era como un vago sin proposito en la vida, era solo aceptado por ser hijo de su padre, pero realmente no sabia lo que hacia, tenia un aspecto de vaquero igual a los 5 tipos que conocí cuando llegue, me parecia que arriaba ganado y hacia labores de campo.

me gustaba su acento pueblerino.

hasta el momento la relación solo habia pasado de algunos besos clandestinos y ausencias largas y encuentos fortuitos o mejor dicho planificados por el para verlo sin problemas.

llegaba todas las mañanas hacer mi trabajo, prepar cafe y traer el periódico, ponia flores en mi escritorio, organizaba la correspondencia.

mientras hacia mi trabajo, descubrí un sobre de correspondencia con el logo de la empresa madededera donde habia dado la encomienda de vender en la zona sur, no podia abrir el sobre, pero estaría al pendiente de lo que contenia una vez que fuera abierto.

aun no entendía el por que del sobre, pero descubrí que los lazos comerciales del capitan Cardraid era muchos, el habia estando buscando a la heredera de la familia Turner y dio con ella, así que yo si era familiar directo de mi Tia Merry Turner, ella era mi verdadera tía. y yo la heredera según las leyes de SThephor.

ahora entendía las palabras de mi padre alcoholico, aunque ya no sabia si era el mi padre o un amigo que le encargo cuidarme.

tenia muchas dudas y confuciones, para aumentar todo mi caos mental, mi tía me dijo la verdad sobre Willy, el era mi hermano;. yo ya me habia dejado tocar por el, aunque no descubrió que tenia pene por la premura de salir corriendo, me hizo senti mucha emoción, sentí que mis panteletas estaban mojadas.

la fecha para presentarme ante el juez se acercaba, también mi fiesta de mayoria de edad, Habia dejado de ver a Willy y mi jefe decia que mi carácter estaba como una yegua encabritada, yo sonreia y le decia que extrañaba a mi novio esa era la razón.

mi tía habia determinado que mi fiesta de mayoria de edad sería después de ver al juez donde decidiría lo que queria ser, ella pensaba que me quedaría en el pueblo, pero yo estaba muy confundido, pero cuando ví a Brad mi novio y futuro esposo antes de la presentación aclaró mis dudas y me dio la fuerza para seguir, acepte mi lugar en mi familia verdadera y en el pueblo que jamás debi salir.

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